Esposo violento

Parte 24

Termino de comer y me acuesto a la cama para descansar la comida. Miro la televisión mientras Matt recoge todo y se acuesta alado mío mientras su mano se acerca para sobar mi cabeza, no voy a mentir que mi cuerpo se erizo cuando vio su mano en mi pero tengo que dejarlo pasar y disfrutar de los masajes.
-Quiero cambiar-me dice y su mano va hacia mi cara.-Quiero tenerte de vuelta, en casa conmigo. Siendo mi apoyo y mi esposa. Se que me he portado mal contigo que hasta te fuiste de la casa-se calla un momento pero sigue-No he sido la persona que era desde que he estado en ese gimnasio. Me influenciaron de hacer lo que hacía con el único pretexto de que si no te doy un "escarmiento" no vas a aprender. Pero me di cuenta de que no te estoy educando, por Dios. Soy un estupido siquiera por pensar eso. Tú eres mi esposa y casi te entrego a ese idiota-me dice y mis lágrimas están a mas no poder. El gira mi mirada hacia si mismo y mis lagrimas caen. Quizás es lo que quería escuchar. Que el mismo reflexione sobre lo que ha hecho para mejorar pero no se si logremos estar como antes después de todo lo que ha pasado. He escuchado que aunque el chico quiera cambiar es muy difícil que eso suceda.
-Tengo que irme m...mañana-le digo porque eso es lo que tenia planeado y no pienso cancelarlo.
-¿Cuando vuelves?-me pregunta con una sonrisa muy triste en su rostro.
-Cuatro meses-ese es el tiempo en que me dieron para estar en en conservatorio. Dijeron que podía quedarme si quería. Todo depende si puedo destacarme y pienso hacerlo.
-Te voy a esperar-me dice y yo no se que decirle. Por una parte me quisiera quedar con el toda la vida y ver ese cambio para estar mejor entre nosotros. Pero por otra parte no se si quedarme con el me haga tan feliz como lo haría estar creciendo en mi carrera de artista. Cuando lo conocí quería todo rápido con el y formar una familia pero ahora solo quiero pensar en mi y en mi futuro. Quiero que el este en el pero ahora no se si el está listo para eso y no darme más problemas de los que necesito.
-De verdad quiero ir-le digo para que entienda que no quiero quedarme aquí siendo nadie.
-Lo vas a hacer. Te esperare aquí hasta que vuelvas y retomaremos todo. Quiero ser un mejor hombre para ti-me dice y se acomoda mucho más cerca de mi para después abrazarme y yo me reconforto totalmente en sus brazos y su pecho. Suelto varios sollozos porque se que esto es una despedida del cual ya lo hice pero no fue así de romántica o complaciente.
-Q...quiero que mejores y m...me ames-le digo en su pecho y el abrazo se intensifica lo cual lo noto como una afirmación.
-Te amo pero estaba confundido-me confirma y yo no entiendo por qué.
-N...No entiendo-le digo para después tratar de alejarme y así mirarlo a los ojos.
-Tenia miedo de que me dejes, eres muy buena conmigo y no sabía cómo hacer que te quedes conmigo-me dice y esto parece más una confesión que un perdón.
-E...estamos casados-le digo a esa rara explicación que me acaba de dar. No voy a estar todo el tiempo con el pero tampoco quiero que desconfíe por eso. No sabía que se sentía así. Es algo nuevo para mi.
-Lo se-me dice y toma mi rostro con sus manos para después acercarme a sus labios. Hace mucho tiempo no nos hemos besado. Las sensaciones que he experimentado hoy son muy grandes y confusas. Sus labios se posan en los míos y su cuerpo trata de estar tocando el mío pero no lo puedo hacer realidad por las acciones de mis pensamientos que aún están estancados en que algo malo va a pasar.
Sus labios se mueven pero el mío solo abre la boca para soltar un gemido un tanto agudo como pidiendo ayuda.
-Tranquila-me dice en un tono ronco y áspero y sus manos bajan a mi cuello para acercarme un poco más. Trato de moverme a su compás pero no puedo. Siento que su beso es desesperado mientras que el mío apenas trata de adaptarse a sus movimientos.
Después de 2 minutos en esta acción Matt se atreve a colocar su mano izquierda en mi clavícula para pronto ir bajando hacia mi pecho y luego a mi abdomen. Siento mucho deseo pero al mismo tiempo no quiero. Su mano se va aproximando poco a poco a mi entrepierna y es cuando decido pararlo.
-N...no.-le digo en tono cortado y suspirando queriendo agarrar aire. Su mano sigue en esa misma acción y ahora se que el ha ido muy lejos y no va a parar. Mis nervios se activan en este momento y doy un paso atrás tomando su mano para que deje de estar haciendo lo que hace.
-mmm, n..no-le digo una vez más ya con mi mano deteniendo la suya.
-ah?- me dice para después mirar mi cara en forma de advertencia. Su tono es duro y sus ojos lucen un poco enojados. Espero que esto no haga que se haya enojado conmigo. Sería mucho peor de lo que imagine.
-¿Que tienes?-me dice y se que a Matt no le puedo decir que no en cuanto al sexo. Muchas veces he querido pararlo y todas esas veces me ha ido mal. Todas esas veces termino haciendo lo que no quiero solo porque tengo miedo a pararlo. Quiero que no sea esta vez y entonces hablo.
-N...no... n..-le digo tratando de encontrar las palabras en mi vocabulario corto para que Matt entienda.
-Habla rápido-me dice cortante y con su mano otra vez acerca mi cuello para besarme nuevamente. Su acción me toma desprevenida y sus labios se unen a los míos por una segunda vez, aunque esta vez no siento que sea amable.
Sus labios van deprisa y con angustia y yo apenas puedo respirar.
La mano con la que estaba tomando mi cuello rápidamente se dirige a mi mano que está sosteniendo la suya y la quita de una manera brusca haciendo que pierda el equilibrio. Su cuerpo se pega más al mío y me tumba a la cama. Lleva su mano junto a la mía arriba de mi cuerpo y con su otra mano toma mi otra mano haciendo un tipo de esposas con una mano de él y mis dos manos. Es una posición en la que no me he encontrado antes y la exposición que estoy teniendo es muy grande.
Mis labios empiezan a tiritar del miedo pero Matt no se da cuenta de eso. Esta muy concentrado en su satisfacción. No se como ha hecho antes para no hacerme esto cuando recién vino.
Mi torso se levanta en forma de liberación y suelto un sollozo lastimero cuando hace que mis muñecas se estrujen más y el dolor se extienda hasta mis brazos. El no pierde el tiempo y con su mano libre toca mi cuero hasta ubicarse nuevamente en mi vagina. Cierro instantáneamente mis ojos en modo de presión y el comienza a tocarme por debajo de mi pantalón.
-Matt-le digo en un tono muy bajo pero el ya tiene sus dos dedos adentro de mi.-Auhh-me quejo por la intromisión sin permiso.
El suelta un suspiro largo y mira mis labios más no mis ojos. Su boca intenta besarme pero me hago a un lado. Su rechazo es evidente y su ceño de frunce en un tono aún más molesto que el de antes. Intenta de nuevo besarme aunque mi cabeza esté inclinada pero hago lo mismo. Sus dedos se detienen y con el mi tranquilidad.
-M...Matt, n..no. P...pa-No logró decirlo completo y su voz en modo de grito mi golpea el rostro.
-Mierda Melanny, necesito esto-me dice en un tono muy molesto.-¿Por qué nunca estás de buenas?-su declaración hace que me ponga muy triste y suelto lágrimas y sollozos.
Su mano aprieta mucho más intenso las mías y abro la boca para quejarme.
-M...Matt-le repito su nombre y él estalla.
-¿Matt, QUE?. A TI TE ENCANTA ESTO. GRITAS COMO LA PUTA QUE ERES.-me grita y su mano se mete dentro de mi y empieza a hacer movimientos bruscos.
-Ahh-gimo alto en frente el y empieza a sentir dolor.-M...me d...duel-antes de que pueda decir algo más su mano deja de apretar mis manos para dirigirse a mi rostro. Grito antes de que pueda golpearme.
-ESTA BIEN!-le grito y su mano para.-H..haré lo que-no puedo terminar por mis sollozos y mi estado de temblar.-P...por fav-le pido y atraigo mis manos hacia mi para poder darme protección con ellas.
-Mierda-dice y me suelta.-No puedo Melanny. Necesito, necesito que cuando llegue de mis entrenamientos estés dispuesta para mi. Necesito que lo estes ahora. Te necesito.-me dice y ahora que lo veo siento que esta enfermo.-Necesito que seas solo mía y estés siempre disponible, quieras tener sexo conmigo las veces que yo quiera.-me dice en un tono desesperado.-Como antes-me dice. No quiero pensarlo así, pero creo que solo se casó conmigo por eso.
-E...estás enfermo-le digo en un tono seco y oxidado por las lágrimas que he derramado.-V...vete-le digo de una buena vez para que se desaparezca de mi vida para siempre. Lo que me prometió hace unos instantes se desvaneció por esto. Creo que nunca va a cambiar y solo pensar en que quiere estar conmigo para darle sexo hace que me sienta enferma de igual manera que el está. Quisiera que esto no sea así, quiero a alguien que quiera estar conmigo aunque haya días en los que no pueda hacerlo.
-¿Ahora quieres echarme?-me dice y su tono de enfado vuelve a aparecer. Quiero echarme a correr pero tengo que ser fuerte.
-Véte Matt-le digo fuerte y me siento en la cama. Mi modo de afrontarlo es más fuerte de lo que imaginaba pero lo que no esperaba es que el de el sea el triple. Sus manos agarran mi brazo y hace sentarme al borde de la cama. Mis nervios están a mil por hora y todo el pánico lo hago reflejar cuando lloro fuerte por lo que viene.
-Al parecer ahora te quieres defender, perra-me dice en un tono muy despectivo y soez. Me habla como si fuera si peor enemigo y eso me duele hasta decir basta.
Sus dos manos van hacia mis hombros y me agarran muy fuerte siento que soy alzada de la cama sin ayuda de mis pies y eso me asusta mucho. Sin embargo, su intención no es alzarme sino ponerme en el piso. Me suelta cuando mi cuerpo ya no está en la cama y caigo, lastimando mis rodillas. Duele mucho y no se cual sea su próximo movimiento.
-¿Matt?-le pregunto mirándolo a la cara con lágrimas.
Me mira con aires de superioridad y siento que así lo ha hecho siempre. Sus manos ahora se dirigen hacia su pantalón y lo desabrocha. Cierro mis ojos con nuevas lagrimas por saber lo que quiere hacer conmigo y siento muchas lagrimas de vomitar por solo pensarlo.
Cuando se ha desabrochado completamente bajo la cabeza pero de nuevo alzó mi mirada porque la mano de Matt ha agarrado mi pelo de una manera tan dura que hace que grite en tono de súplica.
-Hazlo-me dice como que si fuera una orden. Aunque por la situación en la que me encuentro lo es.
-N...no por fav... M..matt-le suplico una vez más pero su mano aprieta mas mi cabello haciendo que llore más alto.-d...duele-le digo para que sienta mi dolor pero el no se inmuta.
Con su mano libre baja sus bóxer y mi muestra su miembro erecto que va frente a mi cara.
-Abre la boca-me demanda muy fuerte. Niego a hacerlo y quiero bajar la mirada pero su mano no me lo permite y en cambio de esto su mano hace much más presión. Siento algunos de mis cabellos ser arrancados por la fuerza bruta que está haciendo.-ABRE LA PUTA BOCA-Sigo negando por mi dignidad pero su mano aprieta un poco más haciendo que grite alto haciendo que mi boca se abra un poco y el aprovecha la oportunidad para meter todo su ser dentro de mi boca. Mis ojos se llenan de lagrimas y las arcadas que siento son inimaginables.
Matt controla mi cabeza haciendo que esta se haga adelante y hacia atrás. No quiero hacerlo enojar así que solo puedo dejar que me manipule. Después de unos dolorosos segundos el empuja toda mi cabeza hacia el haciendo que gran parte de su miembro esté mi boca. Yo grito por esta acción y con mis manos trato de apartarlo pero no puedo. Su mano aprieta más y más y siento mi cabeza estallar del dolor. Sus uñas están rasgando mi cuero cabelludo y eso hace que duela más. Siento su líquido salir de él y entrar a mi boca. Me tiene un rato más y siento que me voy a desmayar por no recibir oxígeno. Sin embargo, me suelta.
Soy libre.
Estoy apunto de escupir todo su líquido cuando el se agacha a mi altura y levanta mi barbilla.
-NO-me dice y me mira con una cara de advertencia y disgusto.
No puedo hacerlo. Siento que me voy a desmayar. El toma toda mi cara y la manda hacia arriba de un modo brusco haciendo que todo su líquido sea ingerido por mi.
El siente satisfacción por eso y deja mi cabeza en paz. Apoyo mis manos en el piso y veo que dedos tienen sangre, Justo de la mano donde tenía mi pelo agarrado.
Mi cuerpo ya no puede seguir soportando tanto y mi cabeza duele a mas no poder. Apoyo mis codos en el piso y me acuesto muy despacio. Suelto varios sollozos y toso por la falta de oxígeno. Mis respiraciones son muy fuertes y desesperadas pero aún así siento que mi cuerpo no puede más. Mi cabeza es recostada en el suelo y mis ojos se vuelven muy pesados. Antes de que pueda procesar algo más escucho la voz de Matt.
-Esa fue la mejor mamada que me han dado-