C a p í t u l o 5 2

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Capítulo 52

Después de mi declarada guerra con Dephne Ferrec las cosas fueron de mal en peor, a tal punto en el que mi novio, si aún lo llamaba de esa manera, tuvo que tomar la decisión de estar junto a ella por el bien de su familia y su futuro. La primera vez que ella restregó su victoria contra mi ego, fue en el baile de graduación, al cual asistió junto a Cameron, ahí se hizo pública su relación y nuestra ruptura.

-¿Bailas?- lo sentí cerca, y aunque no tenía nada relativamente malo con él, lo rechacé, di media vuelta para dejar de ver a la nueva pareja bailando, salí del salón donde tenía lugar la fiesta para poder tomar algo de aire, conteniendo las lágrimas.

-Te pedí que no la dejaras ganar- de nuevo él.

-¿Qué más podía hacer?- me senté en una banca cerca del lugar, por fin veía a los estudiantes de esta escuela comportarse como lo que eran, adolescentes.

-Seguir luchando por él- Lucah se sentó a mi lado, solo desvíe mi mirada cuando sentí que las lágrimas escapaban de mis ojos, aún luchaba por contenerlas.

-Su familia estaba sufriendo las consecuencias, sufría lo que ustedes hacen- le recrimine furiosa, esta vez fue él quien no pudo mirarme- ¿Cómo podíamos ser tan egoístas?

-Pero mantuve a tu familia a salvo...

-¿Cómo...?- cuando estaba por explicarme su hermana gritó su nombre para llamarlo, me dedicó una mirada larga, tomó mi mano sentí algo sobre su palma.

- Lo siento- besó el dorso de mi mano y se fue, dejando el objeto entre mis dedos, lo vi marcharse, Cameron estaba ahí con el ceño fruncido, no estaba de humor para seguir viéndolo, así que me marché sintiendo su mirada seguirme.

[ 2 años después...]

Podrán imaginarse lo que sucedió en estos dos años, lo resumiré para no hacer de esto algo constantemente repetitivo, Dephne obviamente utilizo todos los medios a los que tuvo alcance para hacerme la vida imposible, me restregaba su relación con Cameron cada día de una manera diferente, por otro lado, la familia Harries estaba recuperando su antigua gloria, ya no tenían más problemas económicos, de hecho ahora vivían mucho mejor que antes.

Me había convertido en hermana mayor de un pequeño niño que parecía no descansar jamás, siempre tenía energía para correr y saltar por todos lados, vi a Isabel comportarse como nunca antes, ese niño jamás tendría deficiencias emocionales como yo, pues tenía a su familia unida... O algo como eso, Noel seguía saliendo con su insoportable novia, el odio entre ambas era mutuo, pero por lo menos ella no tenía nada contra Dai, mi hermano, así que teníamos una especie de tregua.

Mi relación con Noel no podía ir peor y es que por su culpa la vida universitaria no era como lo imaginaba, no cuando mi padre me obligaba a estudiar algo que no me gustaba y peor aún que no comprendía, todo por hacerme cargo de una empresa que yo no deseaba.

En fin, estaba en clase de economía, de la cual no entendía ni lo más básico, mi maestro era un apuesto joven quien tuvo suerte en su vida y  la oportunidad de crecer rápidamente dentro su campo laboral, es lo único que había aprendido, en los tres meses que iban del semestre.

-Señorita, necesita acreditar el siguiente examen con una nota excelente si desea aprobar la materia- No podía darme el lujo de reprobar una materia más, o me metería en serios problemas.

-Lo sé, pero por más que intento no puedo retener nada de lo que explica- decido sincerarme.

-No se ofenda, pero como llego hasta este lugar sin comprender nada de las materias.

- No me ofende, pero debo admitir que no tengo idea- sostengo su mirada, una sonrisa de tristeza es la que me dedica.

-No te gusta esta carrera, ¿cierto?- me devuelve el examen con la peor nota que he tenido.

