🤍Corazón de tiza🤍 [CONTENIDO ADULTO]

🤍Capítulo 22/ Estoy celoso, sí, estoy celoso /

🤍PUNTO DE VISTA DE FELIPE🤍

🤍BARCELONA, OCTUBRE 2020...

No puedo quitarme de la cabeza la imagen de Cristina con esa camisa azul y sin sujetador. No tengo idea de cómo me di cuenta de ese detalle, pero al chocar con ella lo primero que vi fue su pecho, y ¡sorpresa! no llevaba sujetador. Aún me pregunto por qué no lo llevaba, no dejo de pensar qué la llevó a tomar esa decisión, no es como si se hubiese olvidado de ponérselo. Hay algo más, sé que hay algo más.

Y yo estoy haciendo un drama de algo tan simple.

Ya han pasado días desde el momento en que choqué con ella por casualidad pero quizá, sólo quizá, la he estado "vigilando" un poco, los días que le siguieron a ese y nuevamente, ¡sorpresa! no hay sujetador.

No puedo creer que esté pensando en eso, hace unos momentos estaba follando con Caro y ahora ella duerme en mi pecho, me duermo pensando en eso, pensando en ella, en Cristina...

Despierto porque siento una caricia en la mejilla y escucho una voz susurrándome.

—Despierta, ya es tarde, Felipe —me quejo y me remuevo en mi cama—. Tienes el sueño pesado, ya despierta.

Abro los ojos y lo primero que veo es el cabello castaño de la mujer, lo siguiente son sus labios, conozco ese cabello y los labios de la mujer. Ella no es Caro, ella es Cris.

—¿Cris? —pregunto, confundido.

—¿Si? —sonríe y besa mi mejilla.

—¿Eres tú? ¿De verdad eres tú? —me escucho como un desesperado.

—Claro que soy yo, ¿quién más sino?

—No es posible, esto no es...

—No sé qué es lo que te ocurre esta mañana pero ya levanta... —observo sus ojos y luego me siento en la cama.

Es mi cama, es mi habitación y Cris jamás estuvo en mi apartamento. Esto no es real, no puede ser real, estoy soñando...

—No eres real. —afirmo, más decepcionado de lo que debería.

—Soy tan real como tú, guapo.

—Pero... —ella se acerca y me besa, se siente tan real, extrañe tanto besarla.

—Silencio, deja de hablar y ponte de pie —hago lo que me dice—. Podríamos darnos una ducha juntos, ¿qué opinas?

—Es una muy buena idea. —sonrío a pesar de saber que esto no puede estar pasando realmente, es imposible.

—Sabía que dirías eso... —ella sonríe y besa mis labios.

El beso empieza lento, sus labios tocan los míos, segundos después su lengua delinea mi labio inferior para después morderlo, abro la boca, su lengua y la mía se encuentran.

Sus manos acarician mi cabello, mis manos se posicionan en sus caderas.

No sé cuánto tiempo pasa, no sé cuándo bajé mis manos hacia su trasero y la acerqué a mi cuerpo pero no quiero que esto acabe, no quiero que se aleje de mí nuevamente.

—Te quiero... —es inevitable que esas dos palabras salgan de mi boca como un susurro lastimero.

La miro, estoy acojonado. Ella abre los ojos, está mirándome fijamente, apoya su frente contra la mía y sonríe.

—Te quiero, te quiero mucho más, Felipe Rodríguez...

Y entonces... Despierto.

Al momento en que abro los ojos me siento en la cama exaltando, a mi lado se encuentra Caro mirándome preocupada.