- ¿Señorita, está despierta?- era Ginny y no es por aumentar más la incomodez del momento pero estaba sin nada, absolutamente nada de ropa.
- ¡Un momento!- me levanté rápido justo cuando Damian salió del baño con una toalla rodeando su cadera y pequeñas gotas que caían de su pelo oscuro.
- ¿Una noche conmigo y ya no quieres verme más?
- Damian.- me acerqué a él tapandome con la sábana sutilmente.- No es por nada pero... No me acuerdo.
A Damian se le quitó la sonrisa de la cara poniéndose serior.- ¿De nada?
- Nada.
- Joder, yo...no sabía que estabas bebida. Parecías totalmente estable, no quiero que sientas que te he utilizado.
- Damian tranquilo, sé que no has pretendido nada de eso. Me dieron dama blanca para beber y no sabía lo que era, solo quería probarlo.
- ¿Dama blanca? Joder, eso lo explica todo. Puede parecer lo más asqueroso del mundo y así es. Es una bebida que te droga y no te acuerdas de nada pero a la vez aparentas no tener nada. Cambia tu manera de ser un poco pero nada más, bueno depende de las que te tomes.
- Fueron...5, Creo.- Damian se echó las manos a la cabeza.
- Deberíamos hablar con Dorian, que él nos muestre lo que has...¿Qué es eso?- señaló a mi mano, la tenía un poco tapada pero aún así la vio.
- Yo...me desperté y lo vi. Pensaba que lo habías visto.
- Si lo hubiera visto no hubiera reaccionado así.- en eso tenía razón.- En fin, no vuelvas a beber de eso y tranquila, no creas que te dejaré con la incógnita de ayer.- me guiñó un ojo mientras me acariciaba el pelo.- Y ahora vístete.
- ¿Con qué? El vestido de ayer está horrible.
Damian se separó y fue directo a por su ropa, no tardó en vestirse e ir hacia la puerta.
- Hola, la señorita necesita ropa.- Damian con la puerta entreabierta me miraba.
- Claro, señor.- vi que Damian sonrió y no fui capaz de contener esos celos de que alguien más le llamara señor y verle sonriendo de esa manera.
Cerró la puerta y cuando volvió a abrirse apareció una doncella, era también rubia, pero no aparecía haber rastro de Ginny.
- Tenga.- me entregó un nuevo vestido que era de color azulado con toques plateados.
- ¿Y Ginny?- dije antes de que se fuera.
- No sé dónde está, mandaré que la busquen.- la chica contestó borde y sin decir nada más salió de la habitación.
¿Gracias? En fin, este mundo es como cualquiera y hay gente imbécil.
Me puse el dichoso vestido y salí del cuarto para encontrarme con un pasillo vacío. Me extrañaba aunque caminé decidida. Me perdí por los pasillos, uno después de otros y bajando algunas escaleras para llegar a una puerta vieja que tenía unas llaves en la cerradura.Era espeluznante, las llaves tenían telarañas y la puerta más de lo mismo, daba asco aunque empujando un poco la puerta se abrió.
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Feroz - Bilogía «Indómito» {#2} ✔️
FantastikDespués de un año de lo ocurrido, Amelia, continúa con la mejoría de sus poderes mientras disfruta de la pequeña paz que les dio la última batalla. Claro que, lo bueno dura poco, y después de asumir que debe tomar sus responsabilidades reales debe...