Cuando te encontré

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Narra Vanessa

Planear una boda en dos semanas fue más cansado de lo que imaginé. Menos mal que mis amigas me ayudaron en todo, incluso me hicieron una pequeña despedida de soltera en el bar y a Zac el día siguiente. También decidieron organizar una cena para mi familia que llegó 2 días antes del gran evento.

—Ay hija, es que una cosa es conocer a Zac y otra que nos metas en ese barrio peligroso—se quejó mi madre por teléfono.

—Mis amigos están emocionados, mamá, por favor—supliqué—no tienen que quedarse mucho tiempo y puede ser comida para que regresen temprano al hotel, además también estará la mamá de Zac.

—Aprecio a tu novio, pero esto no pasaría si te hubieras comprometido con alguien de nuestro entorno...y no hablo de los Buttler, ya deja de repetirme tu frase.

Rodé los ojos.

—¿Vienen o no?

—Sí, Vanessa, sí. Nos vemos el jueves.

Estaba tranquila al haber sanado la relación con mi familia, sin embargo, actitudes con estas me sacaban de quicio y no podía hacer nada, porque claramente no lo compartiría con mi circulo social.

Ni siquiera el masaje de Zac y el té de Ashley me ayudaron a relajarme esa tarde cuando mi mamá me avisó que ya estaban aterrizando en Los Ángeles. Una cosa era llevar a Zac a mi casa después de contarle a mi mamá lo enamorada que estaba de él y otra era traer a esa mujer con mi hermana y mi amiga, a mi pequeño hogar del lado occidente del país.

—No entiendo tus nervios, son muy amables y sencillas—trató de alentarme Zac.

—Sí yo tampoco los entiendo—mentí.

Me fui al bar tres horas antes para tratar de tener todo en orden y así darle a mi mamá una critica menos. Zac quedó de ir por ellas al hotel, ya estaba aceptando un poco el tener automóvil, pues en estas semanas nos había sido de mucha utilidad.

—Me estas poniendo muy nerviosa—reprochó Miley—de haber sabido que estarías así no organizamos nada.

—Lo siento, es que no sé que tanto le guste esto a mi mamá—le confesé a Miley—ella es buena persona pero...

—Es millonaria, lo entiendo—suspiró—¿quieres que cancelemos todo?

—No, esta bien, ella tiene que conocerlos.

—¿Sabes que me hubieras caído mal si te hubiera conocido en tu otra vida?

—Yo ni siquiera te hubiera hablado—arrugué la nariz y ella me enseñó la lengua para después reír ambas.

"Respira hermanita que ya llegamos".- recibí un mensaje de Stella.

Hice lo que me sugirió y limpié por ultima vez la mesa donde se iban a sentar. Miré a mis amigos que habían optado por vestirse formal para la ocasión, como invitadas extras estaban Scarlett y Nikki, esta ultima ya había confirmado su asistencia a la boda y su interés en hacernos socias, así que tendría mucho trabajo durante mi luna de miel en Grecia.

Cuando me acerqué a saludar a mi familia ya Zac estaba presentando a todos que sonreían amablemente.

—Yo adoro a su hija, fuimos como hermanas, porque aparte me contó que no se llevaba bien con la suya—escuché la voz de Camila.

—Camila, ella es Stella, mi hermana—corrí a interrumpir antes de que hablara de más.

— Oh—expresó mi amiga—que bueno que ya arreglaron sus diferencias.

Stella me cuestionó con la mirada y se acercó a mí.

—Gracias por hacer públicosnuestros problemas—susurró.