Kidult • {Meanie}

☂️ 15 ☂️

Mingyu se dejó caer sobre el sofá una vez llegó a casa. Acababa de dejar a Jeonghan con su madre. Sí, el tenía ahora la custodia de su hijo, pero seguía siendo compartida.

Habían pasado ya cinco meses desde que Jeonghan pasó a vivir con él y Wonwoo, poco a poco, iba acercándose un poco más al niño. Aunque, a decir verdad, era el pequeño el que siempre daba el primer paso. El que pedía que Wonwoo le cogiera en brazos, el que quería agarrarle de la mano, el que quería que Wonwoo les acompañara al parque.

Por otro lado, Wonwoo seguía yendo a terapia y parecía que cada vez se sentía más cómodo con ello.

—Hyung...— Wonwoo salió de la habitación porque, aunque ya no pasaba tanto tiempo metido en esa estancia de la casa, seguía siendo su lugar seguro.

—¿Sí?— Mingyu seguía sentado en el sofá. Con el brazo apoyado en el reposabrazos y la cabeza echada hacia atrás.

—¿Te encuentras bien?— Preguntó, algo inseguro.

Mingyu soltó un suspiro pesado.

—No lo sé, Wonwoo. Ahora mismo no sé nada.

Wonwoo pasó por delante del mayor para sentarse a su lado.

—¿En qué piensas?

—Wonwoo, voy a hacerte una pregunta.— Mingyu giró a mirar al contrario, aún con la cabeza recostada sobre el respaldo del sofá.

—Vale.

—Sé sincero con la respuesta, por favor.

Wonwoo asintió con la cabeza.

—¿Crees que soy un buen padre?

Y Wonwoo no supo qué responder. ¿Cómo se supone que debería saber eso? ¿Qué hace a un padre para ser un buen padre?

—N-No lo sé, hyung... tampoco has ido a preguntar a la persona correcta.— Wonwoo también se dejó caer sobre el respaldo del sofá.

Era verdad. Mingyu siempre olvidaba que Wonwoo nunca había podido tener una referencia paternal en condiciones.

—Lo siento... siempre olvido que-

—Está bien.— Interrumpió Wonwoo. —Pero... ¿por qué lo preguntas?

—¿Por qué? Porque tengo la sensación de que no estoy haciendo nada bien, Wonwoo. No soy capaz de consolar los llantos de Jeonghan cuando se enfada, no soy capaz de entenderle cuando intenta explicarme lo que quiere o lo que le pasa, no entiendo lo que quiere cuando me pone mala cara...— A estas alturas de la conversación, Mingyu estaba llorando.

—Hyung... es complicado. Ha sido un cambio brusco para el niño también... ha cambiado de casa repentinamente y ha pasado de ver a su madre todos los días a verla unas cuantas horas los días de entre semana y algún fin de semana entero... a lo mejor la echa de menos...

—Sí... a lo mejor ella le comprende mejor.— Replicó Mingyu, con la mirada perdida en el techo de la casa.

—Yo no he dicho eso.— Wonwoo frunció levemente el ceño.

—No estoy haciendo nada bien, Wonwoo.

—Vamos, hyung... deja de llorar.

—Yo no estoy llorando.— Dijo Mingyu mientras se limpiaba las lágrimas de la cara con las manos.

—Mentiroso...— Replicó Wonwoo, aunque más bien parecía un susurro.

—Won.

—¿Hum?

—Ya que estamos solos, quiero decirte una cosa.— Mingyu cambió de postura para sentarse de tal forma que quedara de frente al de pelos rizados.

—Y-yo también quiero decirte una cosa.

—Empiezo-

—No, yo primero.— Interrumpió Wonwoo.

—Está bien.

Wonwoo se acercó un poco al contrario, dejando un espacio mínimo entre ambos.

—Hyung... yo...

—Wonwoo... ¿N-no crees que... estás algo cerca?— Mingyu empezaba a ponerse algo nervioso. Tenía a Wonwoo a centímetros de él. Hasta sentía su respiración.

—Ya... bueno... es que...— Wonwoo sacó provecho de la poca valentía que tenía para besar los labios ajenos. Fue un beso tímido, algo torpe, pero dulce y lleno de sentimientos que no era capaz de trasmitir con palabras.

Ambos se quedaron en silencio al separarse del beso. Mirándose a los ojos, con la respiración algo agitada.

Esta vez fue Mingyu el que comenzó el beso. Acariciaba las mejillas ajenas con sus manos mientras disfrutaba de besar los labios del menor. Un beso más apasionado y rápido ahora.

Wonwoo acabó sentado a horcajadas sobre el regazo del más mayor. Con sus brazos alrededor del cuello de Mingyu.

Ambos paparon unos segundos para coger aire después de separarse del beso.

—Hyung...

—¿Sí?— Mingyu acariciaba ligeramente las piernas del más joven con la yema de sus dedos.

—Hazme el amor.

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A VER, DOS COSAS:

LA PRIMERA, no se me da bien escribir cositas bonitas como besos y esas cosas.

Y LO SEGUNDO, tampoco me gusta escribir escenas +18 me siento muy incómoda, ME PUSE INCÓMODA HASTA ESCRIBIENDO LO ÚLTIMO, así que no se esperen nada de eso. Lo dejaré todo a cargo de vuestra imaginación ✨