A la tarde del día siguiente, Mingyu ya salió de la UCI y le llevaron a una habitación.
Wonwoo se sentó en el sillón que dejaban para las visitas, al lado de la cama.
—Wonwoo, deberíamos irnos a casa un rato.— Dijo Joshua.
—No.
—No nos hemos duchado en dos días. Y tú tienes que comer y descansar en casa.
—No quiero irme. Me quiero quedar con él.
—Joshua tiene razón, cariño. Tienes que irte a casa, llevas un par de días de mucho estrés.— Intervino Mingyu.
Wonwoo negó varias veces con la cabeza.
—No quiero.— Se cruzó de brazos, como un niño pequeño.
—Wonwoo, vete a casa.— Insistió el mayor. —Date una ducha, ponte cómodo, cena bien y duérmete. Mañana puedes volver a primera hora.— Sonrió.
—Pero yo quiero estar contigo, hyung.— Wonwoo hizo un puchero con sus labios, amenazando con empezar a llorar.
—No me va a pasar nada, Won. De verdad, puedes irte tranquilo. Que Joshua se quede contigo en casa, así no te aburres tanto.
—Ts... está bien...— Con resignación, se levantó del sillón y se inclinó un poco para besar la frente ajena. —Llámame si te pasa cualquier cosa.— Dijo Wonwoo mientras dejaba el teléfono móvil en la mano del más mayor. —Y si no lo haces, te mataré yo mismo.
—A sus órdenes, mi sargento.
—Descansa, Gyu.— Sonrió Joshua antes de salir de la habitación, seguido por Wonwoo, que no iba muy contento por haber sido obligado a irse a casa.
—Tengo que pasar por mi casa primero para coger un par de cosas.— Explicó el mayor cuando ambos subieron al coche. —No te importa, ¿verdad?
—No, claro que no.
Cuando Joshua aparcó frente a su casa, Wonwoo se había quedado dormido. Así que optó por dejarle dormir hasta que llegaron a la casa del menor.
—Won, ya hemos llegado.— Dijo Joshua mientras daba unos toquecitos sobre la pierna ajena.
—¿Ya?— Cuestionó Wonwoo mientras estiraba su cuerpo.
—¿Qué tal la pequeña siestas que te has echado en el coche?— Sonrió.
—Pues... muy bien, la verdad.— Contestó mientras se frotaba los ojos. —Quiero dormir más...
—En cuanto te duches y cenes.
Después de que ambos se ducharan y cenaran, Wonwoo dejó a Joshua dormir en la habitación de Jeonghan, ya que estaba libre y no tenía ninguna cama de sobra.
—No te importa dormir aquí, ¿verdad?
—Por supuesto que no.
Wonwoo quitó los peluches que había sobre el colchón y Joshua le ayudó a quitar la valla de seguridad que ponían en el borde de la cama para evitar que Jeonghan cayera al suelo mientras dormía.
—Te dejo una manta más por si tienes frío. ¿Quieres otra almohada?
—No, Won. No te preocupes. Así está perfecto.— Sonrió el mayor.
—Vale. Entonces, que descanses.— Wonwoo se despidió con un gesto de mano antes de salir de la habitación.
Joshua consiguió dormirse enseguida, a diferencia de Wonwoo, que no era capaz de conciliar el sueño.
Dio vueltas y vueltas sobre el colchón e intentó colocarse de mil posturas diferentes, pero nada le funcionó. No era capaz de dormir si no tenía a Mingyu a su lado.
—Ains...— Se incorporó sobre el colchón, dándose por vencido. —Pero tengo sueño...— Frunció el ceño. Estaba frustrado. Claro que tenía sueño, muchísimo; pero le faltaba Mingyu.
Después de pensarlo por varios minutos, se cambió de ropa y cogió una mochila. Caminó a la cocina y metió dentro de ésta un par de yogures con sabor a coco, un paquete de sus galletas favoritas y algún que otro dulce.
Cogió papel y bolígrafo y escribió una pequeña notita que dejó al lado de la cama de Joshua con total sigilo.
Se puso las zapatillas y salió de casa. ¿Dónde iba? Al hospital, por supuesto. Solo tuvo que coger un taxi para llegar en unos 10 minutos.
Cuando Wonwoo entró en la habitación, Mingyu estaba plácidamente dormido. Algo totalmente normal, teniendo en cuenta que era la una de la madrugada.
Arropó bien al mayor y le besó la mejilla antes de sentarse en el sillón y sacar uno de los yogures que había traído en su mochila.
Ahora que ya estaba al lado de Mingyu, el sueño le venció y cayó dormido con el envase del yogur todavía en sus manos.
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A la mañana siguiente, cuando Joshua despertó y no vio a Wonwoo por toda la casa, entró en pánico.
Hasta que vio aquella pequeña nota escrita con un bolígrafo rosa.
"Hyung, no puedo dormir. He cogido comida y voy con Mingyu. Te espero en el hospital :p"
—Ains... este Wonwoo.
Por otro lado, cuando Mingyu abrió los ojos, lo primero que vio fue a Wonwoo dormido en el sillón. Tenía las piernas subidas al sillón y la cabeza apoyada sobre el respaldo de éste. Además, la camisa azul que llevaba puesta, estaba ligeramente caída sobre su hombro
Justo en ese momento, Joshua entró en la habitación.
—Ais, sí que estaba aquí.— Susurró, para no despertar al menor.
—¿Cuándo ha venido?— Cuestionó Mingyu. —No le he escuchado entrar.
—No lo sé. Se ha escapado por la noche y ha venido por su cuenta.
—Seguro que no podía dormir.— Sonrió al mirar a Wonwoo, con ternura. —Hyung, arrópale con una manta, tendrá frío.
—Oh, claro.— Joshua echó el respaldo del sillón un poco hacia atrás, para que Wonwoo estuviera un poco más tumbado; y, después, le arropó con una manta que había guardada en el armario.
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La ropita de Wonu PORQUE ME DA MUCHA TERNURITA 😭😭😭😭😭😭😭
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