pienso en vos ¦ yeonbin •°∘ ✧ ·

14 🔥

La espontaneidad de un chico no tan heterosexual (parte uno).

Soobin ingresó a su departamento y encendió todas las luces, sintiéndose extraño al entrar a un lugar tan silencioso luego de haber pasado tanto tiempo con bullicio a su alrededor. Beomgyu se había ido a la casa de Taehyun, y los otros dos habían vuelto a su piso.

Se dirigió directo a su habitación y se desplomó en su cama. La suavidad de sus cobijas prometía envolverlo, pero Soobin no se sentía capaz de empezarse a desvestir aún. No cuando llevaba la campera de su mejor amigo aún puesta, la cual olía como él. Para ser exactos, olía como el perfume de Yeonjun, y a su sudor y el propio combinados; los últimos dos aromas mucho más tenues, pero definitivamente estaban ahí.

La idea de tener sus esencias mezcladas lo devolvía al momento que habían compartido en los baños del restaurante, pensamiento que lo dejaba inquieto e insatisfecho. Si tan sólo Yeonjun hubiera vuelto con él... Podrían tener todo el departamento para ellos dos, solos, para usarlo como se les diera la gana. Podrían haberse estado besando en el sillón en la sala, con música de fondo...

De pronto su celular comenzó a vibrar, con una llamada entrante del pelinegro de sus pensamientos.

— ¿Sí? — descolgó.

— Binnie. — respondió Yeonjun. — ¿Ya estás en tu casa? — consultó.

— Oh, sí. Ya estoy acostado. — contestó Soobin, acomodándose en la cama y poniendo a su amigo en altavoz.

— Hm, yo también. — contó el mayor, su voz unos tonos más bajos que lo usual. — No me contaste lo que pasó con Beomgyu y Taehyun. — le recordó.

— ¡Cierto! Me olvidé. — exclamó Soobin, listo para contar lo que había sucedido. Yeonjun le devolvió un sonido afirmativo, esperando por su relato. — Beomgyu desarmó su guardarropas completo para prepararse para hoy, incluso se vació la botella de perfume encima. — comenzó a relatar.

— ¿Escuché bien? Dijiste Beomgyu, ¿no? — chequeó Yeonjun desde el otro lado de la línea, la situación le parecía improbable.

— Lo sé, me costó creerlo también. — dijo el menor, de acuerdo con él. — Así que le pregunté si le pasaba algo, a lo que el taxista preguntó si iba a ver a una chica.

— Qué random, el taxista. — exclamó ligeramente. —¿Qué dijo Gyu? — retomó el tema principal el mayor, intrigado.

— Que no, por supuesto. Dijo que "no había ninguna chica" e incluso hasta parecía molesto por la pregunta, lo que me dio el pie perfecto para intentar ayudar a Taehyunie. — contó, contento. — No sabemos si a él realmente le gusta Beomgyu, pero pensé "¿Por qué no?", hacer de cupido nunca mató a nadie, ¿cierto? — Yeonjun le devolvió un sonido afirmativo, totalmente de acuerdo con él.

— Entonces, le pregunté si era por un chico, y no respondió. Escapó del auto más rápido de lo que lo había visto moverse nunca. — enfatizó Soobin, emocionado. — De haber corrido así en Educación Física lo habrían aprobado a la primera. 

Soobin rió al recordar lo sucedido esa vez durante la preparatoria. Ellos todavía no eran amigos, pero se habían encontrado en el campamento de verano por haber desaprobado esa materia. Yeonjun conocía la anécdota, porque Kai también había terminado ahí y era algo con lo que bromeaban seguido porque el menor de todos luego decidió hacer de eso su carrera universitaria, lo que era bastante contradictorio.

— No me digas... — exclamó una vez que recordó cuál era el tema principal en la conversación. — ¿En serio crees que ese sea el caso?

— No lo sé, no estoy seguro. — confesó el menor, porque tenía que admitir que sus sospechas habían surgido por algo mínimo. — Pero, hyung, si a Beomgyu realmente le gusta un chico...