𝑮𝒐𝒍𝒅𝒆𝒏 𝒉𝒐𝒖𝒓 | 𝑩𝒂𝒋𝒊 𝑲𝒆𝒊𝒔𝒖𝒌𝒆

|16|

Akari gateó hasta Baji quién estaba poniéndose su camisa sentado en la cama. Iban a salir, irían a comer con Mitsuya, Smiley y Emma.

-¿Qué haces Akari?- Preguntó intrigado al sentir como unas frías manos tomaban su cabello con delicadeza.-

-Shh, voy a peinarte.- El azabache frunció el entrecejo, jamás se había peinado diferente, solo una coleta o dejarlo suelto pero tampoco es como si pudiera negarse ante Akari.- Vamos, no pongas esa cara. Te quedará hermoso, confía en mí.- Los ojos de Akari brillaban con tanta emoción que ahora se le hizo más difícil negarse ante ella, que solo pudo susurrar un "tsk" para después cerrar los ojos. Claramente se hacía el complicado, ya que le relajaba tanto saber que su amada lo peinaba, se sentía todo un pequeño niño con un dulce en su mano.

Akari comenzó a taradear un canción. La canción que solían bailar cada vez que la hora dorada iniciaba.

Dance with me
And I'll sing to you
Symphony
Won't you kiss me
Shut me up, please

-Sing to you
Shiloh Dynasty.

-¿Quieres qué te bese? Puedo hacerlo.-

Akari tragó en seco al escuchar al azabache, ¿Había escuchado bien? Sus manos temblaron y sus mejillas estaban más que coloradas. Era evidente que quería eso desde ya hace un tiempo pero la voz del azabache diciendo esas palabras te ocasionaba algo completamente diferente, hacían que tu piel se erizara y te sintieras tan pequeña ante el. Mientras tanto el de cabellos oscuros lo había dicho pero con demasiada pena, aunque también quería hacerlo.

-No seas idiota o llegaremos tarde.- Respondió finalmente para terminar de trenzar su cabello y se levantó sin mirarlo.-

-Mírame.- Pidió apretando las caderas de ella, qué al instante la hicieron estremecer.-

Lentamente ella lo miró, sus mejillas aún seguían rojas pero su orgullo era demasiado que no permitiría que viera lo apenada que estaba en estos momentos fué así que lo miró de la misma manera, tan desafiante y segura.-Veo que tú también lo deseas.- Estaba jugando con fuego y lo sabía pero lo que hizo el azabache fué algo completamente diferente que la dejo suspirando. El besó su frente, sus labios en su piel la hacían sentir tan amada, como si solo fueran ellos y nada más.

-Vamos, es tarde.- Dijo tomándola de la mano para salir de su hogar, Akari asintió con una enorme sonrisa, sentía todo aquello que solían decir las parejas "mariposas en el estómago" y vaya que se sentía en los cielos.-

Akari subió en la moto, esta vez solo irían en una, en la de Baji. La chica se aferró completamente a la espalda de el, hasta llegar a su destino. Un pequeño restaurante cerca del santuario era donde se reunirían, ya que casi siempre solían ir al sitio. Al llegar solo vió a Mitsuya y Smiley.

-¿Tu mami te peinó, Baji?- Preguntó el de cabellos naranjas con una sonrisa en su rostro.-

-Tsk, cállate idiota.- Resopló con molestia.

-Pensamos que ya no llegarían, es un alivio que ustedes no cancelaran.- Dijo Mitsuya sentandose de nuevo en su silla.-

Akari frunció el entrecejo.-¿Emma te dijo algo? No la veo por ningún lado.- Mitsuya negó.

-Dijo que no se sentía muy bien, que se quedaría a esperar a Mikey. Hoy será la pelea de Pah.- Lo había olvidado, era por eso que estaba tan inquieta como si algo malo fuera a suceder.-¿Estás bien, Akari?-

Akari parpadeó un par de veces.- Oh sí, estoy bien.-

Baji se sentó entre Mitsuya y Akari, mientras que Smiley seguía burlándose de su peinado hasta que la chica lo cayó de un buen golpe. Después de aquello hablaron sobre la pelea contra Moebius, al igual que como iba la ToMan en cada escuadrón, pidieron algunas bebidas y mientras el tiempo más avanzaba ellos comenzaban a sentirse más intranquilos, como si había algo que debían saber.