Puzzle Piece || Mark Lee [COMPLETA]

Capítulo 21

En un abrir y cerrar de ojos me encontré de pie frente a mi puerta, esperando por Mark para ir a la fiesta de Johnny.

Había pasado las últimas horas comiéndome la cabeza, tratando de decidir si debía ir o no. Ahora era demasiado tarde y Mark ya me había enviado un mensaje diciendo que estaba de camino. No tenía salida.

Intenté alisar un par de arrugas inexistentes en mi falda negra y respiré profundo. Estaba nerviosa. No estaba segura de poder resistir a este nuevo y honesto Mark toda la noche.

Mi teléfono sonó.

—Ya estoy aquí, puedes bajar —dijo Mark al otro lado de la línea.

Desde que lo conocí, nunca había utilizado el hecho que era mayor que yo para darme órdenes, sin embargo, de pronto parecía muy consciente de la jerarquía que regía nuestro país. Se había aprovechado de su edad para declarar que no tenía permitido salir a esperarlo frente a los dormitorios. Debía quedarme en la seguridad de mi habitación hasta que él estuviera afuera. Dado que Hajoon parecía haberse evaporado, sus condiciones me parecían un poco exageradas, pero ya que él era mayor que yo, no tuve más remedio que obedecer. Después de todo, yo era una persona educada.

O eso me dije.

La triste realidad era que le habría obedecido de todos modos, por el simple hecho de ser él. Pero estaba trabajando en eso.

Contrario a la costumbre. Mark no esperaba por mí en una motocicleta. Esta vez, se encontraba apoyado en un auto gris. Para mi sorpresa, lo reconocí. Era igual al auto que usaba el protagonista de W. ¿Exactamente qué tan grande era en realidad la fortuna de Mark y su familia?

Hoy, llevaba el cabello peinado hacia atrás, por lo que podía ver sus ojos con demasiada claridad. Llevaba pantalones de mezclilla negra y una camisa azul oscuro con manga tres cuartos. El problema, era que el primer botón estaba suelto. Miré hacia otro lado.

—Luces encantadora —fue lo que dijo cuando estuve lo bastante cerca.

Mis mejillas se encendieron al instante.

—Gracias —mascullé. Me había puesto una falda negra que caía un poco por encima de mis rodillas, una blusa rosada con puntos negros y sneakers blancas para no parecer demasiado formal. Mi cabello lo había dejado suelto, para poder usarlo como escudo si fuera necesario esconder mi rostro.

—Vamos —Mark abrió la puerta para mí y apartó la mirada mientras yo subía— ¿Estás lista? —preguntó al ocupar su lugar detrás del volante.

Asentí.

El coche rugió a la vida y me sobresalté un poco. Mark parecía muy cómodo y tranquilo, había una pequeña sonrisa bailando en sus labios y su respiración iba acompasada. Yo, por otro lado, estaba a punto de ahogarme en el silencio. Tenerlo tan cerca en un espacio tan cerrado estaba causándole estragos a mi corazón.

Tardé exactamente un minuto en abrir la boca.

—Compré esto para Johnny —solté y mi voz salió como un chirrido— No estoy segura si le gustará.

Mark despegó los ojos de la carretera un momento para ver la bolsa de regalo en mis manos.

—¿Qué es?

—Una botella —dije avergonzada— Es térmica. No tenía idea de que darle, no sé qué cosas le gustan.

—No era necesario comprarle nada —Mark sonrió— Pero le gustará.

—Eso espero —mascullé.

Mark soltó una pequeña carcajada y extendió su mano hacia mí. La miré fijamente, dudosa.