Kidult • {Meanie}

☂️ 41 ☂️

Pasaron casi tres meses hasta que llegó el día en que le darían el alta a Mingyu.

Durante todos ese tiempo, tanto Wonwoo como Joshua, no faltaron ni una sola vez a verle para estar con él. Incluso Jeonghan fue a verle muchas veces porque, aunque Mingyu no quería que su pequeño pasara tiempo dentro del hospital, las ganas del niño de ver a su padre eran mucho mayores.

Ahora Wonwoo, que ya lucía una barriguita de seis meses, ayudaba a Mingyu a ponerse una chaqueta.

—Won, puedo hacerlo yo solo.

—Bueno, ¿es malo que te ayude?

—Nop.— Sonrió.

—Entonces ya está.

Después de que Mingyu firmara los papeles del alta, el médico le recordó, por enésima vez, que debía andar con una muleta como apoyo a la pierna que tuvo mala durante un par de semanas.

—Vámonos.

—Espera, Won.— Mingyu agarró el brazo del menor para que no cargara él con la maleta que llevaba su ropa. —No cojas eso, pesa mucho.

—Puedo cogerlo perfectamente, no pesa tanto.

—Espera a que llegue Joshua. Seguro que no tardará mucho.

—Vaaaaale...— Wonwoo hizo un pequeño puchero con sus labios.

Un par de minutos después, Joshua llegó corriendo.

—¡P-Perdón! ¡H-Había mucho tráfico!— Explicó el mayor mientras recuperaba el aliento.

—Tranquilo, hyung.— Sonrió Mingyu.

—Toma, Won.— Joshua tendió un juego de llaves al menor.

Wonwoo miró al mayor sin entender qué era lo que estaba pasando. Después, giró a mirar a Mingyu, que le miraba con una sonrisa.

—¿Qué es eso?

—Las llaves de vuestra nueva casa, por supuesto.

Wonwoo abrió los ojos como platos.

—¿Cómo?

—Vamos a mudarnos, Wonnie.— Dijo Mingyu mientras se acercaba a él para pasar su brazo por encima de los hombros de su pareja. —Nuestra casa se va a quedar algo pequeña para que lentejita tenga su propia habitación, ¿no crees?

—Pues... no lo había pensado.

—¿Qué te parece si vamos a verla ahora?

—Pero, hyung, ¿ya la has comprado?

—Claro.— Sonrió. —Tengo que darle las gracias a Joshua, ha sido el que se ha encargado de todo el papeleo mientras yo estaba aquí.

Cuando los tres llegaron a la nueva casa, echaron un vistazo a las habitaciones, que aún estaban vacías.

—Mira.— Mingyu iba haciendo de guía. —Este será el salón, el baño, la cocina, esta nuestra habitación, esta puede ser la habitación de Hannie y, esta otra, la de lentejita.— Sonrió. —¿Qué te parece mi idea?

—Wooooow...— Wonwoo se quedó de pie en medio de la habitación que sería la suya y la de Mingyu. —¡Hyung, esta habitación es enorme!

—¿Te gusta?

—¿Gustarme? ¡Es genial!— Exclamó el menor, levantando los brazos en el acto para darle más énfasis a sus palabras. —¡Y la habitación de Jeonghan también! ¡Y la de lentejita también! ¡Van a tener un montón de espacio para jugar!

De un segundo a otro, Wonwoo pasó de la alegría a la culpa, echándose a llorar sin quererlo.

—Won, ¿por qué lloras?— Preguntó Mingyu, con un pucherito en sus labios. —¿Ya no te gusta la casa?

Wonwoo negó, frotándose los ojos.

—M-Me encanta...

—¿Entonces? ¿Qué ocurre? ¿Te encuentras mal?

—No...

Mingyu dejó un tiempo para que Wonwoo se recompusiera y se pudiera explicar, acariciando mientras su espalda.

—Tendrías que haberme avisado, hyung...— Wonwoo pronunció, más todavía, el puchero que estaba presente en sus labios. —¿Cómo has comprado todo esto tú solo?

—Bueno, mis ahorros me han ayudado bastante, cariño. No te preocupes.— Sonrió antes de dejar un beso sobre los labios ajenos. —Lo hice por ti, por Jeonghan y por lentejita. Por nuestra familia, Wonnie.

Wonwoo se limpió la lágrimas para sonreír y abrazar fuerte fuerte fuerte a Mingyu.

—Te amo mucho muchito, hyung.

—Yo te amo más aún, cielo.

Y, mientras, ahí estaba Joshua, observando la hermosa y reluciente pared blanca.

—Bonita pared, la verdad.

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Joshua soy yo viendo como todo el mundo tiene relaciones amorosas de películas mientras yo estoy 🤡🤡

IMPORTANTE: HORA DE ELEGIR EL SEXO Y EL NOMBRE DEL BEBÉ. HAGAN SUS APUESTAS, DAMAS Y CABALLEROS.