Capítulo 49

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Rosa.

Ya ni siquiera puedo acostarme en posición fetal porque hace recordarme las veces que me violaron.

Preferí doblar las rodillas y abrazar mis piernas mientras lloraba.

Ya no quiero vivir ésto, estoy agotada y empiezo a desear la muerte.

—Alonso... —Susurré en chillido.

Decir su nombre me hace sentir un poco mejor. Lo extraño y cómo me jode no haberle hecho caso.

—Mi papá quiere que lo visite —Le dije sin dejar de guardar mis cosas.

—¿Ahora? —Se sentó en la orilla de la cama.

—Sí, dice que estaré más segura con él y se sentirá mejor.

—Estás segura conmigo.

Sonreí antes de darle un beso en la boca.

—Lo sé pero quiero que entiendas que él es mi padre y el hecho de que me busque para que estemos juntos me hace sentir emocionada.

—Entiendo —Acarició mi mejilla—, pero algunos hombres van a ir contigo al igual que yo.

—Tú no puedes ir, cariño.

Bufó pasando las manos por su rostro

—Quiero que te quedes aquí —Me dijo casi en súplica.

Lo miré con la esperanza de hacerlo cambiar de opinión.

Mi papá no me buscaba como ahora y ésta vez quiero aprovechar cada momento.

—Pero tampoco puedo prohibirte que no vayas —Dijo al fín con una sonrisa—. Sólo avísame cuando estés con él y me mandas tu ubicación a cada rato.

Asentí emocionada antes de subirme a horcajadas en él y besarlo.

Empecé a sollozar pero alguien tosió.

—¿Vas a llorar otra vez? ¿Es que acaso no te follan bien? —Preguntó Mohan, el tipo que me secuestró

Pasé saliva sintiendo terror. Ya no quiero que me toquen, no otra vez.

Me quedé quieta escuchando los pasos que se acercaban.

—Te hice una pregunta —Me habló agarrando mi barbilla con fuerza.

—Tengo hambre... —Dije mirándolo a los ojos ya que me ha dicho que odia que le hable sin mirarlo y la última vez me dió 3 bofetadas y 2 patadas.

—Debiste pedirlo desde hace un rato, mi amor —Dijo antes de besarme.

Agradecí que el beso no durara mucho y me soltara de inmediato.

—Pediré que te traigan de comer —Dijo con voz suave.

Caminó hacia la puerta y me guiñó un ojo antes de salir.

Puse mi mano contra mi boca para que no se escucharan mis sollozos pero sentí un nudo en el pecho.

Sálvame, Alonso, ven pronto.

Miré la cama y después la ventana para darme cuenta de que ya era tarde, pronto llegaría la noche y esos asquerosos abusarán nuevamente de mí.

Jadée antes de morder mi labio inferior y luego suspiré.

Me levanté para ir hacia la ventana... La maldita ventana que no se abre y aunque así fuera, mi cuerpo no cabe para que logre salir de aquí.

La puerta se abrió nuevamente y me giré de inmediato poniéndome en alerta.

Mafia vs Mafia (Completa ✓)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora