Capítulo 14 - El más rápido

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La sangre del japonés goteaba sobre la arena, habiéndose retirado lo suficiente de su rival para estar más a salvo de ese tridente manchado de sangre. Si llega a reaccionar un instante después, la pelea ya habría terminado con ese ataque a tan poca distancia, pero aunque era tuerto, sus reflejos eran muy buenos.

Mientras él ponía su brazo sobre sus heridas, frotándolas un poco, Tritón sonrió macabramente mirándolo mientras se incorporaba, llevando una mano a su mejilla.

- ¿Viste eso, padre? - preguntó - El primer golpe certero de esta pelea lo he ejecutado yo, al igual que hiciste tú en la tuya. Ciertamente es un comienzo hermoso, padre... ¿No lo crees? Por favor, mírame... Mírame destruir a este insignificante humano.

Negó muy lentamente después de eso, desconcertado ciertamente al japonés, pues parecía que estaba hablando solo. Él tenía entendido que no había nada más allá de lo que le esperaba al morir ahí... No había nadie mirándole desde el cielo, como románticamente se cree. O bueno, tal vez Tritón pensaba que si. No se sabe muy bien qué es lo que hay... De todos modos, la cierta locura que mostraba el dios no hizo que Masamune dejara de lado su sonrisa de siempre.

 - Si la batalla comienza como lo hizo la anterior... terminará de la misma manera.

Tritón hizo una desagradable mueca, dejando de mirar al cielo para ver al otro aburrido, haciendo un gesto con la mandíbula hacia los lados.

 - La pérdida de sangre te hace decir tonterías... pero tranquilo, no durará mucho. Mi padre... estará orgulloso de mí... ¡Y tú serás una deshonra para tu maestro!

El agua detrás de él empezó a alterarse, creando una gran ola que se levantaba y tapaba el sol en la arena, teniendo Heimdal que moverse rápidamente en su vehículo volador de un columpio con dos aves para que no fueran mojados.

 - No me asusta una ola y un dios demente enojado. Hay mil cosas peores.

 - ¿De-demente?

La palabra hizo que Tritón abriese un ojo mucho más que el otro, enseñando los dientes, dejando tras de sí un gruñido irritado.

 - ¿Piensas que estoy demente por hablar con mi padre? ¡Es mucho más absurdo hablarle a unos dioses a los que no les importáis lo más mínimo, vulgares mortales!

De la gran ola de su espalda, comenzaron a salir bolas de agua rápidas del tamaño de balas de cañón que iban hacia la posición de su rival, saliendo varias por segundo de diferentes lugares. Masamune sonrió, doblando las rodillas mirándolas de frente, empezando a moverse a gran velocidad hacia los lados, evitando todas las balas, haciendo que estas se estrellen contra el agua detrás de él o contra la barrera defensiva de la arena.

 - ¡Increíble la velocidad del representante de los humanos! - Heimdal se emocionó mirando desde las alturas - ¡Está esquivando todos los ataques de Tritón a una velocidad increíble, casi puedo decir que veo más de un Date Masamune ahí abajo! ¿Será esta la famosa "Defensa de las mil imágenes" de Sasaki Kojiro que le ha enseñado a su alumno?

Los que estaban en las gradas murmuraron sorprendidos entre ellos, sonriendo los humanos al ver a ese representante tan espectacular... que estaba demostrando ser un fiel alumno de Sasaki Kojiro. Sin embargo, en las gradas de los dioses había otra clase de emoción. Tritón no era un dios que se dejara ver con facilidad, y estaban algo decepcionados por su comportamiento. No parecía muy cuerdo... pero callaban en silencio su pensamiento de que ser el hijo de Poseidón seguro traía algunas consecuencias no muy sanas.

 - La "Defensa de las Mil Imágenes" no es algo que Masamune pueda dominar...porque él no es un Escáner como lo es Sasaki. ¿Cierto?

Hrist observaba la pelea con las manos juntas, al lado de su hermana menor. Con su pregunta, se giró hacia su antiguo Einherjer, que tenía una pequeña sonrisa acariciando su mentón mientras miraba el combate.

Shuumatsu no Valkyrie - New EraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora