Darwin #2

¿Ruido?

CAPÍTULO 10

Darwin.

Caminaba detrás de ella, mientras se acomodaba el cabello desordenado, el mismo que yo había desordenado al tenerlo entre mis manos. Su ropa estaba arrugada y ella simplemente pasó una mano sobre ella, sonriendo con vergüenza. Al llegar a la cocina, Keaton es el primero en examinarme con la mirada, alzó una ceja y se burló.

-¿Qué te pasó? ¿Te succionaron la boca, o qué?-pasé mi lengua por el interior de mi mejilla y golpeé su hombro con mi puño.

-Cierra la boca-murmuré.

Merlín se había ido directo a los brazos de Lola, quien la recibió con los brazos abiertos y un beso sobre su sien. Ella estaba cómoda entre sus brazos, como estuvo entre los míos. Me sentí halagado.

-¿Cómo te la cerraron a ti?-preguntó con diversión.

Rodé los ojos y me apoyé contra el pilar que había en la cocina. Keaton dejó de mirarme para observar a Asher, quien estaba pegado detrás de un muro mirando hacia afuera, como hipnotizado.

-Tengo un presentimiento de que Valezca y Asher son elegidos, pero la caja no ha dado a conocer eso, ya que falta algo que los una-deduce, mirando fijamente a Asher.

Analicé su teoría y realmente suena muy convincente. Asher sintió en su pecho un lazo, como yo lo sentí, como Callum lo sintió. Quizás, Valezca sea su elegida, pero la caja no lo confirma aún porque falta su hermana... Puede ser. Sería la misma teoría que Keaton.

Ante tal teoría, veo como Merlín nos frunce el ceño. Sus ojos estaban rojos y una de sus manos estaba apoyada sobre el estómago de Lola, quien le susurró algo al oído que la hizo sonreír.

-Quizás tu teoría se haga realidad. Sólo debemos esperar hasta que Valezca y sus hermanas aparezcan.

Keaton me dio la razón y me tomó del brazo.

-Asher es bastante cerrado, no cuenta mucho sobre él... ¿Crees que le guste Valezca? Lo he visto mirarla todas las veces que nos encontramos con ella, es raro. Sus ojos brillan con solo verla, ¿y si se alteró las elección de elegidas para él?

Hago sonar mi garganta y me giro, recargando mi espalda contra el pilar, mirando a Keaton.

-¿Crees? Podría ser. Quizás Asher sintió atracción, pero la caja no ha dado a conocer sus elegidas porque se alteró todo el proceso por esa atracción...

Keaton alzó sus dedos al aire y abrió la boca muy grande.

-Puede que sea aquello.

(...)

No podía quitarme su imagen de mi cabeza. Como agarre su cuerpo de manera inmediata cuando nuestros labios se encontraron. No podía. Simplemente era jodidamente imposible quitar su imagen de mi mente.

Y eso lograba noches de insomnio.

-Vamos, Darwin. Duérmete ya-susurré para mi mismo, mirando el techo de mi habitación. Bufé cuando fue imposible.

Cierro mis ojos, acomodando mi cuerpo en la gigantesca cama y trato de dormir, sin embargo mis ojos volvían abrirse cuando recordaba sus gemidos, jadeos y besos.

Ash...

Tensé mi cuerpo cuando la puerta de mi habitación se abrió sigilosamente. Mire por encima de la brazada que cubría mi barbilla y vi como Merlín cerraba la puerta tras su espalda y caminaba de puntillas hacia mi cama, cerré mis ojos fingiendo que estaba durmiendo hasta que sentí sus dedos rozando mis mejillas con mucho cuidado, ella tenía la intención de despertarme.

-Darwin-murmuró cerca de mi oído. Abrí un ojo y agarre su mano justo antes de que me tocara nuevamente la mejilla-No se que está ocurriendo, pero hay mucho ruido afuera. Tengo miedo-confesó.

-¿Ruido?-repetí.

Ella asintió, haciendo que su cabello cayera de su moño desordenado hacia sus hombros.

-Desde la ventana vi que habían unas luces alumbrando nuestra casa. Nos están rodeando... ¿Crees que sea Dein?-con duda agarre delicadamente su mano y la empuje hacia mi cuerpo.

-No es nada malo. Quizás están viendo si hay algo afuera y... -el ruido de algo cayéndose en el balcón me avisó que no era nada bueno. Merlín tocó mi pecho y con cara de miedo, me ayudó a levantarme de mi cama. Me tendió una camisa que tenía sobre ella y me tomó de la mano-Sea lo que sea, no te separes de mí, ¿okey?

Ella asintió de inmediato, refugiándose entre mis brazos cuando volvimos a escuchar un fuerte ruido en el balcón. Escuchamos a alguien pidiendo silencio y luego un quejido.

-Darwin, tengo miedo-murmuró Merlín, apretando su cabeza contra mis pectorales. Su cuerpo temblaba y sudor bajaba de sus sienes.

Rodeé su cintura con mi brazo y ambos caminamos hasta la ventana. Nuestra casa tenía dos pisos, y para bajar al balcón, había una larga red como decoración. Una que nos serviría de mucha ayuda.

-Bajemos por la red-susurré, ella asintió con la cabeza y fue la primera en salir de la ventana, bajando por aquella red, la seguí y cuando llegamos al final, di una repasada al balcón. Estaba vacío y el ruido se escuchaba adentro, pero pensé mal cuando alguien me cubrió la boca y me jalo hacia atrás.

Caí sobre el cuerpo que me tenía y me gire rápidamente, golpeando con mi codo su rostro, me levanté apresurado viendo como Merlín golpeaba a alguien con los bancos de madera en la cabeza. Ella me observó y ambos miramos a nuestro alrededor.

No había nadie más.

Merlín con prisa se acercó a mí y me agarró de la mano, murmurando silenciosamente que la siguiera. Ella me llevó hacia las escaleras que descendían al mar y con cuidado comenzamos a bajar.

Ella fue la primera en entrar al agua, Merlín casi chilló, sin embargo se cubrió la boca con su mano y me miró. Sus ojos estaban rojos y respiraba aceleradamente.

-Sígueme.

Asentí y cuando sentí el agua tocando mis piernas, me queje y caminé sobre las piedras que había abajo, seguí a Merlín que se estaba dirigiendo detrás de las escaleras, donde había como una pequeña cueva oscura, ella me tomó de la mano y me arrastró, hasta tenerme acorralado contra la pared húmeda de rocas que sostenía la casa.

-¿Qué es esto?-pregunté.

Merlín me abrazó sobre los hombros y me miró fijamente.

-Shh... hay alguien arriba-me silencio, posando su mejilla contra la mía.

Sentí las punzadas en mi corazón acelerado. Ay, por Dios. Ahora no, por favor. Merlín parece notar que me siento mal, cuando me acerca más a su cuerpo y enrolla sus piernas por debajo del agua alrededor de mi cintura.

Y los sentí.

Los pasos bruscos por encima del balcón. Se escucha un quejido y una conversación que no alcanzó a escuchar muy bien.

-Están diciendo que dan por terminada la misión, ya que fue fallida-susurró Merlín cerca de mi oído. Asentí y comencé a tomar largas respiraciones.

Ella sacó su cabeza de mi cuello y nos miramos, quedando solo a centímetros. Sus labios estaban tan cerca de mí, estaba jadeante, sus labios rojos... sus piernas alrededor de mi cintura y en un lugar oscuro.

No, Darwin. Cálmate.

Su pecho subía y bajaba sobre el mío, ambos se estaban rozando. Su respiración chocaba contra mis labios, sus piernas desnudas tocaban la piel descubierta que dejaba mi camisa, sus brazos estaban enrollados alrededor de mi cuello y nuestros ojos.

Estaban conectados.

Joder.

Y se escuchan las bocinas de los guardias afuera. Los gritos de Tatum dando órdenes y el grito ella queriendo saber a donde estábamos.