🤍Capítulo 00/ Prólogo /

2.1K 68 6
                                    

🤍BARCELONA, JULIO 2019...

Como cada noche desde los dieciocho años me encontraba en mi camerino aplicándome labial rojo matte que es lo último que me falta para estar preparada, esta noche llevaba una bata negra de seda cubriendo mi semidesnudez, zapatos de tacón alto de un color rojo como mis labios y mi ropa interior de encaje que no deja mucho a la imaginación.

—Cris, ¿estás lista? —María entró al camerino colocando sobre sus hombros una bata rosa chillón.

—Sí, sí, ¿me acercas el antifaz? —terminé de pasar la crema en mis piernas dejando brillos plateados en mi piel que se notaban a contraluz.

—Hoy hay un montón de adolescentes hormonales, los aires afuera están que arden. —hizo un gesto con la mano de abanicarse y no pude contener la risa.

—¿Adolescentes hormonales, Mari? —normalmente los días de semana podemos ver muchos hombres adultos, empresarios importantes y una que otra mujer. Los fines de semana el público es más variado y podemos toparnos con algunos universitarios cachondos.

—Vale, vale, quizá exageré un poco... —se sienta en el sofá de piel negra y pide un trago—. Pero estoy segura que no tienen más de veinte años, es un grupo de al menos diez en una mesa del lado izquierdo, ve ahí y sabrás de lo que hablo... —sonreí de lado y asentí—. Suerte bella, hazlos tener sueños húmedos contigo. —me guiña un ojo.

—Ya... Después de la gran Pantera eso será difícil...

—Lo sé, pero puedes intentarlo —sonrió burlona—, cuando me quito el antifaz solo soy Mari, recuérdalo, odio ese maldito "nombre artístico" —hizo comillas con los dedos.

—Dímelo a mí... —me puse el antifaz y suspiré.

—Caballeros y señoritas, ahora quedarán embelesados con la belleza de ni más ni menos que Afrodita, mantengan sus manos quietas y no pestañeen, no se querrán perder un segundo de nuestra hermosa Afrodita bailando aquí en Diosas del Olimpo...

Ramón está perdiendo el toque, ya no da buenas presentaciones...

—Solo espero que esta vez sea una canción que si me den ganas de bailar... —camine fuera del camerino luego de sacarme la bata y colgarla.

Las luces estaban apagadas, comenzó a sonar "call out my name" de The Weekend. Me posicioné en medio del escenario y simplemente me dejé llevar.

¡Hey!, creo que olvidé algo muy importante... No me presente, mi nombre es Cristina Serrano, tengo veintiséis años. Si comienzo a hablar de mi vida creo que será algo triste y no estoy en esa etapa de la vida, por lo tanto solo hablaré de cosas realmente importantes.

A mis cinco años mi padre murió y yo tuve que ir a vivir con mi tía, la hermana menor de él. ¿Mi madre? Ni idea de dónde se encuentre, si es que aún vive.

Mi tía Alba cuido de mí y es como mi madre, es la mujer más amorosa que conozco y siempre está cuando más la necesito. El dinero era escaso, y yo odiaba ver cómo mi tía se desvivía para darme todo lo necesario para vivir de la mejor manera, le debo mucho.

Es por eso que a los quince años decidí trabajar en una cafetería de mesera, tres horas al día los siete días de la semana, el ochenta por ciento de lo que ganaba lo guardaba debajo del colchón de mi cama, es así cómo pude reunir dinero para pagar la matrícula en la universidad.

Mi sueño siempre fue estudiar en la universidad y convertirme en profesora de matemáticas, es por eso que decidí trabajar y reunir mi propio dinero para lograrlo.

Claro que con el sueldo de una cafetería no lograría demasiado, es por eso que a los dieciocho años comencé a trabajar en otro lugar además de la cafetería. Mis horarios habían cambiado cuando terminé el Bachillerato por lo que en verano trabajaba de lunes a sábado en la cafetería de ocho de la mañana a seis de la tarde.

🤍Corazón de tiza🤍 [CONTENIDO ADULTO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora