Opposites Attract. [Attraction #1]

Capítulo 21: No soy buena en matemática.

Narra Sally.

—Vamos, White, eres mejor que eso. —Dije burlándome del capitán del equipo de futbol gruñón que tenía a mi lado.

—A ti no te ha regañado el profesor Clarson porque no te salía un ejercicio, Hyde, no me vengas con idioteces. —El ceño fruncido de Scott era muy gracioso. No tan gracioso como las miradas de todos sobre ambos.

Las cosas habían cambiado un poco el lunes por la mañana, cuando Noah y Eleonor comenzaron a hablar en medio de un pasillo como si fuesen amigos de toda la vida. Era digno de admirar a una de las tres malvadas y al nerd por excelencia. Además, por alguna extraña razón me encontré con un Noah completamente evasivo con su mejor amiga.

El chico tenía un gran potencial para sacarme sonrisas constantes. No es como si nos la pasáramos besándonos en los pasillos, quizás un beso fugas en algún rincón oculto, pero era muy atento conmigo haciéndome sentir un poco querida. Eleonor me cargaba por eso, era una constante catarata de risas y bromas cada vez que mis ojos se desvían a donde fuese que Noah se encontrara.

Si a todo eso le sumamos que Scott es el mejor amigo de Noah, fue como una gran distorsión en los grupos del instituto. Ambos chicos habían optado por compartir tiempo con Eleonor y conmigo en el almuerzo y en los receso, contándonos anécdotas de cuando ambos eran chicos o como Noah había salvado a Scott de mil apuestas que había hecho borracho. Incluyendo la de correr desnudo por el campo de fútbol luego de un partido.

Los cuatro habíamos logrado acaparar la atención de todas las miradas, a las cuales no le hacíamos caso. Era como si hubiésemos estado destinados a suceder, como si las cosas con Noah hubiesen unido un lazo que ninguno de los cuatro sabía que estaba roto. No lo sabía con exactitud.

—No deberías molestarte tanto, White, tienes muy buenas calificaciones. —Me encogí de hombros al recordar que el chico mantenía sus notas altas para poder hacer lo que le gustaba.

—Matemáticas avanzadas es lo que mantiene mi promedio fuerte —Suspiró un poco reacio a aceptar lo que venía—. Necesito la mayor calificación posible porque he metido la pata con ciencias.

— ¿Qué hay con eso? —No entendía como podría haberla cagado con un proyecto como el de ciencias— Se que no es mi mejor área, pero es completamente posible de aprobar siempre y cuando no tengas al profesor en tu contra, como yo.

—Metí la pata con mi compañera de equipo. —Oh diablos, no. El chico se frotó la nuca con una mano en un gesto nervios.

—Dime que no te acostaste con ella. —Mis ojos se ampliaron cuando vi un leve rubor en sus mejillas. Ok, la cosa era grave. Scott White no se ruboriza por nada de nada.

—Creo que fue más que eso. —Un encogimiento de hombros me dijo todo lo que faltaba.

Él no sólo se había acostado con la pobre ingenua sino que también, seguramente, le había dicho que la llamaría cuando eso jamás de los jamases estaba destinado a ocurrir. Pobre ingenua. La chica debía tener un poco de orgullo, porque para que el chico estuviese realmente tan mal con la materia quería decir que lo había enviado a la mismísima mierda sin importarle un rábano lo que Scott dijera.

—Deberías dejar de probar suerte en este lugar, explora otros horizontes —Su mirada era completamente perdida. Una sonrisa torcida apareció en mis labios mientras mis próximas palabras salían—. No querrás que en el próximo proyecto en equipos te ocurra lo mismo y debas rogar por ayuda a quien no te hayas bolseado.

—A veces suenas como un hombre, Hyde, me preocupas. —Sus palabras me hicieron reír, ganándome las miradas directas de un grupito de porristas que pasaban por nuestro lado.