Esposo violento

Capitulo 23

Mi aliento deja de seguir su curso y siento mi garganta seca. Matt examina mi cuerpo de arriba a abajo y se queda en mis pechos. Mi primer instinto es taparme con las manos y es entonces que veo una sonrisa en su boca. Siento mi cara arder del miedo y vergüenza pero es lo único que puedo hacer.
-Te conozco toda Melanny-me dice y se para de la cama. Su cuerpo avanza hacia el mío y trato de dar pasos atrás pero la pared que tengo atrás mio me lo impide. Cuando su cuerpo toca el mío siento que puedo caerme en cualquier momento.-Cuidado-dice rápido y sus brazos agarran mi cintura y mi cabeza. Siento que me carga un poco porque mis pies ya no tocan el suelo. Me deposita en la cama dejándome sentada.
Su mirada es fría y sus ojos oscurecen un poco al verme vulnerable en la cama mirándome desde alto. Se acerca un poco a mi y su dedo va desde mi mejilla sobándome un poco esta bajando poco a poco hacia mi cuello para después depositarse en mi pecho izquierdo. Soba lentamente alrededor de esto un momento y después la punta de su dedo va directamente hacia mi areola. Mis ojos dejan de contener el líquido y caen en forma de lagrima hacia mis mejillas.
Matt se da cuenta de esto y quita sus dedos de mi.
-¿Porque lloras?-me pregunta pero yo no tengo respuesta. Con su otra mano aparta mi cabello y agarra mi mandíbula mirándolo directamente a los ojos. Su toque no es brusco, es delicado y se siente más como una caricia.-Averigüe sobre tu padre.-me dice sin más y me suelta por completo, tirando su cuerpo hacia atrás y apoyándose en el closet.
Mi cuerpo se espanta una vez más al sacar ese tema de conversación de la nada. Veo mis manos para distraerme un rato y no pensar en eso pero el sigue.
-Sigue vivo, hasta me se su dirección-me mira y yo también a él pero su boca muestra una media sonrisa.-Quizás a alguien le hace falta algo de escarmiento-me dice y veo que sus puños se aprietan al igual que su mandíbula.
-N...no-logró decir cuando veo que sus intenciones son completamente malas con mi papá. Se que no es una persona que merezca cosas buenas en la vida pero también es un ser humano. Hace tiempo que lo perdone y no quiero reabrir heridas del pasado así como lo estoy haciendo con Matt.
-Crees que no merece eso-me confirma y yo asiento con mi cabeza. Quizás es lo más estupido que he dicho pero no quiero que tenga el mismo destino que yo. No se si los golpes que recibirá mi papá sean más fuertes que los que he recibido yo o quizás son de la misma intensidad.-Sabes, eso es lo que más me gusta de ti. Que sabes perdonar a todos. Incluso a mi, que he sido una bestia contigo-me dice y se acerca para agarrar mi cachete pero no se si seguir ahí o apartarme. Quizás mi instinto aún sea apartarme así que eso hago.-¿Crees que he sido malo contigo?-con su otra mano agarra mi otra mejilla y hace que mi cara se quede estática. Se inclina hacia mi cara y yo trato de hacerme pequeña pero él es más rápido y besa mis labios. Tengo mucho miedo de lo que está haciendo así que dejo que haga lo que quiera para poder deshacerme de él después. Quizás solo sea besarme y ya. No es algo malo si solo lo pienso así. Su beso si intensifica y su lengua quiere tocar la mía pero no lo dejo por miedo a que se quiera pasar.
Sus dedos aprietan mi mentón de una manera dolorosa haciendo que abra mi boca para soltar un pequeño gemido alto y es ahí cuando aprovecha para meter su lengua en mi boca e ir avanzando con el beso a un paso casi acelerado y desesperado. Su mano izquierda baja por mi espalda y con el peso de su cuerpo obliga al mío y irse acostando poco a poco en las sábanas de la cama. Siento mi espalda completamente acostada y el aprovecha para bajar su mano derecha por mi pecho izquierdo apretándolo un poco. Me remuevo en su cuerpo para informarle de mi incomodidad pero el no se inmuta. Su mano se dirige a mi vientre y lo acaricia. Tengo mucho miedo de lo que puede pasar y siento muchas ganas de gritar por ayuda ahora. No tengo ni un mínimo deseo por el ahora y se lo hago notar cuando su mano sigue bajando tocando mi feminidad.
-¿Porque no estás mojada?-me pregunta rompiendo el beso y mirándome agitadamente.
Mi respiración esta muy alterada por todo lo que está pasando y no puedo contestarle.           -¿Acaso ya no te gusto?-me mira y se aparta completamente de mi. Con sus manos trata de abrir sus pantalones quitando primero el cinturón.
-Abre las piernas-me dice de una forma brusca y hace que mi miedo se pronuncie más. El saca por completo su cinturón haciendo un ruido al final de este. Brinco por el susto y mis piernas se abren por inercia del susto. Siento que si no lo hago voy a recibir muchos golpes de ese objeto.
Matt nota ese cambio, giró mi cabeza a un lado para que haga lo que el quiera de mi. Se que es horroroso pero no puedo hacer nada más. No puedo defenderme sin quedar inconsciente.
-¿Que quieres que te haga?-me pregunta pero de mis ojos solo salen lagrimas. No puedo ni siquiera imaginarme lo que piensa hacerme pero espero que lo haga rápido.-Contesta-me dice en forma de grito.
-S...solo h...hazlo-le digo en susurros.
-¿Que piensas que haré?-me pregunta de forma más calmada pero sin quitarme los ojos de encima.
-Ya estás aquí, viniste para tomarme y decir según tú que soy tuya. S...solo hazlo rápido-digo lo último quebrándome y dejando todas mis decisiones a su Merced.
El cinturón cae al suelo y me asusto. Me levanto un poco de la cama y veo su mirada posarse en la mía. Mis ojos están muy rojos y achinados por las lagrimas pero aún así no dejo de verlo. Veo que lentamente se agacha, quedando sus rodillas en el suelo y él se sienta en sus talones.
-Solo vine a verte.-me dice muy pacifico ahora y no se que pensar en esta nueva reacción. Emito un sollozo en modo de gemido y su rostro muestra un ligero fruncido de ceño. Abro la boca para decir algo pero nada se me viene a la mente así que la vuelvo a cerrar. Bajo mi mirada pero a las 2 segundos él agarra con sus dos manos mis muslos por la parte trasera haciendo que mi cadera quede al borde la cama y teniendo su cara muy cerca de mi feminidad. Me obliga a abrirme un poco más de piernas y esto hace que suelte un gemido por la estriación. Antes de que pueda decir algo más si cabeza se hunde y siento sus labios y su aliento en mi vagina. Mi mente se nubla por el deseo despertado ocasionalmente. Su lengua se mueve de una forma lenta pasando por mi clitoris lo cual hace que algo en mi dentro explote. Tengo un millón de emociones ahora mismo que no logro decir que esta bien o no. Creo que es algo que jamás hemos hecho y el jamás me ha hecho experimentar en toda nuestra relación.
Siento mi mente estar nuevamente en mi cuerpo diciéndome que esto está mal y ya no me permito sentir mas de lo que debería así que con mi mano derecha trato de apartar su cabeza de dónde está pero su mano izquierda me lo impide tomándome de la muñeca un tango fuerte haciendo que gima otra vez y en ese instante los movimientos de su lengua son más intensos por lo que ya no le presto atención al dolor de mi muñeca y mi espalda me traiciona levantándose de la cama para sentir el placer que me está dando Matt. Su mano acompaña la mía ahora subiendo hacia mis dedos y entrelazándolos de una forma románica y tierna por lo que él sigue haciendo su trabajo conmigo. Siento su lengua entrar en mi y esto hace que otra vez gima de placer apretando su mano una vez más.
Sus movimientos son persistentes e intensos y eso hace que se acumule un montón de emociones dentro de mi estómago. Siento una bomba por estallar pronto y eso hace que mis suspiros y gemidos sean más altos. La mano derecha de Matt se dirige directamente a mi pecho y lo aprieta de una manera un tanto fuerte haciendo que yo tenga el orgasmo más intenso que haya tenido.
Mi cabeza descansa en la cama y mi respiración trata de controlarse frente a esta manifestación que he tenido. Matt sale de mi y ya no siento su presencia cerca de mi. Soy de vuelta a la realidad y recojo mis piernas para poder acomodarme de una forma más apropiada en la cama.
Agarro mi cabeza en modo de descanso y siento una leve punzado alado derecho. Mi cabeza incrementa en dolor y cierro los ojos en modo de protegerme contra la luz que hace que el dolor sea más fuerte.
Siento las manos de Matt en mi cabeza sobándome y dando pequeños toques suaves en mi mejilla. Sus manos son cálidas y el acto de su presencia se siente bien por unos momentos.
-¿Quieres desayunar?-me pregunta
-N...no, me duele la cabeza-le digo agarrando confianza repentinamente sin saber el porqué.
-Vine aquí para desestresarte pero fue lo contrario.-me dice y siento una pequeña risa aunque aún no abro mis ojos.
-E...estoy confundida.-le respondo y abro los ojos para verlo en cuclillas y mirando mi cara. Debe ser este sentimiento el que debería sentir siempre, el en una posición en la que no está arriba de mi para golpearme o humillarme y solo viéndome pacíficamente. Este es el Matt del que me enamore pero tengo miedo de que solo sea una máscara para que haga algo que no me va a gustar.
-¿Porque?-me pregunta y su mano baja a mi cuello para sobarme.
-¿Porque estás aquí?-le pregunto sin rodeos
-Quería verte-me dice sin más y su mano va hacia mi hombro. Aún estoy desnuda pero no es algo que me preocupa.
-¿No tienes que entrenar hoy?-le pregunto.
-Me salí del box-me dice sin más y mi ceño se frunce en modo de confusión por la decisión que acaba de hacer.
Me levanto con la ayuda de mi codo para apoyarme en la cama y prestarle más atención a esa historia.
-P..por....¿Q...que pasó?-le digo y dejo a plenitud mis senos. El me mira y luego baja su mirada para mirar mi desnudez. Su mano baja hasta topar arriba de mi areola y yo siento un pequeño estremecimiento en mi cuerpo. Me siento rara, entre que quiero que me siga tocando y que me deje de tocar y se vaya. Sin embargo, quiero escuchar su historia. Se que no es algo difícil de dejar así por así.
-Porque te extrañaba-me dice y toda su mano agarra completamente mi pecho izquierdo haciendo que gima alto por el susto.
Matt se acerca a mi para luego besar mis labios, su beso es algo moderado pero busca aumentar la intensidad apretando mas mi seno. Yo trato de seguirlo pero él se apega más a mi quedando de rodillas en la cama y con su mano sobrante me agarra de la espalda para que quede a su altura y el beso no se detenga. Su mano aprieta aún más mi pecho y detengo el beso quejándome bajo por estar ejerciendo mucha fuerza, quizás queden traumas por la fuerza bruta que ha usado conmigo en los últimos meses y no quiero que se repita o solo no quiero que me toque más por el dolor de cabeza que ahora ya está muy fuerte.
-Auh-me quejó en sus labios.
-¿Que pasa?-me pregunta agitado y alzando mi espalda aún más arriba quedando prácticamente sentada y apoyada en sus brazos.
-Estás siendo brusco-le digo en un susurro para que no se moleste mucho por no soportar estar con él.
-Siempre te ha gustado así-me dice y mi decepción se hace presente haciendo que me quiera separar de él y ya no querer volver a verlo.
-E...eso era antes-le digo y trato de separarme pero Matt me lo impide.
-Puedo hacer que te gusta de nuevo-me dice en modo seductor pero yo ya no quiero estar más con el. Siento que todo mi deseo se ha ido junto con el Matt que era antes.
-Creo que deberías darme espacio-le digo y me separo para después acomodarme en la cama y pararme de la cama. Siento un pequeño mareo por el dolor de cabeza pero me recompongo y me doy cuenta de que mis piernas están mojadas por el orgasmo de antes.
Voy caminando hasta el baño para poder limpiarme y me siento en el inodoro. Mi cabeza tiene mucho que procesar mientras estoy limpiándome pero solo quiero cambiarme para ir a la farmacia.
Me lavo la cara echándome solo agua y salgo del baño para no ver a Matt por ningún lugar. Algo dentro mi siente nostalgia pero por otra parte siento que mejor que se haya ido a tiempo. Voy al closet y saco un calentador para mis piernas y un buzo. Prendo el aire acondicionado y me acuesto en la cama mientras enciendo el televisor y me distraigo un rato como lo he hecho todo este tiempo fuera de casa.
Pasan aproximadamente 30 minutos y escucho la puerta de la Habitacion ser abierta. Quizás alguien de limpieza entro pero cuando voy a ver con más claridad Matt aparece en mi campo de visión y en sus manos tiene unas fundas.
-Te compre el desayuno y unas pastillas para el dolor de cabeza.-me dice calmado y siento mi paz mental ser destruida nuevamente. Pensé que ya no lo iba a volver a ver pero ahora que viene con las necesidades básicas que tengo pueda hacer cambiar mi opinión. Es algo que me da miedo pero al mismo tiempo pienso que es algo lindo de su parte.
-G...gracias, yo iba a ir por ellas pero me alegro.-le digo y suelto una sonrisa para no hacerlo sentir mal.
-Bueno, vamos a comer-me dice y se acerca a mi para darme un beso en la cabeza y después desempacar todas las fundas que tiene y ofrecerme un plato de pan, huevos y salsas con un tenedor. El también se dispone a comer mientras los dos vemos televisión que estaba viendo hace unos instantes.
Quizás esté loca pero siempre voy a querer que sea así conmigo, solo en estos instantes quiero que Matt este conmigo para siempre y no se vaya de mi lado.