Mafia vs Mafia (Completa ✓)

Capítulo 45

Natalia.

Tiene rato que desperté y la cabeza sigue doliéndome a tal grado de que no soporto ni la luz.

Lo único que me hace sentir bien es que estuve en los brazos de mi padre pero también pienso que tal vez lo soñé.

-Ya casi nos vamos -Me dijo Luigui entrando a la habitación en donde estaba.

-Corre la maldita cortina -Le dije molesta.

Lo hizo de inmediato y luego me guiñó un ojo mientras caminaba hacia a mí

-Lo que sea por mi esposa -Se inclinó para besar mi boca.

¿Qué no se ha dado cuenta del asco que me provoca.

-Quiero irme de aquí -Le dije cuando separó sus labios de los míos.

-¿Quieres ir a casa? -Agarró mi mano.

-Quiero ir a mi casa -Recalqué las últimas palabras dejándole saber que necesito alejarme de él.

-Será mejor que duermas, nos iremos en una hora.

Torsí los ojos pero luego los abrí más cuando se acercó a la manguera de suero y sacó una aguja.

-¿Qué haces? -Le pregunté alarmada.

-Duerme, ésta droga no te hará daño.

Empecé a sentir cansancio y el dolor de cabeza aumentó. Mis ojos iban cerrándose aunque yo me negara.

-Te amo... -Susurró cerca de mi rostro.

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Volví a abrir los ojos y ya estaba en otra habitación. La cabeza no me dolía tanto, sólo el golpe que tenía en la frente.

Me levanté despacio ya que sentía un mareo pero logré reponerme.

Me puse las sandalias que estaban en el suelo y salí de la habitación.
Era una casa distinta a la que estábamos así que sólo caminé por caminar pero después ví a Luigui y Kathia sentados en un sofá.

-¿Cómo lograste salir de ahí? -Le preguntó Luigui a su hermana.

-Con ésto —Le mostró un artefacto pequeño.

-¿Qué es eso?

—Un aparato que lanza pequeñas flechas. Cuando la punta toque tu cuerpo te dejará inmóvil -Explicó Kathia admirando lo que tenía en la mano.

-¿Cómo funciona? -Se levantó para ir a sentarse al mismo sofá en donde estaba su hermana.

-Parece un arma normal, sólo tiras del gatillo y saca la flecha.

-¿Cómo lo conseguiste?

-Tuve que acostarme con un científico loco de 60 años y en cuanto le dió el infarto pues lo tomé de su bolsillo.

-¿Cómo sabías que esa arma sirve para inmovilizar?

-El loco me lo explicó, salí varias veces con él pero sólo lo hacía por tener esta maravilla conmigo -Le dió un beso al aparato.

-Estás loca -Murmuró torsiendo los ojos.

La hija de perra le inyectó eso a mi papá y a los demás.

Sentí tanta rabia que quise bajar pero me controlé cuando Kathia se acercó mas a su hermano.

-Tienes que decirme, ¿Por qué te casaron con Grecia?... O con Natalia... Como sea.