continuación de mi historia "Lo he perdido todo- la hija de Itachi Uchiha".
una segunda temporada llena de batallas, sorpresas, Izune jamás imagino que un simple viaje haría que este a punto de perder todo lo que ama.
El amor es una de las cosas más complicadas que el ser humano ha creado con su sola existencia, es inevitable sentirlo al menos una vez en la vida, sin embargo este mismo sentimiento es muy fácil de desviar, puede transformarse en algo totalmente opuesto, como el odio, se dice que el odio es el opuesto oficial del amor y es irónico que a la vez sea lo más cercano, quien ama, odia, y quien odia, ama, es simple la mecánica.
¿Entonces debo amar u odiar? — pregunto la pequeña que estaba sentada al frente de su maestro.
Nosotros los humanos no podemos controlar las emociones, aunque te diera una respuesta, sería muy difícil que la sigas, el amor es improvisto y no depende de nosotros sentirlo, al igual que el odio, pero el resecar nos este sentimiento también es importante, si sientes amor y no es correspondido, seria mejor ocultarlo.... pero aun eres muy pequeña para esa conversación.
De acuerdo.
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. . .
¿Lo mato?, ¿o no? — susurraba la Uchiha mientras cortaba algunas verduras.— si lo mato ¿como lo haría? — empezó a presionar el cuchillo con más fuerza— todo sería mejor si lo mato, todo se resolvería, y podría seguir viviendo en..... — el cuchillo terminó en la muñeca de la chica y rápidamente la sangre empezó a salir, Izune busco un pañuelo para limpiarse la mano que la tenía empapada del líquido rojo y espeso que salía de ella— tsk, eso me pasa por tener pensamientos homicidas — se autoregaño.
En ese instante la puerta se abrió y el peliblanco la vio sentada en el suelo con un pequeño charco de sangre bajo su mano, el pañuelo estaba casi rojo y el cuchillo en la mesa también.
¡Mierda Izune!— exclamó mientras corría hacia ella para ayudarla—¿Que te ha pasado? ¿Te duele? ¿Quien fue? — atacó con preguntas dejando anonadada a la Uchiha.
Me corte— respondió sin ganas.
Eso ya lo sé, quiero saber como.... — el ootsutsuki se percato que la estufa estaba encendida y habían alguna verduras en la mesa— tu..... ¿Estabas cocinando?.
¿Crees que no como? — dijo como si fuera obvio.
Si me encargo de traerte comida todos los dias— recalco el chico mientras trataba de lavar el cuchillo.
El orgullo no me deja comer — respondió la ojiverde entredientes.
El orgullo ¿que?, espérame aquí traeré unas vendas— secundo mientras buscaba dentro de la habitación.
Izune estaba a punto de levantarse pero algo la detuvo.
¡No te muevas de ahí!— grito el desde el dormitorio,¿como demonios sabía que iba a hacer?.— encontré algunas— dijo mientras se acercaba a ella y la cargaba para poder llevarla al sofá.
Puedo hacerlo sola— agregó la pelinegra tratando de tomar las vendas.
No, te estas desangrando, ¿ni así pierdes el orgullo? — se burlo levemente mientras estiraba las vendas.
