🤍Especial🤶🏼🎄: "Sorpresa doble"

463 25 7
                                    

🤍BARCELONA, DICIEMBRE 2023...

Las manos me sudan, me sudan más de lo que me sudaban aquella vez que di el último exámen en la universidad. Estoy tan nerviosa que podría desmayarme justo ahora para no tener que decir lo que debo decir.

¿Podré desmayarme intencionalmente? No, no creo ser capaz de lograr eso...

¡Joder!

Me encantaría que fuera otro día, otra fecha, otro año si fuera posible, pero esto ya lo dilaté demasiado. Bueno, no demasiado, pero si me lo estoy guardando hace tres días.

—¿Y a ti ahora que te pasa?

—Nada, ¿por qué lo dices? —respondo de carrerilla.

—Dijimos que lo haríamos hoy, y lo haremos hoy no puedes dejarme sola ahora. —me advierte.

—Mari, para ti es fácil, ya lo has hecho antes —me agarro la cabeza—. Yo no.

—Vale —suspira—, comenzaré yo. ¿Estás de acuerdo?

—Creo que estoy hiperventilando, tengo calor y mucha sed, necesito aire —me abanico el rostro con las manos—. ¿Y si...?

—Y si nada, mueve el culo. —me empuja por la espalda.

—No creo que esta sea una buena idea. —niego con la cabeza, frenéticamente.

—Claro que sí, estamos en confianza, somos familia —susurra cuando salimos de la cocina—. ¡Atención, todos! —su grito me hace sentir náuseas, y un ligero mareo.

—Mari... —murmuro.

—¡Tenemos noticias que los harán caer de culo! —a mí me hará caer de culo.

—Joder... —todo a mi alrededor se mueve.

Y entonces, todo fue negro.

🤍TRES DÍAS ANTES...

Navidad es la mejor época del año, las celebraciones para nosotros jamás terminan, y desde que los mellizos nacieron la navidad para mí ha mejorado considerablemente. Es decir, cuando la navidad es sólo con adultos es aburrida, en cambio, cuando hay niños es maravillosa. Además, es una fecha importante para mí tía por lo del matrimonio y eso.

Las compras navideñas este año fueron diferentes, creo que compré todo por internet y una que otra cosa en alguna tienda de paso.

Últimamente no me he sentido nada bien, física y psicológicamente estoy agotada. Juro que si no fuera porque Diego se ofreció a cocinar para la cena de nochevieja yo no hubiese hecho más que llamar a algún lugar de comida rápida, posiblemente comida china, estoy antojada de comer comida china ya desde hace unos días.

—¿Qué es lo que piensas? —doy un pequeño salto por el susto, estaba metida en mis pensamientos y no noté la presencia de Mari.

—No estoy lista... —muerdo la punta de mí lengua—. Hoy no es un buen día para esto, creo que mejor lo hago en otro momento.

—Lo haremos juntas, Cris, eso fue lo que prometimos —me recuerda—. Además, creo que no hay momento perfecto para decirlo.

—Mari, no quiero... No puedo. —cierro los ojos y suspiro con pesadez.

—¿Qué es lo que no puedes hacer, madrina? —vuelvo a dar un pequeño salto por el susto que me dio Pablo, estos días he estado así de asustadiza.

—Nada que te importe, Pablo. ¿No estabas ayudando a mi bellísimo arquitecto en la cocina? —lo mira entrecerrando los ojos.

—Diego es un jodido loco, no puede evitar ser un controlador hasta en la cocina. No sé cómo lo aguantas. —dramatiza, algo típico de Pablo.

🤍Corazón de tiza🤍 [CONTENIDO ADULTO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora