Motos.

534 100 56
                                    


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Cap 11.



Luego de que terminará de hablar con FANB se dirigió hacia el segundo piso de la casa.

Al llegar se sorprendió de ver la escena de USA arreglando el chaleco de Caracas, sabía lo reservado que solía ser USA, también sabía lo arisco que solía ser el caraqueño en cuando a que lo ayudarán se tratara.

Tal y como el.

Así que no quiso interrupir el momento, además parecía que estuvieran hablando de algo importante.

También había notado que Washington no quitaba la mirada de su capital.

Sonrió por lo bajo, al parecer cierto ruso tendría competencia, solo esperaba qué Caracas no saliera perjudicado de todo esto.

Por qué o si no, el mismo se haría cargo de ambas capitales de las potencias.

Quito esos pensamientos de su mente al ver como Caracas al parecer agradecía la ayuda y se iba, al ver esto le presto más atención a su entorno, casi todos estaban listo, eso era bueno.

Mientras más rápido mejor.

— Epale, ¿De que hablaban? -. Preguntó curioso al estar lo suficientemente serca como para que el gringo lo escuchara.

— Veo que ya terminaron de hablar -. Susurro Estados Unidos más para si mismo -. Nada realmente importante -. Contestó la pregunta antes formulada.

— Mmm... mentiroso -. Le acuso.

— Jajaja -. Rió USA -. ¿No se te escapada nada eh, veneo?

— Mamalo -. Y se fue aparentando molestia.

USA solo le siguió el paso.

— ¿Están todos listos? -. Preguntó con voz elevada para que todos lo escucharan.

— Yo si -. Dijo Aragua saliendo del cuarto en donde antes durmieron Miami y Washington.

— Igual, todos estamos listos de hecho, solo falta Bolívar y el catire de azu-

— Nop, también estamos listos -. Aviso la ciudad americana saliendo del cuarto acompañado de un rojito Bolívar.

— ¿Por qué estabas encerrado en el cuarto con Miami? -. Preguntó serio Venezuela.

— N-no es lo que tu crees -. Bolívar se maldijo mentalmente por tartamudear.

— ¿Entonces por qué te pones nervioso? -. Preguntó pícaro Delta Amacuro.

— Yo no estoy nervioso -. Refuto mirando mal al deltano -. No estábamos haciendo nada malo.

— Lo que el quiere decir -. Se metió alejandro -. Es qué no, no estaban cogiendo, solo le buscaban las medias al bruto ese... -. Antes de que Bolívar reclamara algo Alejrando continuo su explicación -. Además, no creo que nuestro estimado bolivarense sea tan precoz como para acabar en menos de 5 minutos ¿verdad?

Pussy e' your motherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora