ES UN MAL SUEÑO • JuleRose

XVI

•Juleka•

Nervios, eso siento...soy un manojo de nervios.
Me miro al espejo por cuarta vez, observo las curvas de mi cuerpo, que rápidamente cubro por la camisa ancha que acabo de ponerme, y me acerco un poco para ver las facciones de mi cara. Ayer, cuando Rose me llamó me sentí nerviosa y tire el celular en la barra.
Me sentí un poco enojada cuando me preguntó con quien estaba, no lo se, solo me dio rabia que ella antes hablaba mucho de Ali y hubo una vez que no me escucho por hablar de él.

Doy un suspiro, espero que ella no se haya enojado. Deberia pensar en otra cosa.

No soy muy bonita... pero podria estar peor.
Marinette esta aqui viendo si le da un toque nuevo a nuestros diseños y Adrien también esta aqui. Es un miembro temporal, pero le tenemos bastante cariño, creo que esta charlando con Luka.

Miro mi reflejo de nuevo y suspiro. Iván y Rose aún no estaban cuando yo me meti a este baño, pero... ¿cómo lo enfrentare si Rose ya esta aqui?

Hoy es Viernes, por lo tanto mañana tenemos el mini concierto ¿Y si cuando Rose esta cantando, quedo fascinada viéndola y me olvido de tocar mi instrumento?

Golpeo mi frente. Debo de dejar de pensar en ella, entiende Juleka Couffaine, olvida a Rose.

•Luka•

Veo a Juleka salir del baño con una cara de pocos amigos, ¿qué le habrá pasado? ¿qué me quiso decir ayer?

La observo un momento hasta que ella me mira a mi, ups... me han atrapado, le sonrío y ella parece hacer un esfuerzo para devolverme la sonrisa.

-¡Hey, Juls! ¿Por qué no vas a esperar a Rose e Iván? Creo que llegarán juntos -Hablo y Adrien levanta la vista para mirarla.

-¿Qué te parece si voy yo? -Dice él y se levanta, Juleka se acerca a paso rápido y lo toma de la muñeca-¿Qué pasa?

-V...vamos juntos.

Ellos se miran unos segundos y salen para afuera, estoy solo con Marinette, ¿cómo deberia iniciar la conversación?

-¿Ya te comenté que mi padre me abandono por un cocodrilo? -Esa historia se la he contado miles de veces.

Ella me mira un momento y los dos nos reímos.

[...]

•Rose•

Iván y yo vamos corriendo por las calles de París rumbo a la casa flotante de la familia Couffaine, no sabemos como nos retrasamos pero aqui estamos.

Estamos apunto de llegar pero Iván se detiene rápidamente.

-¿Qué sucede?

-Mira, hay una señora que no puede cruzar la calle, vamos a ayudarla -Contesta y con su cabeza señala el lugar donde esta la señora.

Sigo la mirada hacia donde apunta y veo a la mujer, no parece tener problemas con no cruzar la calle, pero ayudarla no vendria mal.

-Vamos -Respondo y ahi nos dirigimos.

Después de unos minutos llegamos a la vereda donde esta la señora e Iván se acerca a ella, la mujer lo observa entrecerrando los ojos y yo camino hacia ellos.

-¿Quiere ayuda para cruzar la calle? -Le pregunto y sonrío.

-¿Por qué creen eso? Solo estoy esperando a que mi sobrino me venga a recojer -Murmura y se aleja de nosotros con el ceño fruncido-¿¡Es por qué soy vieja y débil!? -Grita de lejos.

Comenzamos a correr más rápido que antes. Perdimos tiempo haciendo nada.

[..]

Llegamos a la casa-barco y nos quedamos jadeando con las manos en las rodillas.