-¡Estoy harta de estar sola, maldita sea!
¡Quiero morir de amor!
Así le dijo Julia esa noche, a su mejor amiga, Mariana.
Mariana se rió con desenfado.
-¡No te rías! Tú porque estás en pareja, aunque seguramente no mueres de amor.
¡Necesito morir de amor! Hoy mismo saldré y te aseguro que lo lograré.
Allá se fue Julia en busca de ese hombre que sabía que le cumpliría su deseo.
Caminó mucho, se adentró en el bosque, salió en la playa, y fue cuando la vio.
Miró su mochila, se aseguró de que llevaba el celular y el cargador, y se dirigió hacia esa cabaña solitaria que había descubierto.
Apenas unas luces lúgubres iluminaban la cabaña, pero a ella se le antojaron románticas.
Abrió suavemente la puerta que chirrió de manera espeluznante.
No se asustó.
Lo que la aterrorizó fue esa figura de capa negra, en la que solo destacaban unos ojos rojizos.
Siguió mirando y vio al hombre que pensaba llamar. Corrió hacia él pero el hombre se alejó.
-¡Ve!, susurró esa extraña figura. Hoy cumpliré tu deseo.
-¿Qué deseo?, preguntó Julia.
-¡Hoy morirás de amor!
Julia corrió hacia su amor y en sus brazos dio su último suspiro.
ilargiluna
7/12/2021
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Microrrelatos
FantasyBreves relatos que van surgiendo a partir de una motivación, a veces propia, a veces de terceros, pero la mayoría de las veces es pura fantasía. Son muchas las ocasiones en las que una frase, una canción, una película, llevan a mi mente a fantasear...
