El Guitarrista. 2

Capitulo 34

JAZZMINE

Creía que nunca iba a pasar de nuevo. El lunes por la mañana sonó la alarma y me indico que mi ciclo escolar volvía a ser el mismo. Estaba emocionada.

Me vestí y me peine. Baje a desayunar. Quedaba poco tiempo de clases pero por lo menos iba a volver. Oí el timbre de mi casa.

Ahí estaban Jack y Clara. Olvidaba la última vez que caminé con ellos a la escuela. Clara me comentaba que su familia no podía estar mejor,fue un alivio. Les pedí no hablar de mi situación. Sabían todo.

—Si es tu decicion va a estar bien—me apoyo Jack.

—Y entonces Taylor...—Clara se callo en cuanto Jack la fulminó con la mirada.

—Olvidenlo. Ahora solo queda Jami. No quiero saber nada de Jazz.

—Pero son la misma persona—río Jack.

—No lo son.

Quise respaldarme en Jazz. Tome esa identidad. La estrella de rock. La chica segura. La artista. La que podía con todo y todos. Actuaba diferente cuando tomaba esa postura,era lo que quería ser,lo que quería que los demás vean.

Ahora soy solo Jami. Simplemente una estudiante. Una chica que pasa tardes y noches escapando en libros,en historias de fantasía. Y así era mejor.

Ya no era la bajista.

No recordaba que las clases fueran tan divertidas. Había un compañero nuevo que Jack me presentó,Mikel. Era muy agradable,me ayudó con el trabajo de química. Yo no tenía la experiencia que ellos adquirieron durante el año con estas sustancias. Y no quería incendiar el laboratorio.

Todo iba bien hasta que dijo lo que esperaba no oír más.

—¿Tu no eres la chica de la banda Spikes?

—Lo soy—sonrei falsamente.

No era fácil olvidarlo. Menos si todos en la escuela me lo recordaban con miradas.

Tuve que apagar mi celular de tantas notificaciones que recibí. Antes de el entrenamiento con las animadoras revisé las redes sociales.

Era un escándalo. Algunos decían que nos habíamos separado. Otros hablaban de la traición de Trever. Otros de que no podíamos hacer más música. Otros de Taylor y yo de que éramos una pareja que resistía todo.

No hablamos en público jamaz de nuestra ruptura. Era algo que no les importaba para nosotros. Que crean lo que quieran. Desaparecimos de el mapa así nada más,y no estábamos aptos para dar explicaciones.

Borre las redes sociales. Las aplicaciones desaparecían de mi celular cada que apretaba el botón de borrar. Senti un alivio que hacía dos meses no sentía. El saber que nadie podía hablar de mi,aunque iban a hacerlo igual. Pero ya no era mi preocupación.

Me puse el uniforme de animadoras. Nunca había estado tan feliz de ponerme esa incomoda falda corta.

—...entonces van a...—le toque el hombro a Lottie.

—¡Hola!

Se quedó con el silbato en la mano señalando a las chicas. Su cabello rugoso pareció detenerse en el tiempo,como ella.

—Estas aqui—murmuro. Me abrazo. Fue el abrazo más cálido y necesario que pude haber tenido.

Me dio el silbato. La miré confundida. Se sentó junto a las otras chicas.

—Te toca a ti ahora.

Estaba donde quería. Solo me quedaba esto. Co-capitana de animadoras. Ya no existía la música para mi. Comenze a asumir mi vida de nuevo. Sonrei.

—¡Bien!—aplaudi y recorde a Stacy.—¡Seis vueltas a el rededor de la cancha! ¡Ya!

Yo ya no estaba tanto en forma entonces corrí con ellas. Al final de el día me dolían las perinas,pero fui con Jack y Clara a la casa de Clara. Tuve un deja vu,estaba con ellos en el suelo de su cuarto comiendo helado y tapados con mantas.

Clara abrazaba a Jack y el jugaba con su pulgar sobre la palma de la mano de ella. Se veían muy felices. El se veía muy feliz. Después de tanto tiempo consiguió estar con ella.

—Jami,ayer soñé que me perseguía con un cuchillo por toda la escuela—dijo Jack como si fuera lo más normal de el mundo.

Después de todo no los perdí. Seguíamos siendo los de siempre. Ellos no se habían alejado de mí como Sarah y América en su momento. Ellos estaban interesados en mi,ellos eran mis amigos y eso no iba a cambiar. Me sentí en confianza. Me sentí bien. Me sentí yo.

—¿Y te mataba?

—Peor,resulta que tu no eras tu,es decir si eras tu pero te salio fuego y volabas pero también sacaste un arma de cuchillos y...

—Que mala percepción tienes de mi...—bromee.

Clara paso una palomita de maíz por helado de fresa y se la llevo a la boca.

—Que asco—hice una mueca.

Jack le pasó un brazo por los hombros.

—Raro es verla hacer eso en el cine,créeme.

—¡Es delicioso!—se quejo ella.

—Puedo quererte mucho,pero admito que aveces eres rara.

Los tres nos echamos a reír. Empezamos una lucha de almohadas. Si le preguntas a Jack te dirá que el gano. Si nos preguntas a nosotras podemos asegurarte que no lo abogamos con almohadas por que le tuvimos compasión.

—¡Me rindo!—grito el.

Nos alejamos victoriosas. El no tardó en hacerle cosquillas a Clara. Intente separarlo en rescate de mi amiga pero me pegaba patadas. No recuerdo la última vez que me reí tanto.

Me sentí un poco fuera de lugar cuando ellos se daban besos pequeños,(seguro por que estaba yo),pero me parecieron la cosa más linda y tierna de el mundo.

Antes de irme Clara bajo a abrirme. Me abrazo.

—Te extrañe mucho. Ahor año vas a safar de nosotros—dijo divertida.

—Ustedes van a cansarse de verme tanto. Se los aseguro.

Llegue a casa. Vi mi estantería de libros. ¿Hacia cuánto no me tomaba el tiempo de leer? Tenia poco tiempo y no era prioridad. Intentaba leer uno y lo dejaba,me aburria. Y pensar que antes lo hacía todos los días...

Observe el cuarto estante de mi biblioteca. Vi el libro que se repetía. Me gustaban los momentos que había pasado con el. Aunque ese era bastante vergonzoso...

¿Y por qué no? Pase toda la noche releyendo esa trilogía que daba mucho de que hablar entre los lectores.

Lectora o comelibros. Ya olvidé la última vez que Taylor me había llamado así. Ya no éramos los de antes. Eso se había perdido,al menos para mí.

Cerré los ojos para dormir. Pero vi de reojo en la punta de mi habitación mis dos bajos. Eso era pasado. No lo quería más. En medio de la noche los lleve a el ártico.

Ya no podía ser la Bajista.