Esposo violento

Parte 11

-MEL!!!!-me grita Matt, por instinto me asusto y espero lo peor, que es algo a lo que ya estoy acostumbrada.
-Q..que pasa?-pregunto desde la parte de arriba.
-¿Has visto unos papeles que los dejé anoche en la mesa?-no recuerdo haberlos visto.
-No- digo cortante porque recién me levanto.
Matt sube las escaleras y me ve desde la puerta de la habitación. Yo solo me siento en mi lugar y espero a que el diga lo que debo hacer.
-Voy a entrenar, vengo temprano. Si quieres podemos hacer algo- dice nervioso
-Si-digo nerviosa
-Invite a tus amigos nuevamente para salir a un bar; podemos ir los dos-dice finalmente y me ofrece una sonrisa.
-Estaría bien-digo alegre y él se despide de mi.
Paso toda la mañana arreglando un poco la casa y lavando ropa.
Al caer las 3 de la tarde escucho la puerta abrirse.
-Mel-grita Matt y bajo.
-Aquí estoy-digo.
-Tengo que decirte algo- dice desde abajo y voy por él.
Al momento de estar al frente me dirige al sillón tomándome de la mano.
-Me pones nerviosa- le digo y el solo toma mi cara.
-Te amo-dice sin más y comienza a besarme.
Me deposita encima de él y acaricia suavemente mi rostro teniendo cuidado de no lastimarme más por el golpe de ayer.
Lo beso y le quito la camisa, y el sigue mi misma acción. Al ver que no tengo nada por debajo sonríe y comienza a lamerme con mucha delicadeza, sobándome mi cintura con ambas manos y yo solo me dedico a sobar su cabello.
Él me quita mi interior y me toca. Es cuando me empiezo a quejar de placer por sus toques mirándome a los ojos.
-Solo voy a tocarte, ¿si?-me pregunta y yo asiento la cabeza desesperadamente.
Mete dos de sus dedos y mi mundo estalla, lo único que existe ahora solo soy yo y sus dedos dentro de mi. Hala mi cabello hacia un lado y me empieza a besar mi cuello, mi espalda se arquea por instinto y empiezo a mover mis caderas.
-Tranquila chiquita, voy más rápido-dice eso y sus dedos empiezan a moverse el doble. Me quedo quieta por un instante y mis gritos se escuchan por toda la casa. Sus dedos empiezan a otra velocidad y es cuando le digo casi sin aliento.
-Me voy a venir-sus dedos siguen a la misma velocidad y al momento de retirarlos estallo en un orgasmo. Deja que me recargue en sus brazos y empiezo a respirar con dificultad. Él soba mi espalda y me tranquiliza con pequeños besos en mi cabeza. Esperamos 5 minutos y habla.
-¿Estás bien?, tenemos que ir a cambiarnos.-me dice y me separo de él para luego mirar hacia abajo y ver todo su pantalón mojado por mi.
-Lo..lo siento-digo tímida y él solo sonríe
-No tienes que disculparte, vamos-me carga hacia el suelo y tiemblo por un instante cuando soy depositada en el piso.
Subimos las escaleras y entro al baño para darme una ducha. Matt me pregunta a lo lejos si ya terminé y yo le aviso que si. Salgo y comienzo a cambiarme mientras es el turno de él.
La tarde pasa y solo me dedico a dormir, Matt dijo que se iba a quedar en la casa porque estaba muy cansado. Creo que nuestra vida está bien por ahora, pero tengo que irme próximamente y eso me da mucho miedo.
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Estamos por entrar al bar donde nuevamente están mis amigos, pero esta vez vengo con Matt. Me siento tranquila porque se que esta vez va a ser bueno pero prefería mejor estar a solas con ellos porque no tienen ninguna relación con mi esposo.
-MELANY-dicen todos y corren a abrazarme. Matt me deja a un lado y lo agradezco.
-El es mi esposo, su nombre es Matt-digo y lo presento ante todos, lo saludan y nos dirigimos a la mesa.
