Querido diario:
Soy Jared Hazel Evans.
Hoy junto a mi melliza Lily, he recibido una carta para asistir a Hogwarts. ¡Severus también irá!
Creó que este día podría ser el inicio de muchas aventuras, risas y buenos momentos.
-Jared. H. Evans.
Pd: Prime...
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Londres. Junio 20, 1971. Narrador pov. Calle Magnolia.
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Era fin de semana y un chico de once años, se encontraba con casa sola.
Hace algunas horas había despertado, cuando bajaba las escaleras para ir directamente por alguna fruta para comer. Miro que la rejilla del correo entraban dos cartas.
Jared se acercó a tomar las cartas y las volteó para ver a quienes eran dirigidas. Leyó el nombre de su melliza en en uno de los sobres, confundido fue a la cocina.
Dejo los sobres sobre la mesa mientras iba al refrigerador por un poco de agua, miró una nota pegada en la parte de arriba.
Jared,campeón. Mamá y yo hemos salido al supermercado, Petunia esta en casa de una amiga y Lily salió al parque a ver a Severus.
Atte con amor, Papá. Pd: No olvides de lavar tu plato.
Aún aturdido por el sueño, entre cerró los ojos volviendo a leer la nota que su padre había dejado para él, sonrió un poco al ver la nota final.
Su familia si que lo conocía perfectamente. Abrió la puerta refrigerador y sacó la jarra de cristal con agua, se acercó a los vasos que estaban al lado del lavabo y tomó uno.
Se sirvió un poco, dejo el vaso en la mesa junto a las cartas y guardo la jarra con agua en donde había estado antes.
Tomo asiento en una de las sillas del comedor, acercó su mano al frutero y tomó una de las manzanas rojas que estaban ahí y le dio una mordida mientras abría el sobre con su nombre.
—❝Querido, señor Jared Evans. Nos complace anunciarle que fue aceptado en la escuela Hogwarts de magia y hechicería.❞...— Leyó el primer párrafo, le dio una mordida a su manzana.
El menor se quedó pensando por unos momento mientras miraba la carta sin seguir leyéndola.
En silencio volvió a leer leer mismo párrafo y lo demás que venía en la carta y luego la lista de materiales.
Había terminado con la manzana, entonces se dio cuenta que debía darle la noticia a Lily y a Severus.
Rápidamente se levantó dejando a un lado el corazón de la manzana, salió de casa con ambas cartas en mano y empezo a correr por las calles en dirección al parque.
