La Leyenda de las 3 Almas Negras

♤111:Nieve♡

Narrador omnisciente:

Noobly había salido ileso, nada pasó porque el miedo terminó impulsandolo a que se tomará aquella sopa, el vacuno felicitó al peliazul y le dio un beso de premio, claro que también le dio uno al castaño, para que no se pusiera dramático diciendo que prefería a Noobly antes que a él, ellos se amaban el uno al otro, no tenían favoritos, simplemente se amaban, como tú madre, que dice que no tiene favoritos, sólo que ellos no mienten, tú madre si-digo digo COF COF ¡Corten! ¡Corten!

Creisi: ¡Compre Sedal Ahora ya! ¡Si llama en las próximas 24 hrs se llevará una vaquita gratis! Les muestra a Andreh ¡Apurese! ¡Porque sólo hay una!

¡¡La rosa de Guadal-¡¡La leyenda de las 3 Almas Negras!!

Al parecer nievaria, ¿Por qué? Firex había despertado con ganas de jugar en la nieve con su chico, así que hizo que nevara, porque no se puede jugar en la nieve si no hay nieve ¿O si?, claro que esto al peliazul no le cayó nada bien y cuando iba directamente a regañar al chico, el castaño se adelantó y le dijo que se divirtiera y que todo estaba bien, el castaño agarró al peliazul con sus tentáculos y le sonrió.

Creisi: Vamos que el frío te hace mal~ y empezó a caminar llevándose al chico con él

Noobly: ¿Por qué hiciste eso? Sabes que me afecta mucho el frío miró mal al castaño

Creisi: No te preocupes маленькое облако~ yo te cuidaré~ le sonrió al chico

Noobly: ¿Por qué de pronto hablaste ruso? Y la tuya por si acaso ah Miró al chico con los brazos cruzados no tenía ganas de andar traduciendo lo que le dijo el castaño 

Creisi: rió ligeramente no dije nada malo y porque es mi idioma natal y si no lo hablo por mucho tiempo terminaré olvidándome de como se habla y no quiero eso, aparte a Andreh le gusta dijo caminando con tranquilidad mientras tenía al peliazul de cabeza

Noobly: ¿A Andreh le gusta que le hables en ruso? Miró al chico confundido pero él no sabe ruso...

Creisi: Seeh no sé, digo, si le gusta, pero no entiende lo que le digo en lo más mínimo, supongo que le gusta como suena se ríe

Noobly: No pos...raro dijo con confusión

La risa del castaño no se hizo esperar, terminó contagiando al peliazul que empezó a reír también acompañandolo.

Ya habían llegado a la habitación el castaño se sentó en la cama, puso al peliazul en su falda, los tapó con la manta y dejó un beso en la frente del peliazul, acurrucandolo, el peliazul cerró sus ojos en poco tiempo, el calor del castaño le daba sueño y el estar tan cómodo le facilitaba el hecho de quedarse dormido, este estaba dormitando a cada rato.

Creisi: ¿Mmm? Miró al chico ¿Te quieres ir a mimir cielo?~ dejó un beso en la mejilla del peliazul

Noobly: Ujum respondió con cansancio sintiendo como el castaño se acostaba y lo acurrucaba en su pecho sólo será...Ahww bostezo ligeramente  un rato... se aferró más al castaño pegándose más a él y cerró sus ojos empezando a dormir

El castaño acariciaba su cabello para mantenerlo tranquilo mientras el chico dormía, se preguntaba donde estaba su vacuno, ahí fue cuando lo recordó, fruncio levemente el ceño, una misión, él solito, sin nadie más, le inquietaba el hecho de que esa misión haya sido asignada sólo para él, claro que confiaba en que el peliblanco podía cuidarse solo, lo había visto varias veces derrotar a cosas mucho más grandes y altas que él y nunca demostraba miedo alguno al ser derrotado, confiaba plenamente en si mismo siempre, era como si el miedo no pudiera carcomer su alma lo suficiente, pero al mismo tiempo le asustaba cosas simples como los truenos o no encontrarlo a él o a Noobly en la cama a la madrugada, le aterraban las cosas más simples y a la vez lo que debía aterrarlo no causaba nada en él, era algo muy curioso del vacuno, suspiró con preocupación, el tiempo estimado de su llegada era de 3 días, si no llegaba al tercer día, iría con Noobly a buscarlo.

En la cocina:

Yasser preparaba magdalenas en el horno, pero ahora se encargaba de preparar el mus de chocolate.

Yasser: ¿Tú que crees? Dijo extendiéndole una cucharita con algo de chocolate al chico

El pelinegro pasó su lengua por la cucharita, saboreo un poco y agitó su cola levemente.

Oscarin: Creo que le vendría bien un poco más de azúcar le sonrió al chico

Yasser: ¿Tú crees? Puso un poco más del mus de chocolate en la cucharita y repitió las acciones del pelinegro Sip, tienes razón acarició las orejitas del pelinegro y le sonrió dulcemente al chico Gracias lobito~

Un leve sonrojo se hizo presente en las mejillas del pelinegro y le devolvió la sonrisa con vergüenza riendo nerviosamente.