Capítulo 11: Oportunidades.

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Narra Sally.

Sonreía como una idiota mientras me acercaba a la "amiguita" de Noah cuando la hora termino. Eleonor y yo nos pasamos la hora riendo mientras que cierta chica tenía sus ojos perforándome la nunca. Nada logrará que me desmorone, querida, intenta lo que quieras. Sabía que fingir que no existía le molestaba el doble, por lo que me encargué de que Eleonor me siguiera el juego.

La rubia se giró en dirección en la que la chica se encontraba y le guiñó un ojos. Por la sonrisa en el rostro de mi amiga supe que había tenido el resultado deseado. Mejillas sonrojadas y corrida de mirada, genial. Mi cabeza comenzó a maquinar en que le diría en cuanto quisiera escapar del aula, necesitaba decirle algo que realmente la impactara.

—Dios, yo conozco a la chica que estamos atormentando. —Eleonor centró toda su atención en mi.

—¿De dónde? No la tengo registrada en nuestro radar, Elle. —Giré con el mayor disimulo para ver si ella seguía mirándome. Sep, aún me fulminaba con la mirada.

—Tu no tienes a nadie en el radar, Sal, incluso Noah es nuevo en él —Me guiñó un ojo con la intención de burlarse de mi por lo que solo negué en frustración—. Está bien, te lo diré.

—No tengo todo el tiempo, Eleonor, desembucha. —Entrecerré mis ojos en su dirección, la materia si no decía nada.

—De acuerdo, de acuerdo —Suspiró—. Ella se llama Margarett, vive con su abuela y no tiene padres. Es una especie de nerd, porque le va bien en todo, pero tiene su lado rebelde, sabes.

—¿De qué estás hablando? —Me extrañó aquella parte. ¿A caso Noah sabía algo de eso?

—La he visto en un par de fiestas, en las afueras de la ciudad —Eleonor volvió a girarse para mirarla—. Bueno, de esto hace un tiempo de todos modos. Pero se que era ella, es imposible confundir esos ojos raros que tiene.

—¿Y en que momento te fuiste de fiesta sin mi? —Pregunté para aligerar el misterio que, de un momento al otro, nos rodeo— ¿Qué clase de amiga eres?

—No te vengas a quejar, Hyde, fue cuando Kevin si se entretenía contigo —Me miró desafiante, retándome a que lo negara—. Alguien tenía que distraer a Susan para que te encargaras del maldito guitarrista.

—Juro que jamás volveré a tropezar con la misma piedra. —Me llevé una mano al corazón haciendo que mi amiga riera.

—Lo sé, amiga, lo sé —Eleonor sonrió mientras señalaba mi móvil—. Algún misterioso recordó que le diste su número.

Mi amiga giró y comenzó a hablar con uno de los atletas, haciéndole ojitos. Nunca perdía el tiempo. Había estado hablando de Carter hasta que comenzamos con mi plan para fastidiar a Margarett y ahora cambiaba de blanco.

Tomé mi celular con cuanto disimulo pude para evitar que la profesora nos molestara. Puede que no me molestara fastidiar a cualquier adulto a cargo, pero debía mantenerme tranquila si quería mantener las notas para recuperar la beca. Un sacrificio para volver a tenerla. Mire quien me había enviado el mensaje, quería comprobar que no fuera del molesto de Kevin que había estado insistiendo. Pero no era de él.

*Encontré tu nota. Arreglemos para cuando quieras. Noah*

La nota. Mientras habíamos trabajado el día anterior en el trabajo, le había dado a Noah un par de hojas en las que tomé apuntes e ideas que necesitábamos desarrollar para que todo saliera bien. Sabía que no me iba a hacer rogar o preguntarle en ese momento por cuando nos reuniríamos nuevamente y no estaba segura de que él fuera a mencionar algo, por lo que opté por dejarle una nota con mi número de teléfono y que todo quedara en él.

Opposites Attract. [Attraction #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora