¿Cambio de planes?

C a p í t u l o 5 3

Capítulo 53

No estaba segura en que parte del camino había perdido mi esencia, quiero decir podía recordar a una antigua Mei Wilson temeraria, que no le importaba correr riesgos o las consecuencias que sus acciones podían causar, pero ahí estaba ahora casi rogándole al castaño que no me dejara, que el anillo que había encontrado en mi cajón no significaba nada, que solo lo había guardado por sentimentalismo pero que no existía nada entre su dueño anterior y yo, me sentí agradecida cuando Cameron decidió dejar todo de lado.

Pero eso solo fue el inicio de una realmente posesiva y tóxica relación.

Por la mañana había conocido a mi nuevo asesor, el profesor de economía me lo presento antes de su clase, quedamos de reunirnos en un café cerca de la facultad para poder agendar nuestras citas de estudio, para sorpresa mía era un chico muy agradable, su nombre era Henry.

-Vaya, nunca he sido una persona artística, pero es fabuloso- me devuelve el cuaderno, solo me queda sonreír, hacia mucho que no me sentía tan relajada con otra persona, se sentía bien.

-Es lo único que me mantiene cuerda- evito su mirada de lastima.- pero me esforzaré en comprender todas tus clases.

-Comenzaremos con lo básico y subiremos de ahí, podemos repasar algo ahora, no tenemos tiempo que perder- asiento y él se mueve en el sillón donde estamos sentados, toma su cuaderno de notas y me lo muestra.

Me hizo una especie de evaluación, una muy discreta, preguntando sobre los conceptos que conocía, al parecer no estaba tan perdida, me explico aquello que no tenía tan claro, y como si una luz atravesara mi cerebro comencé a comprender de lo que hablaba, la sesión de estudio fue entretenida y divertida, poco a poco me olvidé del mundo a nuestro alrededor y solo atendí a la cálida conversación que teníamos.

Todo lo bueno termino, cuando al alzar la vista, esos ojos azules, ahora oscurecidos, me evaluaban, me cuerpo se tensó, mi respiración se cortó y la atención que tenía se fue por la borda, Henry lo notó.

-Es Cameron Harries, ¿ lo conoces?- negué moviendo la cabeza, busque como escapar pero...- tengo clase en unos minutos, te veo mañana temprano, Mei, repasa lo que vimos- anota algo en mi libro- lee el siguiente capítulo y mañana lo discutiremos.

-Claro, nos vemos- comencé a guardar mis cosas, me dedicó una sonrisa y se fue.

-Le envían esto- la camarera deja una nota, no me da tiempo de agradecerle cuando se va a otra mesa.

"Hablaremos en casa."

No tenía que ser una genio para conocer el remitente, derrotada deje escapar el aire, salí de ahí justo cuando los hermanos Ferrec llegaron, no estaba de humor para soportar otra escena de Dephne.

[...]

-¡Cameron!- arroja el libro lejos- basta, ya te expliqué, el profesor me...

-¡No lo necesitas!, yo te enseñaré- me toma por las mejillas y pega su frente en la mía- puedo hacerlo.- Su celular suena por décima vez desde que llego despotricando por mi asesor, babi arruinado toda mi tarea.

-No tienes tiempo de hacerlo y lo sabes, necesito aprobar esta materia, Cameron o me suspenderán del programa, y mi padre se volverá loco.

-Dile al profesor que quieres una asesora.- Casi suena suplicante.

-Cam, quedan tres meses para que termine el semestre, y...

-¿Cuál es tu obsesión porque sea él?, ¿Te gusta?, ¿Es eso?- arroja algo más rompiendo un adorno de pared, ahí mi furia explotó, ¡Oh cómo se atrevía!

-¡Escúchate!- su rabieta es interrumpida y me observa- ¿Haz visto en lo que nos hemos convertido?, somos un chiste- su celular de nuevo interrumpe- yo confío ciegamente en tu amor por mi, aún cuando estás obligado a tener otra relación, acepte vivir bajo su sombra, como si amarte fuese un crimen, ¿y tu dudas de mis sentimientos?

-Lo siento,- se acerca hasta mi, me rodea con sus brazos y una de sus manos sostiene mi cabeza- tienes razón te exijo demasiado, soy tan egoísta.

-Descuida- sus muestras de vulnerabilidad siempre me conmueven y no puedo estar enojada con el.

-Mei...

-Tienes que irte...

-Volveré, espérame- besa mi cuello con deseo, mi cuerpo reacciona de inmediato bajo su toque, me vuelve completamente loca.

-Lo haré- lo beso tan desesperada en intensamente, muerde mi labio, antes de salir corriendo del departamento.

Estaba terminando mis deberes, de nuevo, cuando tocan a la puerta, Cameron no tenía mucho de haber salido, así que supuse que era él y fui a abrir con una sonrisa boba.

-¿Olvidaste algo amor...?- abrí, había un castaño en la puerta, definitivamente un Harries, pero no el que yo esperaba. – Rafael.

-Hola, Mei Wilson, he venido a que hablemos de negocios.

-No tengo nada de que hablar contigo- estaba por cerrar, pero interpuso uno de sus pies.

-Vamos, llamar a la puerta fue una cortesía, tengo una llave del apartamento- del bolsillo de su pantalón saca una llave- de hecho podría desalojarlos, este lugar me pertenece.

-¿Qué...?- sonríe y me hace a un lado para pasar.- Di lo que tengas que decir, y márchate, ¿quieres?

-De acuerdo... Cameron se casará con Dephne.- No me esperaba esa confesión, me quedé helada, sin poder aceptar lo que decía- he venido a ofrecerte un plan de escape.

Hola,

Lamento tanto no haber actualizado ayer, pero mis obligaciones superaron mi tiempo libre, pero la semana aún no termino y les debo dos capítulos más, así que esperen por ellos, entre el jueves y el domingo los tendrán. Gracias por la paciencia, estamos en la recta final de Cambio de planes, espero que les guste lo que tengo preparado.

P.D. Lamento mucho los errores ortográficos, no he tenido tiempo de revisar el capítulo.

Besos.

-Alondra