- No, pero hay personas que esperan mucho de mi- me encojo de hombros.

-Le asignaré un tutor, preséntese en mi oficina mañana a primera hora- asiento y salgo de ahí, queriendo ir a casa.

Se preguntarán ¿qué pasó con Cameron?, bueno aún seguimos juntos, nuestra relación ahora es un secreto, nadie de mi familia sabe que aún lo frecuento, vivir lejos de casa tenia esa ventaja, mis amigos habían ido a otras universidades, mis primos y Jade también, así que era más sencillo mantener mi relación privada.

Aquí no tenía amigos, así que éramos solo él y yo, en una burbuja donde me sentía completamente cómoda...o eso hasta que Dephne le exigía estar junto a ella, que era la mayor parte del día, pero teníamos un pequeño departamento a las afueras del campus donde vivíamos juntos, corrijo donde dormíamos juntos, porque la noche era lo único que compartíamos.

Llegando al departamento, deje mi bolso junto a la puerta y mis llaves en el recibidor, la pintura que Cameron me regaló por navidad y la que le había hecho por su cumpleaños era lo primero que se podía apreciar, no pude evitar sonreír al verlos.

-Al fin llegaste- me estrecha entre sus brazos pegando mi espalda a su pecho, deja besos sobre mi cuello- ¿Cómo te fue en el examen?

- Pésimo como siempre- sus besos siguiendo un recorrido a mis hombros desnudos, sus manos van tirando de la tela de mi vestido, hasta descubrir mi torso, entonces las siento acariciarme el abdomen subiendo ligera y lentamente, decido entregarme a sus caricias cálidas y a sus besos.

Me suelta el cabello antes de girarme para poder besarme, su boca sabe a menta, sus besos vuelven a descender por mi cuello, mi espada se arquea y un suspiro deja mis labios, lentamente me va guiando hasta el sillón más grande, donde nos entregamos uno al otro.

Esto era nuestra relación últimamente, no podíamos vernos fuera del nuestro pequeño hogar y dentro de él nos consumía una pasión que fue creciendo estos últimos años, no me quejaba ambos parecíamos felices con el acuerdo.

-¿Te vas?-dije mientras lo veía vestirse, me senté aún desnuda.

-Hay una cena familiar, mi padre quiere hablarme del próximo negocio del que desea que me haga cargo,- No me da tiempo de responder solo me da un beso en la frente y camina a la puerta- No me esperes despierta... ¡Te amo!

Siento un apretón en el pecho, no sabía que significaba, quería creer que era la seguridad que me daban esas palabras de y no el miedo que me provocaban también. Pensar en cosas positivas me ayudaba últimamente.

Recogí mi ropa antes de ir a ducharme, un vez con mi pijama puesta saque de mi cajón una libreta para dibujar, ahí vi la caja, antes estaba perfectamente oculta, sudor frío recorrió mi espalda, cuando al abrirla no estaba el collar con el anillo de Lucah, el que me dio el día de nuestra graduación.

Por lo menos Cameron jamás sabría del extenso mensaje de texto que me había enviado donde no solo volvía a declarar su amor por mi, sino que aseguraba estaría ahí para cuando lo necesitara, que estaría esperándome si algún día decidía que él era una opción para mi. No sabía exactamente porque había guardado su anillo, pero sabía con exactitud que no me gustaba que Cameron lo haya tomado.

Hola

Amigos se que he tardado más de lo debido en actualizar, pero para compensarlos esta semana me comprometo a subirles los dos capítulos que corresponden a los días lunes y miércoles, pero adicionalmente subiré los capítulos que no actualice la semana pasada por tanto tendremos 4 actualizaciones, en 4 días. Procuraré hacerlo de lunes a jueves, pero si mis obligaciones o algún otro acontecimiento me retrasan de nuevo sepan que aún así en esta semana podrán tener 4 capítulos nuevos.

Los quiero, gracias por leer.

Besos.

-Alondra.

¿Cambio de planes? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora