veintiuno

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Smiley no era fan de las reuniones. Si asistía a ellas era simplemente porque era su obligación como capitán, porque no le gustaba dejar solo a su hermanito y porque disfrutaba molestar a Mucho. Como ahora, por ejemplo.

Habían pasado, quizás,  unos veinte minutos desde que ésta inició, y desde entonces se había empeñado en hacer que la vena de la frente del capitán de la quinta división saltara. El plan, en una primera instancia, era intentar que el chico perdiera su aura cool y comenzar una pelea, sin embargo, todo aquello quedó a un segundo plano al escuchar la voz de su comandante mencionar el nombre de cierta pandilla.

Por inercia dirigió su mirada hacia Takemichi, quien mantenía su completa atención en el rubio, asintiendo a todo lo que éste decía, hasta que llegó su turno de hablar.

ㅡHakkai no tiene nada que ver en esto ㅡdefendió al mencionado pese a no encontrarse en el lugar, dirigiendo su mirada a Mitsuyaㅡ, pero él realmente está pensando en hacerlo.

ㅡAún así, no podemos quedarnos sin hacer nada. Da igual si es un asunto familiar ㅡhabló Draken, llamando la atención de los capitanes y sub-capitanesㅡ, se atrevieron a tocar a un miembro de la Toman, y no sólo eso; ¡a uno de nuestros capitanes!

ㅡDraken tiene razón ㅡapoyó Mucho, a su ladoㅡ. No podemos quedarnos con los brazos cruzados cuando ellos declararon una guerra.

El lugar se inundó en un incómodo silencio. Era cierto que ninguno veía buena idea iniciar una guerra con una de las pandillas más importantes de Shibuya, no después de que casi perdieran a dos de los suyos.

El primero en hablar fue Mitsuya, atrayéndolos devuelta a la realidad.

ㅡTomaré la responsabilidad ㅡdijo, observándolos con una expresión duraㅡ. Como capitán de la segunda división, me corresponde a mi hacerme cargo de esto. Después de todo, se trata de mi sub-capitán.

ㅡ¿Pelearás tú sólo con los Black Dragon? ㅡpreguntó Smiley, divertidoㅡ. Yo me anoto.

ㅡNo pelearemos ㅡexplicó, rodando los ojosㅡ. Hablaré personalmente con el líder y trataré de llegar a un acuerdo.

ㅡAburrido ㅡse quejó, recostándose contra una columnaㅡ. A Takemicchi lo molieron a golpes sin oportunidad de conversar, ¿por qué las cosas serían diferentes contigo?

ㅡYo sé cosas ㅡsonrió el pelila sin más, haciendo que el mayor de los gemelos chasqueara la lengua.

El parque era uno de sus lugares favoritos. Todos sus recuerdos bonitos habían ocurrido en ese lugar, como la vez que él y su hermano hicieron llorar a unos chicos mayores que ellos porque pensaron que iban a matarlos, o la vez en que encontraron una tarjeta de crédito y la utilizaron para comprarle un regalo del día de las madres a Mitsuya.

Por esa razón había decidido llevar a Samui allí.

Conversaban de cosas tan mundanas y monótonas. Por su parte, la chica le comentó que esa mañana se había levantado más temprano que de costumbre y había decidido hacerle el desayuno a su hermano, cosa que acabó con la cocina llena de humo y un Kazutora regañándola por haber puesto una cuchara en el microondas.

"Cosas que pasan"  le había dicho para consolarla, y luego procedió a contarle la forma en que la mascota de su hermano lo levantó de su sueño de belleza orinando en su cara, haciendo que la pelinegra se apartara de él, amenazandolo con contarle la lengua si se atrevía a besarla.

Después de eso, ambos se sentaron en unos columpios, haciendo una competencia de quién llegaba más alto, que tuvo como ganador el de rulos, procesandose la persona más superior del mundo, recibiendo un amistoso golpe de parte de la contraria. Ésta suspiró y ladeó su cabeza para observarlo con detenimiento.

ㅡSé que soy bonito pero no me veas tanto que me desgasto ㅡbromeó, logrando que Inagawa bufaraㅡ. ¿Sucede algo?

ㅡNop ㅡrespondió, marcando la 'p' ㅡ. Hoy tuvieron reunión, ¿no?

ㅡSí, ¿cómo lo sabes? ¿Me estás vigilando, amorcito?

ㅡ¡Claro que no! ㅡhizo una mueca asqueada que lo hizo reírㅡ. Es que hoy Matsuno fue a casa y cuando le pregunté por qué tan tarde me lo comentó.

Smiley elevó una ceja divertido al notar el tono de voz que su novia utilizó para referirse al sub-capitán de la primera división.

ㅡCreí que Chifuyu te caía bien ㅡle dijo cuando ella le preguntó qué ocurríaㅡ, ¿por qué ahora lo tratas por su apellido?

ㅡEse rubiecito últimamente pasa mucho tiempo con Tora y no me dejan estar con ellos ㅡse quejó en un tono roñoso, haciendo que el chico rieraㅡ. ¡Basta! No estábamos hablando de eso.

ㅡLo siento, pero que sientas celos porque tu hermano pasa más tiempo con sus amigos que contigo me resulta adorable y estúpido al mismo tiempo.

ㅡCállate y mejor cuéntame qué sucedió ㅡgruñó indignada.

ㅡEs confidencial, chismosita.

ㅡ¡Oh, vamos! ¿Ni siquiera un poquito? ㅡel mayor negó como respuesta y ella bufóㅡ. De géminis tenía que ser.

ㅡ¿Eso qué significa?

ㅡQue eres un pésimo novio.

ㅡ¿Por ser de géminis?

ㅡEfectivamente, mi querido tarado.

Smiley rió bajito, escuchando las razones por las que, según ella, géminis era el peor signo de todos. Por supuesto, él no comprendió nada, pero pensó que se veía bonita mientras hablaba de las estrellas y los planetas y por qué todo era culpa de mercurio retrasado o algo asi.

"¿Es por retrasado? Oye, que eso es cruel" le dijo, y entonces la menor se golpeó la frente ante aquella estupidez y procedió a explicarle, también, a qué se refería con eso.

Y no supieron cuánto tiempo estuvieron conversando, pero cuando se dieron cuenta ya se había hecho de noche.

Ambos se encontraban acostados en el césped, observando el estrellado cielo de aquella noche, a excepción de Fuyumi, quien solo observaba con atención las facciones del pelinaranja a su lado.

La sonrisa del chico se había convertido en su cosa favorita en todo el mundo, amaba verlo tan sereno, con esa sonrisa en su rostro, como si realmente no tuviera problemas.

ㅡ¿Qué ves? ㅡFuyumi no respondió, sin embargo llevo su mano a la mejilla de Nahoya acercando su rostro al de él, ocasionando que el varón haga un ligero puchero confundido ㅡTe juro que si me lave la cara.

ㅡ Cállate ㅡSusurro la pelinegra para luego dejar un cálido beso en los labios del mayor. Nahoya se acomodó en el césped, abrazándola fuertemente por la cintura ocasionando una silenciosa risa por parte de la chica. Luego de varios segundos, se separaron, permitiendole a Fuyumi ver los claros ojos de su pareja, los cuales eran adornados con pequeños brillosㅡBonitos ojos.

ㅡBonita cara.

Angel | Nahoya Kawata |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora