Capítulo 67.

215 25 2
                                    

Todo fue demasiado tenso esa noche. No me habló cuando acabe de contarle todo, solo se levantó del sofá y se encerró en su habitación para salir un rato más tarde para simplemente darme a entender que entrara y que podía dormir con él. 

Él durmió en la esquina más alejada de mi, y yo a diferencia de él no pude dormir en toda la noche. Cuando conseguí descansar por media hora, una pesadilla me devolvió la imagen que esa misma tarde había visto. Recordar el contenido del paquete fue suficiente para hacerme levantarme de la cama y salir corriendo en dirección al baño y dejar que todo saliera. 

Comprendí que Nate seguiría a mi lado cuando noté como se arrodillaba a mi lado y me agarraba el pelo mientras me acariciaba la espalda tenso.


**

El ruido de las persianas subiéndose automáticamente me despertó de una manera poco bonita. Subí las sábanas hasta mi cabeza cubriéndola como podía. 

El colchón se hunde debajo de mi y me acuerdo al momento de donde estoy. Me giro con cuidado hacia el lado contrario de la luz, y bajo las sabanas viendo a Mai sentado de espaldas a mi.

¿Qué hace Maison aquí?

— Em, ¿hola? —digo incorporándome. Mi amigo se gira al momento con una sonrisa.

— Hola. —Se levanta de la cama y me mira de pie. Nota mi desconcierto y abre la boca para abrir. — Me ha llamado para que viniera a vigilarte mientras iba a no sé donde. 

— Ah. 

— Lo sabe todo, ¿no? —me pregunta sabiendo completamente la respuesta.

— Si.

— ¿Cómo reaccionó? —pregunta mientras me giro para ponerme en pie.

— No lo sé. Me gritó cuando se enteró de lo de la mafia, y luego cuando acabe de contarle completamente todo simplemente se levantó y se encerró. Ya después me dijo que entrara a dormir, aunque esta noche me he levantado mal y me ha ayudado por que he vomitado.

— ¿ Y eso? —pregunta mientras me sigue con la mirada acercándome a él.

— Eso es algo que tengo que contarte.

— Escupe.

— Esto... ¿Salimos fuera? —pregunto.

— No, me ha dicho que no deje que salgas del piso. 

— Ah, claro. —Casi sonreí por que al menos no me quería fuera de aquí. Eso debía significar algo.

— Bueno, cuenta. 

Salgo de la habitación con él detrás, y me acerco a la isla de la cocina una vez he pasado el salón. Cojo un vaso y lo lleno de agua.

— Bueno... me llegó un paquete a casa y... bueno lo abrí ayer mientras Nate me esperaba en el coche por que nos íbamos a venir aquí. Cuando lo abrí... Mai era un... era un corazón verdadero. —Abre los ojos exageradamente. — No supe como reaccionar, me dio un pequeño ataque de pánico, y Nate subió viendo el paquete. No sabía que pasaba y se quedó en shock, como yo. Llamé a Thiago y Loren vino al piso a revisar la caja. Encontró una nota de amenaza dejando claro que no estaba segura si era lo que pensaban y que sabía donde vivía lógicamente. Amenazó con que le dieran lo que quería o el próximo paquete vendría con el de Thiago dentro.  

» Loren me dijo que no podía estar sola, y mucho menos debería pisar mucho tiempo mi casa. Después bueno... pues tuve que venirme con Nate aquí y ya lo expliqué todo.

Jefe de la mafia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora