CIRCLES | James Potter

O21

O21: Sucia boca.

James POV.
Gran Comedor.
Septiembre 01, 1973.

↺

La verdad, hubiera dado lo que fuera para haber logrado llegar a Hogwarts con Jared. Pero esta contento con loa resultados del viaje.

La ceremonia de selección de casas había terminado hace tan solo unos minutos y comía finalmente, mis amigos estaban a mi alrededor quejándose sobre diferentes temas. Sirius me reclamaba donde estaba y si sabía lo preocupado que lo puse mientras Remus y Peter le decían que de callara de una vez por todas.

Eso era lo que más escuchaba debido a que estaban cercas de mi, pero también escuchaba lo que sucedía alrededor de la mesa de Gryffindor.

—Te lo digo, no sabrá lo que le espera a Evans.— Detuve mi tenedor a mitad de camino, estaba por comer un pedazo de espárrago cuando escuche.

Seguí actuando como si nada, pero poniendo mi total atención a la conversación del grupo de unos chicos de cuarto año que estaban como dos platos de donde estaba yo. La sola mención del apellido Evans me había echo reaccionar de esa manera.

—¿Te refieres al Slytherin al que Potter le echo el ojo?— Sentí mi magia remolinear en mi interior, estaban hablando de Jared sin saber que los escuchaba.

—Sí, él. Dicen que es un genio en Runas, si logro obtenerlo antes que Potter, tendré como esposo a la envidia de todos los hacedores de protecciones.— Esa voz, la reconocía dentro y fuera de la Sala Común, era Julien McLaggen.

Sentí una corriente de ira atravesarme, el maldito maníaco de McLaggen quería a Jared Evans como esposo en un futuro por el simple hecho de que en un futuro sería el mejor mago en Runas en siglos.

De manera rápida tome mi varita y me levanté bruscamente de mi lugar, sin dudarlo hechice al otro Gryffindor de cuarto año.

—¡strangulatus!— Lancé el primer hechizo que se me vino a la mente, el hechizo axficiador.

Mire como la capa de McLaggen se estiró en sus cuatro extremidades y luego lo envolvió con fuerza, ocasionando que no pudiera moverse en lo más mínimo y eso ocasionará que cayera hacia atrás con fuerza.

El grupo de ese idiota sólo me miró con horror al darse cuenta que había estado escuchando sus sucios planes en contra de mi chico de ojos lindos.

—¡Señor Potter!— Escuché perfectamente el reclamo de la Profesora McGonagall, quien sabía que se acercaba hacia donde estábamos con prisa.

Daba igual si terminaba castigado, estaba totalmente satisfecho de haber protegido el honor del chico del que estaba perdidamente enamorado. Pero entonces, una mirada pesada me hizo volver a ver hacia la mesa de Gryffindor, Lily Evans me miraba expectante.

De reojo mire que también tenía su varita en mano y me di cuenta que no había sido el único en escuchar todo, pero por la mirada de la pelirroja, eso hizo darme cuenta, que ella ahora sabía lo que sentía por su hermano de manera más directa.

Jared POV.

↺

Escuchaba atentamente como Severus me regañaba por haberme ocultado de él y Lily, Regulus y Barty solo nos miraban con diversión mientras cenaban.

Amaba a esos dos, pero parecían que ellos amaban aún más el ver como sufría cuando Sev me reclamaba sin parar lo imprudente que eran mis acciones. Sin apartar la vista de mi mejor amigo, sentí una repentina oleada de magia llegar a mi.

Su magia me hizo sentir como que alguien estaba enojado y quería defenderme de algún peligro, en estos momentos agradecía haber estudiado sobre la magia y lo relacionada que estaba con nuestras emociones. Ignorando el resto de la peroratra de Severus, empecé a mirar hacia las demás mesas del Gran Comedor.

—¡strangulatus!— Alguien había lanzado un hechizo y se había escuchado por todo el comedor.

Me levanté en mi asiento un poco, solo para mirar por encima de la cabeza de Barty. Sentí una gran sorpresa al ver que Potter estaba totalmente de pie en donde antes estaba sentado y apuntando su varita hacia alguien que se retorcía en el suelo con la capa del uniforme enredada en él.

—¿Quién es el que se asfixia?— Le pregunté a ambos niños sangre pura, ellos tenían un conocimiento más sobre los apellidos de los magos.

Ambos menores voltearon al mismo tiempo y luego se rieron un poco para volver a verme a mi, por la manera en que ellos reían parecía ser que el afectado no era muy querido.

—Es Julien McLaggen, un completo imbecil. No te preocupes, seguro hizo enojar a Potter y se lo merecía.— El comentario de Barty no era de mucha ayuda, ya que no conocía de nada a McLaggen.

Pero confiando en que tal si se lo merecía el mayor, volví a acomodarme en mi asiento para seguir cenando mientras ahora Severus me regañaba por ignorarlo y prestar más atención a los chismes que sucedían a mi alrededor.

Y una pequeña parte de mi magia, estaba feliz de que resultó ser Potter quien estaba enojado y nos defendió de algún comentario de McLaggen.

headcanon;

si, también el padre
se Comarc McLaggen
fue un idiota y su hijo
obviamente siguió sus
pasos,,,