Porque, ¿quién no se tocó pensando en su amistad más cercana alguna vez en la vida? Soobin definitivamente lo había hecho.
Y eso le parecía de lo más normal, hasta que aquel secreto decidió escapar de sus labios.
¿Lo peor de todo? Que se lo dijo al...
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Nombre: Choi Beomgyu. Edad: 21 años. Estatura: 1,81 cm. Ocupación: Estudiante de Periodismo y Comunicaciones. Signo zodiacal (solar): Piscis. Arquetipo de personalidad: ENFJ. Pasatiempos: tocar la guitarra, escribir en su blog, y molestar a sus amigos. Le gusta: Toto, los videojuegos, practicar wrestling con Taehyun y su aroma, IU, y el pollo frito. No le gusta: los tomates, el helado de menta granizada, y las comedias románticas.
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Las personas que Beomgyu aprecia.
Si hay algo que Choi Beomgyu ama y de lo que simplemente no puede tener suficiente es molestar a las personas que le agradan. Mientras mejor sea su humor, más molesto será para el resto. Le encanta ver sus caras de hartazgo y sus expresiones de cansancio, pero más le gusta cuando aquellos que lo conocen aceptan su comportamiento con gusto, porque así es su manera de demostrar lo mucho que los aprecia.
Su forma de ser normalmente le gana algunas reacciones que se repiten. Algunos simplemente ignoran este hecho y lo dejan ser, como su amigo Soobin; otros se vuelven molestos al igual que él, el caso de Huening Kai; otros intentan matarlo, así como Yeonjun y su facilidad hacia la violencia; y hay quienes simplemente se abstienen de tenerlo cerca (en simples palabras, no lo aguantan y lo esquivan, pero Beomgyu está bien con esto).
Pero hay una persona que simplemente no encaja en ninguna de esas categorías, o mejor dicho, encaja en absolutamente todas.
Taehyunie es su mejor amigo. Lo conoció cuatro años atrás en el club de música de su escuela, y desde entonces no pudo dejarlo en paz ni un segundo. Al principio se había obsesionado con él porque por más molesto y ruidoso que fuera, el menor simplemente lo ignoraba. No lo hacía adrede, sino que ni siquiera parecía notar su presencia, y eso era algo que nunca antes le había sucedido a Beomgyu. Así que tomó como misión el lograr captar su atención.
Comenzó hablándole a diario y probando maneras diferentes de intentar sacarlo de sus casillas, pero nada parecía funcionar. Hasta que cierto día, luego de alrededor de un mes de intentarlo, Taehyun cayó en su trampa al escucharlo hablar tonterías sobre los deportes de contacto. Esto le ganó una llave que lo dejó en el suelo quejándose de dolor, pero disfrutó cada segundo de ello.
Había visto que el menor a veces jugaba de esa manera con sus amigos en los recreos, por lo que asumió que finalmente se había convertido él también en uno y esa era su manera de demostrárselo. Por supuesto, ese no era el caso, Taehyun realmente se había molestado y le había dado su merecido, pero a su vez, sin quererlo, había abierto la puerta para que pudiera acercarse.
No les tomó mucho volverse cercanos, al punto de volverse inseparables. A Beomgyu le gustan mucho las reacciones impredecibles del rubio, pero su favorita es que lo abrace. Bueno, en realidad no lo abraza abraza, sino que lo envuelve en sus llaves hasta dejarlo sin aire. A veces incluso lo golpea contra el suelo, pero lo hace suavemente, así que él entiende que lo hace con cariño.
Choi sabe que si dice algo que no debería el rubio lo mirará de pies a cabeza con sus ojos de "sos un idiota y te pasaste". Si lo molesta personalmente, entonces intentará matarlo y sabe que probablemente le dolerá, por lo que trata de no hacerlo tan seguido. Ahora, si se mete con alguien que a Taehyun también le agrada molestar, entonces su mejor amigo se sumará a él con gusto, y así se vuelven un dúo completamente insoportable.
Aunque, lo cierto es que no todo es amor rudo con él. Taehyun también es bueno para darle palabras dulces cuando las necesita, y reafirmarlo con constante apoyo. Se encarga de cuidarlo aún cuando él es el mayor y ese debería ser tu trabajo, e incluso acepta sus abrazos convencionales cuando no está intentando ponerlo de los nervios.
Beomgyu puede ser molesto en paz con sus amigos, aún cuando a veces Yeonjun y Soobin le rueguen que haga silencio por al menos un segundo, y es por eso que los elige día a día para tenerlos cerca.
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Sus aspiraciones en la vida.
Si hay algo que Beomgyu disfruta más que molestar a la gente, eso es escribir para su blog. El castaño lo empezó sin pensar mucho al respecto, simplemente porque quería contarle a alguien y a su vez a nadie en especial sobre las cosas que le gustaban.
Una reseña sobre una guitarra nueva se transformó en varias haciendo focos en los diferentes aspectos de ella, a las que se sumaron críticas comparativas e incluso análisis extensos sobre música que le gustaba. Antes de saberlo todo aquello se había apilado en sus notas y simplemente optó por subirlas a un blog privado para organizarlas.
Para su sorpresa el blog resultó no ser tan privado, y con el tiempo le ganó algunos lectores fieles que esperaban escuchar de él con frecuencia. Animado con la respuesta sumó también notas y reseñas sobre sus videojuegos favoritos, y hasta terminó escribiendo algunas entradas personales.
Bien, ahora resulta más evidente por qué Beomgyu se encuentra estudiando Periodismo y Comunicaciones. El único que conoce sobre esto es su mejor amigo, para el resto siendo un total misterio lo que lo llevó a elegir esa carrera. Incluso sus motivos son desconocidos para Soobin, su compañero de departamento y de estudios, que a veces lo mira totalmente confundido cuando recibe críticas positivas sobre sus trabajos de parte de sus profesores, porque por fuera parece que a él la universidad le da totalmente lo mismo.
Realmente lo que le da lo mismo al castaño es estudiar y memorizar cosas que considera inútiles, porque está convencido que estudiar no lo es todo. Lo importante para él es concentrarse en aplicar lo que necesita para mejorar como (idealmente) futuro reportero, ni más, ni menos.
Le encantaría triunfar como guitarrista, eso está claro, pero conseguir un trabajo como crítico musical le gustaría igual de mucho. Su sueño es tal vez poder hacer ambas, porque no le gustaría dejar ni una ni la otra de lado, siendo ambas parte de su identidad y las mejores maneras de volcar su pasión.