Conversamos de todas nuestras vidas y tomamos cada uno entre 3 a 4 shots de tequila. Cuando son las 12 am le aviso a Matt que voy al baño y el solo asiente para después seguir conversando con mis amigos. Me dirijo al baño y por el pasillo me encuentro a mi maestro de la orquesta. Él me voltea a ver y se levanta de la barra para dirigirse a mi.
-Melany, no pensé que estabas en este lugar-me dice y me abraza. Esto es nuevo para mi, pues solo nos habíamos tratado de una forma profesional.
-Si, hoy vine con mis amigos y mi esposo-le digo y su cara es muy expresable cuando le menciono que estoy casada.
-No sabía que estabas casada, felicidades-me dice y solo asiento con la cabeza.
-Gracias, llevo un año. ¿Que hace usted aquí?- le pregunto y al segundo me arrepiento porque no quise preguntar de esa forma.
-Solo vine a tomar unos tragos con unos amigos- y me señala con el dedo a las demás personas que se encontraban en la barra donde el estaba sentado.
-Que bueno maestro-digo.-Yo me tengo que ir, pero fue un gusto saludarlo.-me despido de él y voy inmediatamente al baño. Hago mis necesidades y me lavo la cara.
Al salir del baño ya no veo a mi profesor y por un segundo lo agradezco. Me dirijo nuevamente a la mesa y ellos siguen riéndose junto a mi esposo.
-Te tardaste-me dice Matt y luego me presiona mi cintura.
-si, me encontré al maestro pero creo que ya se fue-les digo para todos y ellos solo me preguntan como estaba. Les respondo y seguimos conversando.
A las 2 de la mañana nos despedimos y nos dirigimos cada uno para nuestras casas.
-Deberíamos repetirlo, tu esposo es muy divertido-me dice una amiga y yo solo le respondo que es verdad.
-Nos vemos Melisa, un gusto-me dice por último Marcus, que es otro amigo y yo le digo lo mismo.
Al llegar al carro Matt me toma de la cabeza y me da un beso en la frente.
-¿Estás bien?. Puedo manejo yo- le digo porque creo que está ebrio pero solo niega con la cabeza.
Nos dirigimos a la casa y él me dice que mis amigos son muy graciosos y yo solo río con él. Matt estaciona el auto al frente de nuestra casa y antes de salir yo del carro me toma un poco fuerte de mi brazo.
-¿Quien es el que te hablo cuando te fuiste?-me pregunta serio y yo solo puedo sentir miedo otra vez.
-Es el maestro de la orquesta-le respondo.
-Que raro, tus amigos me dijeron que él también se va a New York, supongo que los dos ya se pusieron de acuerdo para esto, ¿no?- me dice y su agarre se intensifica.
-N..no Matt, eso no es cierto-le digo y hago una mueca por el dolor en mi brazo.
-Entonces que es-me pregunta y hago todo lo posible para abrir la puerta del carro con mi otra mano disponible. Aunque busco desesperadamente el seguro de la puerta no logro encontrarlo.
-Melanny, ¿que pasa?-me dice y me zarandea en mi lugar haciendo que pierda completamente el contacto con la puerta.
-M..me duele-le digo bajo pero chillando.
-A mi me debería doler, me quieres dejar por él-me dice y me suelta brusco.
-N..no es cierto-le digo e intento hacer mi acción de hace un momento.
Pone seguro al carro y mi tranquilidad se va por completo. Siento que soy alada del cuello y mi mirada se dirige a su mano alzándose por el aire, para caer justo en mi mejilla.
-Lo sabía, sabía que estabas con él.- dice y su mano se alza de nuevo. Con la poca fuerza que tenía trato de disminuir la fuerza de su mano y me suelta por completo tirándome hacia la puerta, provocando que mi brazo se golpee.
-Y..yo me quiero ir-le digo sollozando muy asustada. Quizás es porque tomó y se siente eufórico, o quizás ya no quiera ser bueno conmigo como siempre. Estoy echa solo una bola en mi asiento y mirando a un punto fijo del carro mientras boto lágrimas sin parar.
Escucho la puerta ser abierta y Matt bajándose del carro, no lo pienso dos veces y salgo yo también. Mi dirijo sin ver atrás a la casa y voy directamente al segundo piso para después encerrarme en el baño.