'Gumiho

1.9K 100 2
                                    

Nota:

'Ficción
'Apariencia de la era de Drunk-Dazed
'Alteración en las edades, indefinidas para ambos
'No smut
'Aclaro, gumiho es como se les llama en Corea a los zorros de nueve colas
'Sin límites de extensión









El de tez morena se apresuró y apenas llegó al sitio agarró al más pálido del cuello trasero de la camisa para luego sacarlo de aquel cibercafé.

— ¿Qué demonios te pasa, Heeseung? —preguntó molesto el castaño.

— Te he dicho más de mil veces que dejes de tratar de conquistar a los humanos. No puedes estar con ellos, ¿no sabes todavía lo peligroso que es, Sunghoon? —regañó el más alto.

Park se soltó del agarre con el ceño fruncido y acomodó su bonita camisa floreada.

— Yo sólo me estoy divirtiendo, no es mi culpa que tú seas un aguafiestas profesional —reclamó cruzándose de brazos.

— Park Sunghoon, si alguna mujer o hombre de esos de los que tú usas se termina enamorando de ti alterarás el orden del mundo —recordó.

— Ay~, yo no alteraré nada, sólo quiero disfrutar —dijo con recelo.

— Sunghoon... Mira, ya me cansé de siempre tratar de que no te metas en problemas... Has lo que te de la gana —soltó Heeseung ya cansado y sin más se dio la vuelta.

No le quedaba más que hacer allí.











— Creo que le gustas a Heeseung —alegó Jake.

Hoon casi se atora con su bebida.

— ¿Heeseung? ¿Lee? —le preguntó asombrado.

— Sí... Se obstina muchísimo cuando mencionan el tema "Park Sunghoon"... Y sí lo he visto detrás tuyo desde que tengo uso de razón —explicó.— ¿Lo dejarás pasar? Está guapo, eh... — 

— Mira... Él es realmente estresante... Es como si me quisiese controlar y yo eso no lo soporto —contó y sin más succionó la pajilla para beber de su malteada.

Dio un revuelo de ojos y miró a otro lado.

— Yo sinceramente no creo que esté intentando controlarte —comenzó a hablar el más bajo.— Se preocupa por ti y te cuida... La verdad creo que más bien tú lo has malinterpretado — 

Park suspiró y comenzó a jugar con la pajilla para revolver su malteada.

— Deberías hablar con él... Osea, piénsalo... Quizás su manera de lanzarte indirectas para que captes que le gustas es esa — 

— Pero- no tendría por qué hacerlo... —comentó medio nervioso.— A mí él no me gusta... Jamás — 

Shim sólo rió levemente y negó... Heeseung no le gustaba, pero le encantaba.










El castaño pateó una roca y luego suspiró. Llevaba un buen tiempo esperando a que Lee saliera de aquel sitio.

No se atrevía a entrar por vergüenza... Además, no quería ser tan obvio.

La verdad, esa conversación con Jake lo había dejado pensando y varias veces se desveló pensando en que tal vez sí había una posibilidad de que entre ellos pudiese suceder algo.

— ¿Park? —escuchó la voz del pelinegro y se volteó sumamente nervioso.

Estaba tan sumido en sus pensamientos que no notó en el momento en el que Heeseung había salido de allí.

— Ho-Hola —razcó su nuca y se acercó con pasos torpes.

Él más alto levantando sus manos alertado, por si de casualidad el más bajo se caía o tambaleaba.

— ¿Me... Estabas esperando? —preguntó confundido.

— ¡Sí! —respondió entusiasta y luego aclaró su garganta para después agarrar una de las manos ajenas.

— ¿Qué sucede? —cuestionó mirándolo sin entender su actitud.

— Yo... Anoche estuve pensando y... ¿Heeseung, yo te gusto? — 

Sus mejillas sonrojaditas adornando su bonito rostro de facciones sumamente finas... Esas que tanto le gustaban a Heeseung, sobre todo esa naricita respingona que poseía y esa boquita tan rojita.

— Mucho... ¿Por qué preguntas? —buscó su mirada.

— E-Es que tú me gustas también —confesó.

El pelinegro rió.

— No seré una de tus conquistas —renegó inmediatamente.

— Yo... —Hoon miró al suelo y soltó la mano del más alto.

Seguramente no querría salir con él sólo por el hecho de que antes era un Don Juan.

— Sólo... Sólo dame una oportunidad para que veas que realmente me gustas... Sólo una y ya —rogó juntando sus manitas.

Heeseung no podía resistirse ante la imagen tan adorable.

— Está bien, Sunghoon, pero no te tardes mucho en demostrármelo, amo esa boquita tuya y no sé si podré estar mucho más tiempo sin besarla — 

El castaño se le quedó viendo mientras balbuceaba incoherencias. Heeseung besó de pico sus labios y sin más se fue por su camino dejando a un Park totalmente atónito.

Ya no necesitaba divertirse jugando con los humanos. Ahora tenía a un guapo gumiho con el cual podría pasar el resto de su vida sin tener que arriesgarse a alterar el orden natural...

¡Sin dudas se apresuraría!





One Shots HeeHoon [Heeseung x Sunghoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora