Esposo violento

Capitulo 17

Después de dos días, Matt se ha alejado de mí. Solo me ha visto arreglar mis maletas y dejando los armarios vacíos. Ayer saqué las escrituras de la casa, y sé que él la va a necesitar más que yo así que se lo deje en nombre de él. Hoy me encuentro en el cuarto de preparación de Matt. Al parecer tenía una pelea hoy y tuve que venir para entregarle las escrituras de la casa. Sé que le dije que me iba en 3 pero en realidad es en una semana. Quiero irme de esa casa lo antes posible y darme tiempo para mí. 
Me dijeron que Matt venia en 10 minutos y que ganó la pelea y aquí estoy esperándolo. Estoy de espaldas viendo su casillero y miro nuestras fotos. Me quedo embobada mirando todos los recuerdos, hasta que la puerta se cierra me asusta y doy un mini grito.
-¿Qué haces aquí?-me dicen y mis nervios se disparan.
Un tipo que no conozco viene hacia mí con mucha impotencia y seguridad. Su rostro luce muy joven y su cuerpo está muy tonificado. Sus ojos topan los míos y veo una sonrisa emanando de sus labios.
-¿Tú eres la puta de Matt?-me dice sin más y yo me sorprendo por sus palabras.
-¿Quién eres tú?-le pregunto molesta, con esto me doy cuenta del tipo de gente que se junta con mi esposo y la actitud que ha tomado por las acciones de todos los hombres que se encuentran en este lugar. 
-Eso debería preguntarte yo a ti, ¿no crees?- me dice y se acerca más a mí. –No sabía que ese hijo de puta tuviera tan buenos gustos con sus putas. ¿Cuánto tiempo lleva cogiéndote?-me dice sin más y yo me quedo estática ante esas acusaciones, no sabía que sea quien sea este hombre no sepa que Matt está casado y que su esposa soy yo. El enojo que siento ahora es muy fuerte y sin pensarlo dos veces en las consecuencias le doy una cachetada por las palabras que me ha dicho aún sin conocerme. El gira su rostro y me voltea a ver de regreso, su cara torna de rojo ligeramente y sus ojos se oscurecen a un tono que nunca había visto. Antes de que pueda reaccionar me agarra muy fuerte del hombro, haciendo que pierda el equilibrio y me desoriente. Próximamente 
Su mano agarra mi cuello y lo aprieta de tal manera que no me permite respirar. Esta fuerza es mucho mayor que la de Matt, sea quien sea, es mucho peor. Su mano agarra más mi cuello y me lleva caminando en reversa hasta chocar con una pared haciendo que mi cabeza tope directamente la pared y haciendo que mis sentidos dejen de funcionar. Toco su mano con desesperación para que así pueda liberarme pero no lo logro y solo siento que dejo de respirar. Su mano deja de presionar mi cuello y siento el aire en mis pulmones pero con su otra mano agarra muy fuerte mi pelo haciendo que este duela el triple de lo que antes me dolía. Me quejo fuertemente y suelto lagrimas a montones. 
-¿Quién putas te crees que eres?- Me dice y yo solo puedo llorar a montones. Su agarre es muy persistente y mi cuerpo se siente muy pequeño en estos momentos. Suelto un sollozo más y el me suelta. Caigo al suelo y me arrincono en un solo lugar, no pasan ni dos segundos y veo a Matt entrar en el lugar. Su cuerpo está sudado y su rostro tiene ligeros rasguños. Se queda estático cuando me ve a mí en el suelo y a mi agresor de espaldas a él. 
-Hey, llegaste. Debiste verle la cara a ese marica.-Él se ríe como si nada hubiese pasado pero Matt no lo recibe de la misma manera. Mi esposo solo esta serio y me mira, pero en ese instante yo bajo mi mirada para que no vea que he llorado. 
-¿Qué es lo que pasó aquí?-pregunta y mira directamente a mi agresor.-Leo, ¿Qué paso?- Lo pregunta otra vez.
-¿Qué?, Nada. Solo estaba hablando con tu puta. Al parecer tienes que lidiar con alguien muy mal educada-lo dice y se acerca a él para abrazarlo pero Matt lo esquiva. 
-¿Qué hicieron?-pregunta y yo solo lo veo con una cara impactante, él piensa que yo estuve con Leo porque quise. 
-Hubiese querido que haga algo, pero es una llorona. No se cómo la soportas. Creo que si hubieses llegado un poco después me la hubiese mamado-lo dice y se aleja un poco de Matt. Mis sentidos son desesperantes y siento un asco y repulsión por el tipo con el que acabo de lidiar.
-¿Te provocó?-le pregunta a Leo y yo solo puedo mirarlo fijamente mientras todo mi mundo se cae al escuchar a mi esposo estar del lado de la persona que me trató agresivamente. 
-Demasiado-Leo le dice y los dos me miran fijamente. 
Veo a mi esposo y yo solo le suplico por un poco de ayuda. Pero sé que lo que pido es prácticamente imposible. 
-Levántate, ya nos vamos-prácticamente me lo dice como una orden pero yo no quiero hacerlo.-Melanny, apúrate.-me dice otra vez pero no soy capaz de moverme. 
En un instante veo como Matt se acerca y me hala agresivamente mi brazo, me tambaleo por la brusquedad y mis piernas flaquean por los movimientos. Cuando soy alzada siento mi cabeza doler a montones pero aun así no digo nada.
-Mierda hermano, es una fiera. Debes ponerle mano dura, así puede que haga todo lo que tú le pidas. Es una puta de calidad-Le dice y le toca el hombro en forma de broma.-Hasta creo que le guste.-le dice por último y siento mi hombro ser apretado mucho más fuerte que antes.
-Sí, así es ella.-le confirma Matt y solo me lleva con el afuera de la habitación. 
Estando fuera veo que no hay nadie en el pasillo y solo nos dirigimos a la salida. Matt saluda a los guardias que cuidan los autos en el estacionamiento y no se interesan en el estado en el que me encuentro. Quizás ni les importa que estuviese secuestrada, simplemente no les importa por lo mas mínimo. 
Matt prende el carro con las llaves y abre la puerta del copiloto para después meterme bruscamente en el asiento. 
-¿A qué viniste, aparte de querer acostarte con Leo?-me pregunta y ahora ya se por completo que se puso de parte de su amigo que de mí. 
-L...Los papeles-le digo mientras que sobo mi brazo por el dolor.
-¿De que estas hablando?-me pregunta confundido. 
-D... De la casa. V...vine a entregarte-le digo y sollozo porque me duele mucho todo mi cuerpo.
-¿Por qué?-
-Q...quiero que te quedes con la c...casa-le digo y mis lágrimas salen nuevamente. 
-¿Dónde están?-
-D... Donde estaba-le digo y me muevo para poder salir del carro pero no me lo permite ya que pone su cuerpo frente al mío.
-¿Qué haces?-
-M...me voy-le digo y trato de salir nuevamente pero no me lo permite. 
-Tú no te vas a ir a ninguna parte.-me dice y cierra la puerta del carro para luego ponerle seguro desde adentro dejándome encerrada. 
-No, no no no no-me digo a mi misma y trato de abrir todas las puertas pero ninguna cede. Quiero gritar pero no hay nadie aquí y aun así lo haya creo que no les importaría, así que solo me siento en mi lugar y recojo mis piernas para después llorar.
Sigo en esa posición por los próximos 5 minutos para después sentir como Matt entra al carro junto con los papeles. Siento mucho miedo, así que solo puedo deslizar mis piernas y ponerme el cinturón de seguridad de modo que acepto mi destino. 
-Vamos a MI casa-me dice remarcando el mí en modo de burla por los papeles que le entregue. 
El camino es silencioso y yo solo me dedico a estar tensa todo el tiempo por la señal de advertencia que me dio estando en la habitación de entrenamiento. Miro hacia lo lejos la casa y mi miedo aumenta mucho más. No quiero estar a solas con él y más cuando está enojado porque piensa algo que no existe. 
Estaciona el auto frente a la casa y mis respiraciones se aceleran pero trato de tomarlo con calma. Matt se baja del auto y yo hago lo mismo. Camino lentamente a la casa y abro la puerta. Avanzo hasta las escaleras y siento como halan nuevamente mi brazo que estaba con moretones. 
-Auch-me quejo y veo a Matt muy enojado.
-Tengo hambre-me dice y yo solo lo veo confundida y con miedo.- ¿Qué esperas?-me presiona y el dolor de cabeza aumenta un poco más.
-V...voy por unas pastillas-le digo para que me suelte pero logro lo contrario. Él me presiona mucho más fuerte mi brazo y grito en silencio. 
-¿Por la plan b?, vaya que sabes cómo cuidarte en estas situaciones-me dice brusco y yo solo puedo negar con la cabeza. 
-M...me duele la cabeza-Le digo y trato de soltarme. 
-Como si te creyera-me dice y me suelta empujándome un poco. 
Subo las escaleras con cuidado y me meto a la habitación. Saco las pastillas para el dolor de cabeza y me tomo dos. Paso por el espejo pero lo que no quiero hacer ahora es verme. Sé que en estos momentos doy pena y tampoco quiero toparme mi cabeza por miedo a encontrar algo que no quiero lidiar.
-BAJA YA-me grita Matt desde abajo
Bajo un poco débil por el efecto de las pastillas y voy directamente hasta la cocina. Saco todos los ingredientes para hacer un pollo con papas y en esta acción me demoro prácticamente media hora. Matt baja las escaleras y se sienta en la mesa. 
-Espero que ya esté listo-me avisa 
Le sirvo su plato y lo coloco en la mesa donde él está. Voy por el jugo y también lo sirvo en la mesa. Quiero descansar así que me dirijo a mi cuarto para cambiarme y luego dormir. Me pongo cómoda y me acuesto en la cama de lado para que mi cabeza no toque la cama. Escucho los pasos de Matt en la escalera pero no le prestó atención. 
-Lava los platos-me dice y yo siento un peso en mi cuerpo indescriptible que me hace tener un deja vu de mi adolescencia. Aun así, sigo en mi lugar y no quiero esperar lo peor. 
-¿Estas sorda?-me grita estando a mi lado y hala nuevamente mi brazo. Yo solo puedo hacerme pequeña en mi lugar y sollozar del dolor. Con su fuerza hace pararme y caminar fuera del cuarto. Tengo muy pocas fuerzas y tropiezo con mis piernas, haciendo que me caiga.-Levántate-me dice y yo no puedo hacerlo, mi cabeza duele demasiado y mi cuello empieza a retener mi cabeza en una sola posición.-Puta madre Melanny, te juro que si sigues así te va a ir peor-Sus palabras duelen mucho pero las dejo pasar por el dolor que siento. Su mano derecha se dirige hacia mi cuero cabelludo y lo agarra de tal manera que mi cabeza explota. Mis llantos se escuchan por toda la casa y yo trato de sacar su mano de esa zona. 
-M..Matt, me duele-le digo pero a él no le importa.-E...Escúchame, por favor. S...Suéltame, me duele mucho. Por favor...por favor... por favor-le digo pero él no cede.
-FUISTE HASTA MI TRABAJO SOLO PARA COGERTE A ALGUIEN MÁS-me dice y su agarre se intensifica. 
-No. F...Fui a verte a t...ti. M...Matt por favor-lloro aún más.
-¿LO PROVOCASTE?-
-N...no. No no no no-le suplico porque ya no aguanto. Matt me suelta y yo caigo al suelo completamente. Mi primera reacción es tocarme la cabeza y sobarme lo más que pueda. Cierro por un instante mis ojos pero al abrirlos veo que Matt agarra nuevamente mis brazos para alzarme. Me levanta de un solo movimiento y mira mi cuello. 
-Así que no lo provocaste-me dice y yo solo puedo tener mi mirada hacia abajo.-Pero te dejo morado el cuello-me dice y se lo que está pensando y quiero decirle que sus pensamientos son incorrectos pero rápidamente me deja en mi lugar y veo que se dirige a la habitación. Me sujeto del barandal de la escalera y toco mi cabeza para después sentirme un bulto por el golpe y por los jalones del pelo.
Escucho los pasos de Matt y veo que en su mano tiene una correa negra. Mis nervios se activan y por un instante se me baja la presión haciendo mi cuerpo más pesado, mis respiraciones entrecortadas y mi vista puesta en su mano. 
-Esta si no la olvidas nunca-me advierte y se acerca a mí. Sus pasos se sienten como rocas, sus ojos ven hacia mis piernas y su mano se alza junto con la correa hacia arriba.