☂️ 19 ☂️

951 103 1
                                    

—Tata, tata.— Repetía el pequeño Jeonghan con emoción mientras intentaba meter el dedo en el dulce.

—¡No, no! Aún no se puede comer, Hannie.— Mingyu alejó a su hijo del pastel. —Tenemos que esperar a Onu, ¿vale? Es su cumpleaños hoy, ¿sabes?

—¡UMPE, UMPE!— Exclamó el niño mientras daba palmadas.

Mingyu tuvo que mandar a Wonwoo a comprar a un supermercado algo lejano solo para tener una excusa para que el menor saliera de casa y él pudiera prepararle la sorpresa del cumpleaños.

—¿Me quieres ayudar a prepararle la sorpresa, cielo?

—¡SHÍ, SHÍ!

Mientras que ellos dos estaban ocupados en casa, Wonwoo había andando más de treinta minutos para llegar al supermercado que Mingyu le había dicho.

—¿Para qué quiere unas papayas ahora? ¿No podría haberlas comprado en la frutería que hay frente a casa, directamente?— Se quejó Wonwoo para sí mismo. —Creo que ni siquiera es la época de papayas ahora...

Cuando estaba buscando en la sección de la fruta, sonó su teléfono.

—Dime.

—¡Won! ¿Sigues en el supermercado?— Preguntó Mingyu.

—He llegado hace dos minutos. ¿Por qué?

—¡Oh, necesito que compres algo más!

—¿El qué?

—Pues... pues... ¡cocos!

—¿Cocos?

—¡Sí, eso! ¡Cocos!

—¡No hay cocos ahora!— Wonwoo empezó a enervarse.

—¡Sí que los hay!— Insistió el más mayor. —Solo tienes que buscar bien~

—Ts... está bien.

—¡Gracias! Te quiero~~ — Dijo antes de colgar.

—Já... cocos...

—Vamos, Jeonghan. No tenemos tiempo.— Se quejó Mingyu mientras vestía a su hijo con prisas. ¿Por qué había tenido que llamar a Wonwoo para pedir algo que no necesitaba? Jeonghan, en un intento de volver a probar la tarta, acabó cayéndola de la encimera de la cocina.

Mientras, el pequeño lloraba porque su padre le había reñido.

—Hannie, lo siento. No quería gritarte así.— Mingyu hizo un puchero con los labios mientras acariciaba las mejillas de su pequeño. —Perdóname, Hannie. Mira, vamos a ir a comprar otra tarta, ¿vale?

—T-tata...

—Y la vas a elegir tú. ¿Quieres?

—S-shí.

—Ya verás que guay.

Cuando Mingyu y Jeonghan ya llegaron a la tienda para buscar una tarta nueva, llamó a Wonwoo de nuevo.

—¿Qué quieres ahora?— Wonwoo frunció el ceño al descolgar la llamada.

—¡Won! ¿Sigues en el supermercado?

—Estoy esperando para que me cobren. ¿Acaso necesitas algo más? ¿Un ojo de dragón, quizá?

—¡Oh, nada! ¡Vale! ¡Vuelve con cuidado a casa!— Y colgó.

—Pero- ¿qué le pasa a éste hoy?

—Vale, Hannie. No tenemos tiempo. ¿Qué tarta te gusta más de estas?

—¡Mia, mia!— Dijo el pequeño mientras señalaba a una en concreto.

—¿Esa?— Mingyu puso una cara extraña. —Bueno... no pega mucho con el momento, pero cogeremos esa, Hannie.

Kidult • {Meanie}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora