Un Fragmento De Ti

Capítulo 15.

El tiempo pasaba y con ello el arrepentimiento de YiBo se hacía más fuerte, no podía distinguir que era lo que más había odiado... si el hecho de que Xiao corrió preocupado preguntando que si SeHun había olvidado algo o el hecho de que le había provocado náuseas al omega.

–YiBo, ¿por qué llegaste y no saludaste a tu bebé?

El heredero de los Wang sabía que su primogénito no tenía la culpa de los errores que había cometido, por más que no soportaba a Kity no podía negarle el cariño a la personita que venía en camino, decidiéndose así a acercarse. –Hola bebé, sigue portándote bien ¿quieres?.

–Listo –dijo YiBo alejándose del vientre de Kity.

–Mira, no se a donde fuiste para regresar con pésimo humor pero te advierto que a mí me tienes que tratar bien Wang YiBo.

–Como digas –fue lo último que dijo YiBo antes de salir de la mansión nuevamente.

Una vez que regresó, Kity lo estaba esperando en la habitación principal usando un conjunto de encaje azul que sabía bien que YiBo amaba y esa vez no fue la excepción...

–Sí YiBo... ah... ahí...

Los gemidos de Kity resonaban en la habitación al ser llenada por YiBo una y otra... y otra vez, una vez que terminaron la omega abrazó al alfa pidiéndole una cosa.

–Alfa mío, quiero ser tuya para siempre. Márcame por favor –pidió Kity por primera vez sonriéndole con ternura.

YiBo tragó grueso, esas palabras quería escucharlas de Xiao Zhan no de ella. Si tan sólo no hubiera sido un idiota inmaduro su vida hubiera sido otra "Fui un tonto por haberle dicho a Zhan que éramos negocio, si yo mismo hubiera aceptado desde la prepa que él era mi omega lo hubiera cortejado y en éste momento él estaría llevando a mi primogénito. Extenderíamos nuestras empresas, él despertaría a mi lado y no al lado de SeHun, detesto pensar en que algún día podría quedar embarazado de él".

–Lo siento Kity pero especialmente hoy no quiero saber nada de marcas –fue lo último que dijo YiBo antes de abandonar la habitación.

🐇

Lejos del desdén de aquella mansión, se encontraba un hogar donde la calidez se encontraba en todos lados. Desde la entrada donde el amo de la mansión llegaba con la cena para todos, incluyendo su personal. Cada noche la misma rutina de colgar las llaves del auto y en silencio entrar por la puerta trasera proponiéndose asustar a su pareja...

–¡Zhan...!, ¿qué ocurre?, ¿por qué tienes tus ojitos rojitos amor? –le preguntó quitando las lágrimas que aún corrían por las mejillas del omega.

Xiao no quiso mentirle pues de todos modos YiBo le había dejado un moretón en el brazo cuando lo quiso detener, le platicó lo que había ocurrido... –Perdón, no volveré a verlo. Ya le dije que ni siquiera se nos acerque.

SeHun era un alfa paciente pero el hecho de que YiBo intentara marcar a Xiao lo había puesto tan molesto que incluso Xiao tuvo miedo.

–Cariño por favor no te pongas así –pidió Xiao al ver que SeHun tenía muy tensa su mandíbula, los puños cerrados y caminaba de un lado a otro furioso...