Hoy es 2 de noviembre y extraño el barrio que visitábamos con papá.
Cada día, en esa fecha, nos vestíamos bien "paquetes" y salíamos rumbo al cementerio.
En lugar de bizcochos comprábamos flores y salíamos a visitar a la "familia de los muertos ".
A veces nos sentábamos en algún panteón para escuchar viejas historias familiares. A mamá no le gustaban mucho esas visitas pero aguantaba estoicamente.
¡Yo las disfrutaba! En esas recorridas conocí la vida de mis ancestros. ¡Hubo de todo! Vidas tranquilas, gente trabajadora, historias de la Primera Guerra Mundial, donde mi abuelo paterno se fue de voluntario, escapando de su padre que lo quería hacer trabajar, hubo amantes, abortos y apariencias.
¡Qué familia mi familia!
También visitábamos La Tumba del Soldado Desconocido, que era vecina a la de mis abuelos paternos. En ella nos trepábamos con mis hermanos en busca de "algo". Recuerdo vívidamente la emoción que sentíamos cuando encontrábamos pelos y las historias que creábamos a partir de esos mechones.
Ir al cementerio era lo más divertido que hacíamos ese día, ya que en casa, abuela no nos permitía escuchar música ni hacer demasiado bochinche. Según ella a los muertos había que recordarlos en silencio y con dolor.
Con papá aprendí a recordarlos con alegría y con chistes de humor negro y eso... ¡mencantaaa!ilargiluna
2/11/2022
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Microrrelatos
FantasyBreves relatos que van surgiendo a partir de una motivación, a veces propia, a veces de terceros, pero la mayoría de las veces es pura fantasía. Son muchas las ocasiones en las que una frase, una canción, una película, llevan a mi mente a fantasear...