Palacio de Topkapi.
Luego de los acontecimientos sucedidos la noche anterior, el sultán no se separó de su amada durante toda la noche, pues le aterraba la idea de que alguien la quisiera muerta, por otro lado una pelirroja se encontraba haciendo las tareas diarias que le tocaban, la noche anterior pensó que el sultán la llamaría pero la decepción llegó cuando se enteró que el sultán no se separó de la sultana en toda la noche.
Devuelta con el sultán el cual se encontraba con Melek esperando que esta despertara, mientras le acariciaba delicadamente su rostro la sultana empezó a removerse para posteriormente despertar, cuando la sultana abrió los ojos de encontró con la mirada azulada del sultán el cual se encontraba sonriéndole dulcemente mientras le acariciaba el pelo.
-Buenos días mi sol.- dijo el sultán dándole una cálida sonrisa a la sultana.
-Buenos días su majestad.- pronunció la sultana mientras el sultán la ayudaba sentarse.-¿Que me sucedió?
-Te envenenaron mi ángel, pero ya ordené que investigaran quien es el responsable.- dijo acercándose a la sultana dándole un beso en la frente mientras ella cierra los ojos.- Te juro que el responsable pagará no importa quien sea, pagara por atentar contra tu vida.- mencionó ahora viéndola a los ojos.- Ahora vamos a darnos un baño.- dijo en tono divertido haciendo que la sultana lo viera con los ojos bien abiertos.
-Su majestad…- pronunció desviando la vista con las mejillas sonrojadas, el sultán río con dulzura al ver a su mujer de esa forma.
-Mi ángel.- dijo tomando suavemente el mentón de la sultana haciendo que esta la viera.- No haremos nada mi ángel, aún estás débil.-dijo para posteriormente tomar la mano de la sultana para salir en dirección hacia los aposentos del sultán.
En el camino la sultana ciertamente se sentía nerviosa ya que a pesar que su cuerpo estaba en forma por sus anteriores entrenamientos, pero aún se sentía un poco cohibida, pues era la primera vez desde el nacimiento de su hija de casi 3 años que el sultán la vería desnuda.
En el camino pararon en la habitación de la sultana a buscar un cambio de ropa, también pasaron por los aposentos de sus hijos para saludarlos he indicarles que desayunarían en el jardín, al llegar a los aposentos del sultán los nervios de la sultana aumentaron, el sultán la guió hasta el baño donde procedió a ayudarla primero a soltarle el largo cabello negro azabache el cual cayó como una cascada hasta el inicio de sus caderas, el procedió a quitarle las joyas manteniendo el contacto visual.
El sultán se situó a espaldas de su mujer, colocó ambas manos en los hombros de la sultana bajando suavemente el vestido mientras acariciaba la piel expuesta de la fémina, posó un suave beso en el hombro desnudó de la sultana enviando ondas de calor en el cuerpo de la sultana, el sultan procedió aún a espaldas de la sultana a quitarse la ropa.La sultana se sentía nerviosa, podía escuchar a su esposo desvestirse sin embargo no quería voltear, la vergüenza y los nervios la consumían, estaba a punto de tomar su vestido pero sintió las manos del sultán empujarla hacia el cuerpo del mismo, el sultán dejó un suave beso en el cuello de su esposa para proceder a alejarse a buscar los s utensilios para ducharse, lavo su cuerpo y el de su mujer sin ningún índole sexual, en todo momento hablaron de sus años pasados, recordando sus aventuras, sus entrenamientos, el primer embrazado de Melek, pasaron un momento íntimo entre esposos, aunque con mucha tensión sexual, más sin embargo ninguno dio el primer paso, el sultán por cuidar el estado de salud de su esposa y la sultana por sentirse insegura, terminaron su baño en medio de anécdotas y besos inocentes, salieron y disfrutaron un desayuno aunque un tanto incómodo, pues los hijos mayores de ambos se encontraban reacios a seguir compartiendo con su padre.
En el harem estaba una pelirroja sentada junto a su amiga conversando luego de terminar sus tareas diarias, cuando se le acerca otra concubina.
-Al parecer ya su majestad se aburrió de ti Hurrem.- mencionó en voz alta haciendo reír a algunas concubinas a su alrededor.

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La Sultana Melek
FanficSoy la sultana que el sultán Suleiman olvidó por un tiempo, pero después volví, en frente de mis enemigos y de todos mucho más fuerte y poderosa. ¡ATENCIÓN SU EXCELENCIA HASEKI MELEK SULTAN ESTÁ AQUÍ! Soy la sultana más poderosa de este imperio...