Relaciones para nada heterosexuales (parte dos).
— ¿Debería intentarlo con Soobin? — preguntó Kai, dejando caer todo el peso de su cuerpo en su cama luego de haber terminado de acomodar el colchón extra para los otros dos. Era de plaza y media, y aunque siempre se habían turnado para rotar la persona a la que le tocaría dormir sola, ahora que ellos estaban saliendo seguro que no dudarían en compartirlo.
— ¿Qué cosa? — respondió Taehyun, sintiendo la presión en su pecho volver a aparecer de sólo escuchar la mención de su nombre salir de la boca de su amigo.
— Confesarme. — devolvió el otro, con su vista clavada en el techo. — Siento que ya fue suficiente, ¿no? Pero aún así... Tengo miedo de lo que pueda decirme. ¿Y si está saliendo con alguien? Es como que... mientras no lo sepa, no es real. Algo así. — les contó, suspirando pesado. Por mucho que intentaba sacudirse el malestar que sentía de encima no parecía estarlo consiguiendo, y probablemente todas las cervezas que se había tomado menos de media hora antes en un impulso tampoco estaban ayudando demasiado a su estado anímico.
Lo cierto es que Huening ya estaba algo cansado de la montaña rusa emocional que traía consigo el estar enamorado de alguien que no parecía notarlo. Era sumamente dulce el tener sentimientos por uno de sus amigos más cercanos, porque la relación le daba momentos compartidos que lo hacían sentir muy privilegiado, y lograban engancharlo cada vez que sentía que ya era hora de dar un paso en otra dirección.
Sin embargo, su amistad era justamente la que lo dejaba estancado en ese limbo eterno de tener cercanía pero no la suficiente, de estar pero no del todo, de dar pasos en vano porque todos caían sobre la línea del círculo que Soobin había trazado a una distancia muy cuidadosa, la distancia a la que cualquier persona pondría a alguien que jamás podría llegar a estirar su brazo para tomarlo.
Kai a veces se convencía de que había sido suficiente, pero cada vez que lo hacía la comodidad de verlo sonreír y sentir calidez en su pecho lo mantenía petrificado en donde estaba, en esa posición que muchas veces lo hacía sentir miserable. Tal vez era la intensidad con la que sentía por él la que no le permitía desprenderse, el recordar que jamás se había sentido de esa manera con nadie, o el miedo de no poder encontrar nunca más ese sentimiento. Le aterraba pensar en que podía estar dejando ir al único para él, incluso si eso era imposible al nunca haberlo tenido.
— Sí, es entendible. — apoyó Beomgyu, mirándolo por sobre el borde de la cama con sentida empatía. Se le partía el corazón de sólo verlo así, pero no había mucho que pudiera hacer para ayudarlo. Tal vez intentaría presentarle a alguien, pero no podía pensar en nadie que pudiera gustarle más que Soobin lo hacía, porque el rubio estaba completamente cegado por él, al punto de que no le importaba en lo más mínimo la existencia de otras personas.
— Deberías intentarlo igual. — animó Taehyun, suavizando su tono de voz tanto como pudo, porque sabía que sus palabras serían bastante crudas. — ¿No es mejor saberlo? Digo, si Soobin está saliendo con alguien, a lo mejor hasta te ayuda a superar tus sentimientos por él.
— Eso no funcionó en el pasado, ¿por qué funcionaría ahora? — soltó Huening, lanzando otro suspiro pesado al aire. Los recuerdos de aquella vez en que vio a Soobin tan contento de la mano con alguien más volvieron a su mente, siendo más que suficientes para provocarle dolor físico una vez más. Sus sentimientos definitivamente habían crecido con él, tal vez más de lo que deberían haberlo hecho.
— ¿En el pasado? — preguntó Beomgyu, mirándolo con asombro.
— Hyuka, ¿cuánto tiempo llevas enamorado de Soobin-hyung? — intervino Taehyun, levantándose de la cama en el suelo para verlo con los ojos como platos. Kai le devolvió el gesto durante tan sólo un segundo antes de desviar los suyos hacia otro lado, intentando deshacerse de la humedad en sus pupilas. — ¿Por qué nunca nos dijiste nada?
ESTÁS LEYENDO
pienso en vos ¦ yeonbin •°∘ ✧ ·
FanficPorque, ¿quién no se tocó pensando en su amistad más cercana alguna vez en la vida? Soobin definitivamente lo había hecho. Y eso le parecía de lo más normal, hasta que aquel secreto decidió escapar de sus labios. ¿Lo peor de todo? Que se lo dijo al...