One Shots HeeHoon [Heeseung x Sunghoon]

'Boss

Nota:

'Au
'Apariencia de la era de Fever
'Alteración en las edades, Sunghoon- 19 años, Heeseung- 27 años
'Sunghoon será hijo del presidente del país
'No smut
'Los avispas/boinas negras son los grupos tácticos especiales de defensa de un país, usan uniformes completamente de negro y son vistos situaciones de alto rigor
'Sin límite de extensión

— No me jodas con que es cierto que tengo que cuidar a un niño mimado —replicó Heeseung mirando las fotos que le eran mostradas.

— No es cualquier niño mimado, Lee, es Park Sunghoon, el hijo del presidente. Y necesita a alguien confiable que vele por él. Tú eres nuestro mejor agente, te necesito en ese puesto. Además cobrarás una millonada sólo por vigilar que no se exponga al peligro —le dijo su jefe.

Y a Heeseung no le quedó más que rodar los ojos y aceptar aquel trabajo de niñera que le habían otorgado sólo por ser el mejor agente de las avispas negras dentro del cuerpo de seguridad del país.

Un mes... Un mes ya cuidando de Sunghoon y aún no sabía de dónde sacaba tanta paciencia para aguantarlo.

La verdad era insoportable. Mandaba más que su propio padre y se creía el jefe de Corea entera sólo por ser el hijo del presidente.

Se quejaba de todo como si fuese una niñita de 6 años y hacía berrinches.

Lee quería estrangularlo a veces.

— ¿Podemos ir a tomar helado? —preguntó mientras el pelinegro lo escoltaba al auto.

— El presidente dijo que lo llevase directo a casa —.respondió, sin mirarlo.

Park hizo mala cara y se metió al auto.

— Qué sirviente tan imbécil —insultó en voz baja, sin embargo Heeseung al meterse al auto le escuchó.

Y respiró profundo para no hacerle bajarse del auto y meterle unos buenos golpes.

Recuerda que sólo es un niño. Es delicado... Es el hijo de tu presidente, no lo puedes lastimar.

Sí, esa clase de cosas se tuvo que mentalizar para no cometer una locura.

— Yo sólo cumplo con la tarea que se me ha asignado. Si usted no está conforme con mi trabajo pida un cambio de seguridad —le habló lo más profesional que pudo, mientras se colocaba el cinturón.— A, y otra cosa... No soy su sirviente, ¿bien? —

Sin más comenzó a conducir.

— ¡Yah! ¿Quién demonios te crees que eres para hablarme así? Soy —

— El hijo del presidente, y las órdenes las recibo de él, no de usted —le cortó inmediatamente y Park se quedó boquiabierto...

Aquel estúpido lo había humillado... A él.

¿Quién se creía que era?

— Mira vete, hoy no quiero ver tu cara a todos lados que voy —le pidió frustrado al alto y atractivo pelinegro uniformado que esperaba por él a las afueras de la residencia presidencial.

— Lo siento, pero no voy a poder cumplir su petición —

— Heeseung, tómate el día libre. De verdad, le diré a mi padre que me cuidaste muy bien, pero por favor vete —suplicó prácticamente.

Lee no se movió ni una pizca.

— ¡¿No te vas a ir?! ¡Yah! Es en serio, estúpido, ¿qué parte de que no te quiero ver no entiendes? —chilló.