Las manos de Jimin temblaban mientras intentaba deshacer el nudo del moño que mantenía esa enorme caja cerrada. Su cuerpo se llenaba de impaciencia y frustración, incluso su lobo estaba ansioso. No sabía que se iba a encontrar dentro pero su corazón ya latía acelerado.
Cuando por fin el moño dio de sí y abrió la tapa, se quedó mudo. La caja estaba llena de todos sus dulces y chocolates favoritos, y aunque eso le hizo sonreír en un primer momento, fue lo que encontró adornando las paredes de la caja lo que le hizo comenzar a sollozar quedito.
Por dentro la caja estaba llena con retratos de él hechos en diferentes técnicas y en diferentes posiciones y realizando distintas acciones: Él dormido, él preparando clase, él jugando videojuegos, él desnudo excitado. Todos estaban firmados por la misma persona: JJK.
Jimin movió los dulces y chocolates para poder tomar los dibujos y se dio cuenta cuando los tuvo en las manos, que parecían hechos en diferentes momentos porque eran con papeles y materiales diferentes.
Fue hasta después de que estuvo admirando las obras largo rato que reparó en lo que estaba al fondo de la caja, un cuaderno forrado en piel que tenía las mismas iniciales grabadas a fuego sobre la tapa: JJK.
Cuando lo abrió, se quedó sin aire en sus pulmones: ahí, en sus manos, se encontraba lo que él pensó sería la posesión mas preciada de una persona, un diario... el diario de Jung-kook.
24 de Agosto
Hoy volví a ver al chico lindo de la app de citas. Esta vez no fui tan imbécil de pasar de largo y le hablé. Aunque al principio parecía que no quería hablar conmigo, después de un rato charlamos un poco. En verdad es lindo, tiene un rostro angelical. Fue una lástima enterarme que no vive más en Busan. Tengo que ir verlo, tengo que conocerlo, algo dentro de mí me dice que tengo que estar frente a frente a él. Ya estoy planeando un viaje a Bucheon.
30 de Septiembre
¡Mañana! Por fin mañana podré verlo y abrazarlo y...¿besarlo?. ¿Qué me has hecho Park Jimin? No puedo dejar de pensar en ti. Ni siquiera me puedo concentrar en el trabajo y todos lo notan. Incluso Tae lo ha notado y ahora no deja de joder con saber quién me tiene sonriendo todo el tiempo. Pero no le puedo decir, todavía no. Aunque es mi mejor amigo, es como hermano de Ye Ji y no quiero que ella lo sepa. Tengo miedo de que cuando Jimin se entere de Ye Ji todo se vaya a la mierda. Tengo que hablar con ella, tengo que poner las cosas en claro, pero ella no se lo va a tomar nada bien. No quiero que se lleve a mi beba de nuevo. Volver a verla después de tanto tiempo ha sido lo mejor que me ha pasado, pero su madre está loca. No se puede hablar con esa mujer. Mi Jimin hermoso ¿me perdonarás cuando lo sepas?.
Ahora mismo solo puedo pensar en ti, tiemblo de anticipación de tenerte en mis brazos. Ese algo que hay en mi pecho me grita que mi lugar está a tu lado. Creo que... creo que ya te amo.
Jimin no podía pensar con claridad, ahí en sus manos tenía lo que siempre había querido, la verdad. Quería saber por qué el Alfa le había lastimado como lo había hecho. Buscaba una explicación y ahora la tenía y más. Tal como Jung-kook le había dicho, tenía su corazón en sus manos, se estaba abriendo ante él de la forma más honesta y sincera posible.
La siguiente entrada era del día que se conocieron.
1 de Octubre
Simplemente te amo, te estuve esperando toda mi vida. Sé que toda la mierda que he vivido y he causado terminan aquí, contigo. Eres la esperanza que pensé había perdido del todo. No puedo creer que te haya encontrado. Tú eres mi hogar y mi destino, tus labios el ámbar más delicioso que jamás haya probado. Eres tan precioso que, si no te tuviera a un lado de mí, durmiendo plácidamente, no creería que eres real. ¿Qué me has hecho Park Jimin? No dejo de preguntármelo, pero lo que sea que me hayas hecho... Gracias.
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Mi vida sin mi
Fiksi Penggemar¿Qué pasa cuando lo vida que llevaste resultó ser una mentira? Nada ni nadie puede sacarte del remolino que te arrastra cada vez más profundo sin dejarte respirar. Jimin, un dulce pero solitario Omega, cree que ha encontrado al amor de su vida en el...