EPÍLOGO

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Subo al avión que nos llevará directamente a Mendoza a ver a la familia de Agustina. Aún con el vacío en el pecho como si un pedazo de mi se hubiera quedado en la habitación del hotel.

Además de Lionel nadie se dió cuenta de lo que pasó, a veces odio que me conozca tan bien, apenas me vió me preguntó si pasó algo, le hice un resumen de lo que pasó, y me abrazo.

Acomodo mis cosas a un lado de mi asiento y conecto el celular al toma corriente del avión. Agus va en un asiento detrás del mío. Me acomodo dispuesta a dormir el vuelo que es de pocas horas.

Estoy por poner mi celular en modo avión cuando me llega un mensaje de Paulo. Justo cuando lo estoy por abrir una azafata pasa a decirme que me ponga el cinturón de seguridad porque estamos por despegar.

Dejo el celular a un lado y me pongo el cinturón, cuando está todo listo el avión despega y a los minutos ya puedo ver una parte de Buenos Aires desde arriba.

Busco el sobre con la contraseña del wifi que me dieron al pasar a clase alta porque obviamente no hay señal. Me conecto al wifi y abro el mensaje dispuesta a leerlo.

No sé cómo empezar a escribir esto porque no quiero terminarlo, pero tengo que hacerlo, porque siento que es necesario.

Los minutos que pasé con vos en la habitación me hicieron entender un montón de cosas, ahora me siento un poco mejor conmigo mismo, aunque la culpa sigue en algún lugar de mi mente. Me quedaron muchas cosas por decirte, pero creo que necesitaría horas o quizás días para hacerlo, pero también creo que es mejor decirte esto por mensaje porque si te lo digo cara cara no me hubiera querido separar de vos nunca.

No quiero ser egoísta, porque ahora sé que estás mejor si no estás conmigo, no quiero volver a hacerte daño con mis errores, no quiero que volvas a sufrir. Te perdí por mi culpa y viviste un infierno y la pasaste mal por la pelotudeces que hice, y es algo que no me voy a perdonar nunca, porque fuí un pelotudo y vos no merecías eso.

De vos me llevo todo lo bueno que me diste, me quedo conmigo todos los recuerdos y viajes que hicimos juntos, sos una persona hermosa por dentro y por fuera, te miro y lo único que veo es a una persona fuerte, segura de si misma que sabe lo que quiere, te veo, y veo amor por lo que haces y por las personas que te rodean, te veo, y lo único que siento es paz, porque eso es lo que transmitis, espero que nadie te quite eso nunca, y si yo lo hice te pido perdón.

Te amo Agus, te amo tanto que me está tomando todo de mí encontrar las palabras correctas para decirtelo, porque creo que simplemente no las hay. No hay una manera de escribir esto sin sentir dolor.

Hago una pausa para respirar porque siento que el aire no llega a mis pulmones, me seco las lágrimas con mi campera y miro por la ventana antes de seguir.

Espero que encontres a la persona indicada para vos, alguien que desafie esa brillante mente que tenés, que ponga a prueba todos los limites y te ayude a conquistarlos uno a uno. Sé que vas a encontrar ese amor que te mereces en alguien más, justo como yo lo encontré en vos. Y si esa persona es Joaquín, les deseo lo mejor a ambos, porque se merecen ser felices, te mereces ser feliz, recordá eso siempre.

Me acuerdo de la primera vez que te ví, capturaste mi atención tan fácilmente. No tengo idea qué fue lo qué me impulsó a acercarme a vos, curiosidad capaz, no sé. Quizás la forma en la que te moves, la forma en que caminas y miras a todos como si el mundo fuese tuyo, la manera en que te reís, o tal vez fue la determinación que se refleja en tus ojos siempre que deseas algo, y no te cansas hasta tenerlo, sos perfecta Agus, quiero que lo sepas.

No tengo idea de que fue, pero te veía y quería pasar todo el tiempo del mundo con vos. Cuando pasó lo del casamiento de tu hermano me terminé de enamorar, te miraba dormir al lado mío y solo sentía paz. Nunca me voy a olvidar aquel día en el mundial cuando te quedaste horas conmigo mientras yo sentía que mi carrera se iba al carajo porque no le pude dar al país lo que tanto querían, todas las palabras que me dijiste las tengo grabadas en mi mente y no me las voy a olvidar nunca.

Gracias por ser mi fortaleza cuando sentía que el mundo se me venía abajo. Gracias por todo lo que hiciste por mi, gracias por volverme alguien mejor, por enseñarme aspectos de mi que no conocía. Y perdón por no valorarte, perdón por dejarme llevar por otras cosas, no merecías lo que te hice, te perdí por estúpido y me arrepiento de eso.

Bueno, creo que ahora que dije la mayoría de las cosas que tenía en mente es hora de dejarte ir, fua que difícil hacer esto. No importa a dónde vaya, qué haga o con quién esté, gran parte de mi se queda con vos y te va a amar, por el resto de mi vida. No sé qué más decirte, me quedé sin palabras.

Si necesitas a alguien cuando estés mal, sabés que podes contar conmigo para todo, porque te lo prometí así, gracias por absolutamente todo.

Te amo y si no es juntos que sea por separado, pero siempre felices. Si la vida en algún momento nos permite volver a encontrarnos voy a dar todo de mi para hacerte la persona más felíz del mundo.

Sos increíble Agus, nunca olvides eso, te deseo lo mejor y te quiero ver triunfando siempre. Nos vemos pronto❤️

No puedo parar de llorar, las lágrimas caen por mis mejillas y por más que intente pararlas no puedo. Dejo el celular en mis piernas y me tomo un momento para intentar recuperarme del mensaje que acabo de leer.

Tomo un poco de agua porque quiero que el nudo que siento en mi garganta desaparezca. El dolor que siento en este momento no se compara con lo que sentí cuando mi relación con Bartra terminó, no es ni el mínimo de parecido.

Con Paulo crecí muchísimo, aprendí nuevas cosas y superé limites que creía inalcanzables, pero que con su apoyo los logré. Fueron años de amistad y recuerdos hermosos a su lado.

Se mando la cagada más grande en nuestra relación y me lastimo muchísimo, pero aún así me es imposible guardarle algún tipo de rencor. No lo odio y nunca lo voy a hacer.

Conmigo se quedan los mejores recuerdos a su lado, pero también los malos, esos que hace meses me hicieron mierda pero que ahora me hicieron crecer y ser más fuerte que nunca.

Por más que lo intente no puedo evitar quererlo, cuando sé que no debería. Una parte de mí se queda con él y con cada momento a su lado.

Me acomodo para dormir y así evitar seguir llorando y porque mi cabeza no deja de doler. Agradezco viajar en otra clase porque no quiero que nadie se de cuenta que estuve llorando.

Se que este fue el final para nosotros y fue la despedida que ambos necesitábamos para poder seguir adelante, cada uno con su vida y sus parejas. Y como Paulo dijo si no es juntos, que sea por separado pero siempre felices.



Fin.

Together | Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora