C a p í t u l o 4 4

870 67 3
                                    


Capítulo 44

Nunca te das cuenta de lo peligrosa que es una mujer hasta el punto en el que te ves obligado a enfrentar su ira por meterte con algo que es de su propiedad. Eso me estaba pasando en este momento, yo sin saber me había metido con algo que le pertenecía a otra mujer.

En ese momento no lo sabía, pero acaba de meterme en una batalla que me llevaría años resolver, y no lo digo figurativamente, pero regresemos al presente, frente a mí una pelinegra amenazaba con que mi novio era en realidad su novio, ¿lo peor? Se suponía que era mi amiga.

-Chicas por favor ustedes son amigas, no pueden hacer esto- Lucah tratada de razonar, interrumpiendo nuestra guerra de miradas.

-Una amiga no trata de robarte a tu novio- reclama Dephne.

-Y una amiga no se fija en el chico que te gusta- me defiendo- está en el código de amistad.

-¡Oh por favor!, que sabes tú de honorabilidad- replica la chica frente a mí- todo mundo sabe la clase de persona que eres.

-¿La clase de persona que soy?- me cruzo de brazos.

-Sí una cualquiera igual que...

-¡No te atrevas!- la interrumpo, adivinando lo que estaba por decir, tomándola del cuello de su blusa acerco su rostro al mío- o en verdad conocerás de lo que soy capaz- una mano se cierra en mi muñeca y me obliga a separarme de ella.

-Cameron- la expresión de la chica ante mí cambia, casi puedo ver sus pupilas dilatarse, sus mejillas toman un leve color rosado y un sonrisa dulce aparece en sus labios, mientras que un calor repentino se apodera de mi cabeza.- Que bien que has llegado para aclarar este problema de una vez por todas- decir que fue de amor a odio en segundo me sorprende per fue así.

Siento el brazo del castaño colarse en mi cintura y apretarme a su cuerpo, después sus labios se posan sobre mi cabello depositando un beso, susurra un "lo siento" que solo yo soy capaz de percibir. El sentimiento que me embriaga no es bueno, pero se siente jodidamente bien, sé que esta batalla la he ganado incluso antes de comenzada, así que con la voz más altanera que puedo hacer respondo:

-Sí, Cameron- entrelazo su mano en mi cintura con la mía, sabiendo que Dephne estudia cada uno de nuestros movimientos.- Por favor aclara esta situación.- El castaño se aclara la garganta antes de hablar y siento su mirada desaprobadora, pero no le doy el lujo de hacerme sentir mal, no por el momento.

-Dephne, en verdad estoy muy apenado,- la aludida centra su atención en él- lamento mucho si mis acciones te han confundido, no fue mi intención crearte falsas ilusiones.

-No tienes porqué disculparte, creo que fui yo quien se ha confundido- su actuación es sorprendente, casi me creo toda esa tristeza.

-Pero aún podemos ser amigos- ¡Auch! Cameron Harries has roto su corazón en realidad. Nada podría resultar peor que ser arrojada a la friendzone. Dephne lo sabe, su mandíbula se apretó, casi con disimulo.

-Por supuesto- se esforzó por sonreírle y después con la más hipócrita sonrisa que me han dedicado, dio un paso en mi dirección- espero que podamos seguir siendo amigas- vi su brazo extenderse y ella me ofreció su mano para estrecharla, estuve por rechazarla pero Cameron literalmente me empujo para aceptar.

Quizá él no lograba ver detrás de esa mirada angelical, pero esto era la cosa más falsa del mundo.

-Será un placer- al tomar su mano, Dephne me estiro hasta poder abrazarme.

-Esto no se quedará así, he puesto los ojos en Cameron y todo lo que quiero lo consigo, así que ve despidiéndote de él- tuve un dejavú en ese momento, sus palabras me recordaron a lo que una vez le dije a Lily, no deje que eso me afectara.

¿Cambio de planes? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora