Se tomaron de la mano y se fueron a caminar por la playa.
Era una noche clara, de luna llena. El cielo se mostraba radiante, con miles de estrellas que, junto a la luna, iluminaban la arena húmeda.
Sin decir una palabra, sus pasos se encaminaron hacia el enorme árbol, que fue testigo de su primer beso.
Allí se detuvieron y buscaron el corazón que en aquel entonces grabaron. Allí estaba. Resaltaba entre cientos de corazones que los amantes grababan, con la esperanza de que el amor que los unía fuera para siempre.
También ellos tuvieron esa esperanza.
Él la recostó al conocido tronco y comenzó a besarla. Eran muy dulces sus besos, llenos de ternura. Ella se abandonó en sus brazos.
Al fin y al cabo... se amaban.
Mas de pronto, las manos del hombre dejaron de acariciar. Se tornaron violentas. También su mirada cambió. El amor dio un paso al costado y el odio y la rabia se apoderaron de su mirada.
Y la mirada de ella, que hasta ese momento irradiaba confianza y amor, ahora mostraba miedo... mucho miedo.
La historia se repetía día tras día, pero ella aún tenía esperanzas. Quería creer que él la amaba como aquel día en que por primera vez la besó, junto al árbol que hoy visitaban.
Ya no veía la luna ni las estrellas. La noche se le volvió negra y el aire, hasta entonces tan diáfano, ahora era pesado, viscoso, difícil de respirar...
Y de pronto... la nada...
Él se dio media vuelta, puso sus manos en los bolsillos del pantalón y se alejó silbando de aquel lugar.
La noche era clara, con una hermosa luna llena y el cielo salpicado de pequeños diamantes.ilargiluna
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Microrrelatos
FantasyBreves relatos que van surgiendo a partir de una motivación, a veces propia, a veces de terceros, pero la mayoría de las veces es pura fantasía. Son muchas las ocasiones en las que una frase, una canción, una película, llevan a mi mente a fantasear...