Abr mis ojos pesadamente, sentía mi cuerpo muy débil y sin fuerzas, no lograba reconocer donde estaba o que hacia ahí, miraba en toda direccion posible para tratar de identificar aquel lugar pero no se me hacia conocido, las ventanas tenian mosaicos de muchos colores, aquella habitacion era enorme, de pronto escuche el chillido de una puerta abriendose, voltee direccion de ese sonido y encontre a un hombre sumamente extraño, tenia el cabello blanco y piel pálida traia puesta una especie de yukata de colores claros—¿Quien eres?, ¿Donde estoy?— fueron las palabras que salieron de mi boca, el entro en la habitacion y cerro la puerte, trate de buscar algo en mis bolsillos para defenderme ya que casi no tenia chakra, pero vi que tenia puesto un vestido largo que no me pertenecia.
Pense que tardarias mas en despertar, gastaste mucho chakra— respondio parandose allado de la cama, me quise poner de pie y golpearlo pero al sentarme eb la cama senti un pinchazo en el estomago muy fuerte, mi rostro se desfiguro en una expresion de dolor y me aprete fuertemente la zona que me dolia, aquel hombre coloco una de sus manos en mi espalda y yo me recoste involuntariamente en ella— no hagas movimientos bruscos, tienes una herida en el estomago que aun no sana.
Dime que me ha pasado— reclame volviendome a acostar.
Anoche...bueno esto no empezo anoche, veras, hace algunos meses....uno de los miembros del clan Ōtsutsuki me encerro en una prision de hielo porque temia que los traicionara, desde ahi a pesar de no poder moverme, tengo la habilidad de aparecer en la mente de las personas, sin embargo eso no me servia de nada....hasta....que te vi, pude ver tus habilidades y supe que las podia utilizar para salir de mi prision, pero debia ser en el momento justo, desde hacia dias observaba todo lo que hacias, vuando vi que decidiste salir de viaje supe que era el momento indicado, me meti en tu mente y utilize tu rinnegan, pero eso te dejo muy agotada y te desmayaste, al lado tuyo habia un hombre que se levanto, estaba herido pero podia moverse y te clavo un kunai en el estomago, inmediatamente fui a buscarte y te traje aqui, mis empleados vendaron tu herida y te vistieron para despues dejarte aqui.
Que lugar es aqui?— segui preguntando.
Es mi castillo— respondio con una leve sonrisa.
¿Y quien eres tu?.
Yo soy, Toneri Ōtsutsuki— revelo abriendo los ojos mostrando un vacio que parecia interminable.
Eres un..Ōtsutsuki!— me altere y el lo noto.
Calmate, no soy uno de ellos, soy descendiente de Hamura Ōtsutsuki y shinobi de la luna— justificaba.
¿Como se que no me estas mintiendo?— reproche sentandome con muchos esuerzos y dolor.
Si quisiera matarte ya lo hubiese hecho, pero no quiero y es por eso que te traje aqui para cuidarte— respondio, tenia sentido lo que decia.
De acuerdo— me tranquilice un poco— pero que te quede claro que...no confio en ti.
Eres facil de engañar— dijo y yo alze la mirada rapidamente, pero el estaba parada en la puerta dandome la espalda— si fuera tu enemigo quizas ya estarias muerta, deberias tener mas cuidado— dijo mientras volteba para sonreirme y salir de la habitacion.
Esa frase....el es..no...no es posible que el sea...aquel niño.
Flash back.
Habia salido de mi casa, hoy estoy dispuesta a aprender a conventrar chakra en mis pies, y decidi proberlo en el arbol mas alto de la aldea, fui muy bien, cuando estaba a unos metro de llegar a la cima senti un chakra extraño que me desconcentro por completo, provocando que cayera, pero antes de caer al piso alguien me habia sostenido, me tenia cargada como si fuera una princesa, parecia alguien como dos o tres años mayor que yo, y al parecer podia volar porque me tenia sostenida en el aire, lentamente fue descendiendo hasta llegar al piso y ahi me bajo.
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Izune Uchiha
Fanfictioncontinuación de mi historia "Lo he perdido todo- la hija de Itachi Uchiha". una segunda temporada llena de batallas, sorpresas, Izune jamás imagino que un simple viaje haría que este a punto de perder todo lo que ama.