Amor Verdadero | οмєgανєяѕє

Capítulo 58

AMOR VERDADERO
OMEGAVERSE
BY ELI FROST
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–"Bueno"–.

–"Hola Taiyō, tiempo sin hablar ¿No crees?"–.

Cuando Taiyō escucho eso rápido reconoció la voz de Hana.

–"¿Hana?, ¿Qué..."–.

–"Escuché que estabas buscando a alguien, tal vez yo pueda ayudarte"–.

Taiyō se quedó pensando por unos segundo y rápido reaccionó.

–"Tu, fuiste tu, ¿Dónde tienes a mi hija?"–.

–"Te pido de corazón que tranquilices, no querrás que se despierte"–.

–"Solo dime dónde está mi hija"–.

–"Solo tienes que venir y con mucho gusto te encontrarás con ella"–.

–"¿En qué lugar?"–.

–"Ven a la bodega que están a lado del río a las 7 de la noche, SOLO y te prometo que podrás verla, por cierto, no menciones de esto a nadie, de lo contrario podrían pasar cosas un poco desagradables"–.

–"Te advierto que si le haces algo..."–.

–"Tranquilo, no sería capaz de hacerle nada, después de todo quizás podríamos ser algo en un futuro"–.

Antes de Taiyō pudiera responder, se cortó la llamada.

Cuando Tsuki vio que colgó la llamada rápido le pregunto.

–¿Qué pasó?–Pregunto algo desesperado–.

–Hana tiene a Nisshoku–.

–¿Hana?–.

–Si, ella se la llevó–.

Tsuki no le sorprendían mucho que ella hubiera hecho eso, ella siempre le había dado señales de desprecio y desagrado, pero ahora lo importante era rescatarla sana y salva.

–¿Te pidio que fueras no?–.

–Si, la cosa es que no me pidió dinero, me dijo que fuera a la bodega que está a lado del río y que fuera solo, como tal no es un rescate–.

–Ella te quiere a ti, aún sigue enamorada, el dinero no le importa–.

–Cierto, pero de cualquier forma tengo que ir, tengo que rescatarla–.

–Voy contigo–.

–¿Qué?, No, ella te odia y verte ahí puede que haga algo–Taiyō estaba decidido a ir solo, aún que Tsuki estuvieras en desacuerdo–Además, menciono que tenía que ir solo y que no se lo mencionara a las autoridades–.

–¿En serio piensas en ir solo?, Que tal si te sucede algo–Comenzó a hablar un poco desesperado–Hay que encontrar una manera para que pueda ir contigo–.

Taiyō se quedó mirando a Tsuki por unos minutos hasta que recordó algo.

–Creo que se me acaba de ocurrir algo–.

En ese mentó Taiyō tomo la mano de Tsuki y comenzó a dirigirse a la camioneta, en el camino le explicó lo que tenía en mente.

–¿Estás seguro de eso?–Pregunto Tsuki mientras extendía su brazo–.