Kidult • {Meanie}

☂️ 23 ☂️

—Baja del coche.

—No quiero. Estoy bien aquí.

—No compliques esto más, Wonwoo.— Jun acabó arrastrando al menor hasta el interior de una casa. —Ponte cómodo, mi jefe debería llegar en un rato.

—Estoy bien de pie.— Wonwoo se cruzó de brazos.

—Como tú quieras.— El chico de pelo rubio se sentó en una silla y estuvo un rato silbando y jugando con sus propios dedos. —¿Te apetece tomar algo?

—No.

—Ts, a juzgar por lo de antes, tenías hambre. ¿Me equivoco?

—Te equivocas.

—Ah, ¿sí?— Arqueó una ceja.

—Pues sí, listo. Lo que quería comprar era para otra persona.

—Te traeré algo, igualmente. Seguro que te ayuda a relajarte.— Sonrió antes de dirigirse a la cocina. Un par de minutos después, volvió con un pequeño cuenco con galletitas saladas y un vaso de agua que dejó sobre una mesa. —Siéntate.— Señaló a un sofá.

—Te he dicho que no quiero.

—¿Galletitas?

—No.

—Wonwoo, estás muy negativo, ¿eh? ¿Vas a decirme que sí a algo de lo que te diga?

—No.

—Toma, bebe agua.— Jun se acercó hasta el contrario con el vaso en sus manos. —Seguro que tienes sed.

—No tengo sed, ni hambre, ni estoy cansado. Estoy perfectamente.

—Solo te estoy ofreciendo agua, hombre. No hace falta que te pongas así. Para una persona que se preocupa por ti...

—Cállate, Jun.— Wonwoo giró a mirar a otro lado. —Solo quiero irme de aquí...

—Tendrás que seguir esperando.— Jun se encogió de hombros. —Si fuese por mí te dejaría irte, pero yo solo cumplo órdenes.— Después de un par de minutos en silencio, volvió a insistir. —¿Agua?

Wonwoo, que ya empezaba a ponerse algo nervioso, acabó cogiendo el vaso para dar un par de tragos.

—Muy bien.— Sonrió el mayor. —Ahora siéntate, es por tu bien.

Por otro lado, Mingyu comenzaba a estar algo preocupado. Ya había pasado una hora desde que Wonwoo le dijo  que volvería a casa andando y aún no le había avisado para decirle que había llegado sano y salvo.

—Qué raro...— Mingyu cogió su teléfono para llamar al menor.

Wonwoo, que empezaba a sentirse mareado y notaba que se le nublaba la vista, se apresuró a coger su móvil, pero Jun fue más rápido que él.

—No está permitido hablar por teléfono aquí.— Sonrió antes de colgar la llamada y apagar el teléfono. —De momento me lo quedaré yo.— Dijo antes de guardar el aparato en el bolsillo de su chaqueta.

—J-Jun... ¿q-qué le has echado al agua?— Wonwoo cerró los ojos con fuerza. De repente la luz le deslumbraba, todo se volvía más borroso y confuso a cada segundo que pasaba y apenas tenía fuerza para mantenerse de pie; lo que hizo que se tuviera que apoyar sobre el sofá para evitar caer al suelo.

—Vaya, Wonwoo.— Jun se puso de cuclillas para estar a la altura del contrario. —¿Te encuentras bien? Tienes mala cara.

—Q-qué has hecho...— Wonwoo luchaba por ponerse de pie y poder salir corriendo de ahí, pero su cuerpo no respondía y acabó tumbado sobre la alfombra del suelo.

—Oh, mira quién ha llegado.— Sonrió.

El de pelos rizados pudo escuchar el sonido de unos pasos acercándose hasta él.

—Cuánto tiempo, Won. Me alegro de volver a verte.

Hasta que sus ojos acabaron cerrándose y, de repente, todo se volvió negro.

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BUENO, VAYA GIRO HAN DADO LAS COSAS. La verdad es que no tenía pensado nada de esto, PERO A VER CÓMO SALE.

Solo díganme si les gusta cómo va este fic y no les parece raro, porfis