C a p í t u l o 3 0

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Capítulo 30

-Mei, necesitamos hablar- mamá entra en mi habitación para despertarme.

-¿Puedo por lo menos lavarme?- la vi asentir, o al menos eso creo, para visión de un domingo por la mañana solo había una mancha rosada, pero, después de hacer mis necesidades, lavar mis dientes, recoger mi cabello en una coleta alta, al volver a mi habitación no la encuentro ahí, así que me dirijo a la planta baja, ahí están ellos, mis padres.

Camino en su dirección, por lo que veo han dispuesto de un desayuno completo en la mesa de centro, ambos están en silencio sumidos en sus pensamientos, distanciados, no como hace unos días en los que no pasaban un segundo separados. No paso desapercibidas las maletas que están junto a la puerta de entrada.

-¿Qué sucede?- el miedo impreso en mi voz sale sin intensión de ocultarse, algo no va bien y no deseo tener más problemas.

-Por favor- Noel se pone de pie para hacerme un lugar en el sillón en el que está- desayunemos con tranquilidad.

Desayunamos, pero no es con tranquilidad, las miraditas entre mis padres me preocupa, ¿dónde quedo esa complicidad con la que andaban?, la casa estaba en total silencio, y es que, desde que Noel estaba con nosotros, los empleados, fueron "suspendidos", incluso mi nana, por lo que solo estábamos los tres y los juntos nos las arreglamos para subsistir en la casa.

-¿Ya me dirán que es lo que sucede?- me cruzo de brazos- su actitud misteriosa me tiene de los nervios así que por favor dejen los rodeos y vayan al grano.

-Me mudare...

Bien, eso no lo esperaba.

-¿Qué?- observo los ojos verdes de mi padre, no me transmite algún sentimiento que me pueda reconfortar- ¿Por qué?

-El mes que ha dado la jueza para pelear tu custodia termina hoy- por lo menos mamá tiene la amabilidad de hablar con delicadeza- mañana decidirá con quién deberías quedarte.

-Creí que era un mes de prueba para unirnos, no para alejarme de alguno de ustedes- entonces observo a Noel, temerosa- ¿Hice algo mal?- suspira, su mirada es inquebrantable y por su postura sé que está a la defensiva.

-No- responde- pero creo que estarías mejor viviendo conmigo- entonces todo conecta.

-¿Mamá hizo algo mal?- la observo, Isabel limpia sus lágrimas, no sé en qué momento se ha puesto a llorar, alterno la mirada entre ambos, los ojos celestes de mi madre se alzan buscando mi mirada, me pongo de pie, para ir con ella, me necesita, lo veo en sus ojos, pero Noel no me deja ir, me toma por la muñeca y tira de mi cuerpo hasta conseguir que me siente, un instinto de alerta se apodera de mi cuerpo, me zafo de su agarre, veo el dolor cruzar sus facciones cuando me pongo de pie y voy a abrazar a mamá.

-Isabel no te ha educado bien- me tiene su celular, lo tomo con manos temblorosas, un video se reproduce, el momento en casa de Zed aparece ante mí, pero después se corta y fragmentos de la noche que pasé con Cameron aparecen, para terminar con Cameron diciendo que no fui más que una maldita apuesta.

Mi pecho sube y baja con rapidez, ellos lo saben.

-¿Por qué no lo dijiste?- susurra mamá.

-Esto es resultado de la educación que te ha dado esa mujer- por otro lado Noel está furioso, comienza a decir cosas sin sentido, pero insultando a mamá y mi educación.

-¡Cierra la boca!- chillo, me pongo de pie, tratando, de manera algo extraña, de proteger a mi madre, esto tendría que ser al revés pero, no dejaré que él venga a hablar mal de mi familia.

¿Cambio de planes? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora