Silencio. Un profundo silencio que significaba lo sorprendidos que estuvieron las otras dos personas que oyeron la confesión del pelinegro. La marca había desaparecido y ese era un hecho difícil de procesar.
-Di algo -susurró Taehyung con la voz entrecortada, se notaba lo asustado que estaba de que sus acciones repercutan a sobremanera.
-¿Estás seguro? -el mayor se acercó a él y llevó sus manos al cuello de su casaca, buscando el lugar donde lo había marcado.
Pero no estaba, simplemente la marca se fue sin dejar rastro. Es por eso que era una marca temporal, porque en algún momento iba a desaparecer. ¡Pero ninguno esperó que lo hiciera tan pronto y de la nada! Ese mito era cierto, que cuando ninguno de los dos tuviera sentimientos románticos por el otro la marca se iría. Sus lobos al fin confirmaron que no era necesario unir con una marca a dos personas que no estaban enamoradas.
-Está bien, está bien -comenzó a repetir para tranquilizar al menor-. Nadie se dará cuenta, no hay de qué preocuparse.
Hicieron aquel trato de la marca ambos con sus propios motivos personales, motivos que aún no habían logrado concretar en su totalidad así que obviamente no era una buena noticia. Pero lo cierto es que sabían que la solución era fácil, solo fingir que nada pasó y que la marca seguía ahí, que ellos seguían siendo la pareja feliz que eran.
-Perdón, me dejé llevar sin pensarlo antes... no debí ser tan descuidado con mi celo.
Y es que desde aquel sermón de Jungkook, Taehyung no había dejado de pensar en que todo era su culpa. Sentimientos como tristeza o decepción de sí mismo lo lastimaban conforme lo anterior dicho hacían eco en su mente. Y el hecho de que el dueño de aquellas palabras siguiera ahí, con los ojos muy abiertos y pegado lo más posible a la pared hacía difícil que olvidara su discusión de hace un rato.
El menor tampoco se encontraba bien. Era impulsivo, pero también sabía arrepentirse cuando hablaba de más, y sí que sabía que había metido la pata al comprender el malentendido que hubo. Porque, además de la confesión de Kim, también pudo observar que Jimin acababa de llegar recién y que en efecto, esa marca ya no estaba. Todo indicaba que a quienes escuchó anoche no eran Jimin y Taehyung, y por eso ahora mismo se encontraba en blanco, sin saber qué hacer después de haber soltado todas esas palabras hirientes en vano. Al notar que el contrario también se encontraba igual de incómodo que él, intentó huir. Evitar a toda costa lo que sea que el alfa fuera a decirle, esa era su prioridad mientras lentamente retrocedía sus pasos con sigilo.
-Esta vez no te saldrás con la tuya -sentenció el mayor justo cuando el omega ya estaba a un paso de llegar a la puerta y salir corriendo.
El aludido pegó un pequeño brinco en su sitio, sorprendido por las palabras de su ex novio pero aún así intentando irse de nuevo.
-No puedes solo explotar y esperar que tus palabras no tengan consecuencias -Jimin estaba molesto y esta vez no pensaba callar.
Su mejor amigo, quien dos minutos antes también había intentado zafarse de la situación con la pobre excusa de que debía contarle a Seokjin, lo miraba con súplica de que dejara el tema ahí y ya no siguiera. Pero el tema de Jimin ya era personal, bajo la justificación de que lo hacía por Taehyung, en realidad lo hacía por él y todo lo que se había contenido de expresar el día anterior.
-Ayer no dije nada porque merecía todas esas palabras -continuó al no recibir respuesta-. Pero Taehyung no se merece nada de lo que dijiste no solo ahora, sino desde que llegó a esta casa. Fuiste muy cruel con él y yo fallé como su amigo al no defenderlo antes.
-Siempre lo defendiste -refutó virando los ojos-. Hablas como si Taehyung no hubiera sido tu prioridad todo este tiempo.
Y es que en toda historia siempre hay dos partes, y aunque estas tengan diferentes versiones no significa que una tenga que estar errada. Jimin y Jungkook tenían distintas personalidades y distintas formas de ver las cosas.
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missed u [jikook au]
RomanceJungkook ya no era el omega chiquito que no podía ni robarle un beso y, después de tres años desde su dolorosa separación, al fin se lo probaría. Pero nada salió como planeó, y la indiferencia del alfa no sería lo peor de su regreso. -Jimin, ¿por qu...